Si hay un músico del siglo XXI al que proceso una verdadera admiración ese es Ryley Walker, al que he podido verlo cada vez que nos ha visitado y al que me une una cierta amistad, tal como me pasa con su colega Bill MacKay.

Lo que verdaderamente me impresiona de este chaval de Chicago es su integridad musical.Cuando hablas con él es la sencillez y la modestia misma, a cada disco sigue un camino tortuoso alejándose con alevosía del éxito fácil y rotundo. Él mismo lamenta del que tuvo con Primrose Green, un disco enorme y un tema homónimo que entrará en la historia por méritos propios y que le dio el empujón necesario para que un núcleo mayor de seguidores se interesara por él. Pero Ryley sigue su camino y factura un disco de improvisación instrumental con su amigo Bill y cuando es el caso como ahora se saca un disco increíble de su chistera como si nada. Eso si, siempre con la intención de reinventarse un poco y si, este Deafman Glace es la perfecta continuidad a Golden Sings That Have Been Sung .

Walker va un poco mas allá tomando elementos del Jazz, la psicodelia y  el mismo del rock progresivo para plasmar un inmenso fresco sobre un lienzo de cósmico tejido. Lo que hace Ryley es arte, no simplemente música, es un sonido que empezó bebiendo de John Fahey, John Martyn, Tim Buckley para convertirse en su sonido en una evolución permanente, mismo su voz a madurado y se a transformado en este ultimo trabajo. Sigue elaborando a semejanza de un alquimista baladas de increíble destreza con fingerstyle, unos valses psicodélicos cargados de raga y esa sensación de flotar en una aurora boreal .

No sé si el titulo Ryley lo tomó prestado y como inspiración de la obra teatral de Robert Wilsom que cuenta la amistad de Wilson con un niño sordo llamado Raymond Andrews, a quien adoptó como su hijo. La obra silenciosa fue construida con escenas fantásticas y la música de Ryley se podría ajustar al espíritu que evoca dicha obra, pero esto son simplemente suposiciones mías. Se percibe que Ryley sigue su senda para quitar el camino del folk y quiso crear un disco anti folk, alejándose pasito a pasito para adentrase en una obra que mezcla la esencia urbanista con la paz mas campestre, refleja al de Chicago mas sereno, maduro, meticuloso con el conjunto de las composiciones.

Cuenta con la esplendida ayuda de Cooper Crain que tocó todos los sintetizadores, Nate Lepine en la flauta, sus amigos J Sulpizio y Bill Mackay, Andrew Scott Young y Matt Lux, Mikel Avery y Quin Kirchner y el productor LeRoy Bach que produjo su anterior trabajo y por ello se palpa una perfecta continuidad entre estos dos discos. Walker tiene tan solo 28 años y mucho camino por delante para seguir ofreciéndonos obras tan espectacularmente confeccionadas. Con la mano sobre el corazón y la mente en perfecta simbiosis con su imaginación mas creativa, sin dejar que lo mercantil y lo especulativo del mundo del arte mancille su talento. Por poner un defecto, me ha parecido muy corto!

RYLEY WALKER – Deafman Glace

by: Laurent Berger

by: Laurent Berger

Tsi – Na – Pah estudió Bellas Artes y más tarde cocina. Actualmente recorriendo Andalucía vendiendo y comprando viejos vinilos. Apasionado del rock progresivo y del rock americano de los setenta. Colaborador en distintas revistas musicales y tiendas de música en la época donde se vendía música de verdad.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Últimas entradas

Últimos comentarios

  1. Discazo de principio a fin cuya producción elegantísima(cualquiera no lo pone sabe ejecutarlo) y cuyas letras made in Jon son…

  2. me gustaria saber autor y titulos de la musica de la pelicula…gracias

  3. La vida no es justa El amor una lotería que a veces toca Mientras montando la rueda de la fortuna…

Te puede interesar

The Good The Bad And The Zugly – Decade of Regression

The Good The Bad And The Zugly – Decade of Regression

Retorno con fuerza para comentaros la última de mis adorados THE GOOD THE BAD AND THE ZUGLY. Resulta que el pasado abril lanzaron su último disco conmemorando sus 10 años como banda azotando los escenarios. Su título es Decade of Regression (2024) y se me pasó por...

Jerry Cantrell – I Want Blood

Jerry Cantrell – I Want Blood

Hacía muchísimo tiempo que mi banda favorita no se pasaba por esta casa. Alice In Chains son algo más que una 'grupo especial' para mí, su sonido me sigue perturbando, quebrando y emocionando a partes iguales y qué decir de sus características e intransferibles...

Oldhands – Little bites

Oldhands – Little bites

Oldhands lo podríamos traducir como perros viejos, más aún para la ocasión ya que el germen de estos hard rockers extremeños parte de la base de dos músicos, Albert Cooper y J.M. Savage, con pasado en bandas como Arcángel, Marggot Brain o The Buzos y que después de...

Soziedad Alkoholika – Confrontación

Soziedad Alkoholika – Confrontación

Posiblemente Soziedad Alkoholika sea una de las bandas más fiables del panorama musical estatal. Te podrá gustar más o menos su propuesta, pero el tiempo ha demostrado que mantienen una línea a seguir que les hace estar siempre a un gran nivel y que sus discos en...

Opera Magna – Heroica

Opera Magna – Heroica

Me fascina de manera similar, como lo que casi antes de ayer alcanzaba la primera plana hoy ocupa un segundo lugar en el opaca estancia de la actualidad musical, a la vez que las décadas van pasando página dejando como índice los retazos de aquellos sonidos que...