Una de las más grandes creadoras de la historia de la música negra , la enorme MAVIS STAPLES edita su nuevo disco IF ALL I WAS WAS BLACK construido a medias con el Wilco ,Jeff Tweedy con el cual ya hace siete años nos deleito con el maravilloso You’re Not Alone , producido por el citado
Mavis una de las más importantes luchadoras por los derechos sociales americanas no iba a dejar pasar la ocasión de la mano de Tweedy de golpear a la sociedad y política americana , dadas las circunstancias actuales que vive la política norteamericana y por ello la mayor parte del disco se muestra como una forma de despertar conciencias y agitar mentes ante la tragedia que se plasma en la Casa Blanca. Su pretensión es ofrecer CANCIONES para reconciliar al Mundo . Un enorme granito de arena para construir una casa común
Una vez sentada la parte de las letras y la misión en general del lp debemos acercarnos a la parte musical siendo la primera agradable sorpresa es que aún tratándose de un lp planteado con efectos reivindicativos partiendo de una común reconciliación popular resulta que es un trabajo muy asequible , simple , variado y directo . Las guitarras eléctricas sin estruendo y el teclado sostienen los cimientos de las canciones al no contar con elementos de viento que como podría pensarse serían inevitables en un lp de soul ; es por tanto más un lp de rock soul o blues soul que de un sonido stax propiamente dicho . Un bajo y una inesperada caja de ritmos abre el lp con Little Bit , cuyo tiempo medio son unos simples solos de blues en una combinación atrayente ( algo que repetirá en Who told You That )para a continuación seguir con un melódico sonido de rock sureño adictivo en If All I Was Was Black dónde la voz de Mavis destaca precisamente por lo bonita que suena pese a que se aprecia ya una notoria pérdida de registro por la lógica edad de la artista. Tweedy se transmuta en Sly Stone para el dueto con Mavis en Ain’t No Doubt About It, y acudiendo a himnos eclesiales en las acústicas Peaceful Dream y All Over Again . Pese a mi cierta aversión al Tweedy he de reconocer que su toque y producción con esa batería de ritmo constante y riffs de guitarra en No Time For Crying convierten al mismo en blues rock de altos vuelos ( otra de las piezas básicas del disco ) sólo superada en magia por la salvajada de heavy boggie rock de Try Harder. Los dos temas que restan We Go High y los ritmos de soul caliente de Build A bridge se constituyen como las partes oasis por llevaderas del trabajo si bien esa cierta facilidad de consumo les confiere como las más prescindibles de todo un buen lote de productos de sabor negro que Tweedy y Mavis nos han regalado.
0 comentarios