Triste noticia, no por esperada resulta menos dolorosa. Ha fallecido Sinéad O’Connor. Nos ha dejado la voz más emocionante y valiente de las últimas décadas. “Quiero cambiar el mundo pero soy incapaz de cambiarme de ropa interior”. Con esta frase inició su concierto Sinéad O’Connor en Zaragoza en 2013, la única vez que la vi. La frase pertenece a la canción Queen of Denmark de John Grant de la cual O’Connor realizó una estupenda versión en su por entonces último álbum de estudio How about I be me (and you be you)? A pesar de ser una canción ajena, la letra se ajusta como un guante a la cantante irlandesa, eso mismo debió de pensar la O’Connor cuando decidió grabarla e iniciar sus conciertos con ella.
Sinéad O’Connor no fue la típica estrella femenina de los 80 y 90 que usaba sus armas de mujer para encandilar al público masculino ni es ejemplo de cómo seducir moviendo las caderas. Sinéad siempre huyó como de la peste de la imagen estereotipada (y tremendamente machista) que se proyecta de la mujer en los medios de comunicación. Sinéad nunca fue una marioneta en manos de la industria, era demasiado incontrolable. Sinéad siempre fue un personaje difícil y contradictorio. Dotada de una voz prodigiosa, la fama internacional le llegó pronto, con apenas 23 años. Su sensacional versión del Nothing compares 2 U (un tema perdido que Prince había compuesto y grabado para uno de sus múltiples proyectos ocultos: The family) la catapultó hacia un éxito masivo que ella nunca deseó.
En pleno apogeo de su fama a la cantante irlandesa rompió en directo una foto del Papa Juan Pablo II en el Saturday Night Live para denunciar el silencio de la iglesia católica sobre los abusos a menores. Sinéad expresó con ese airado gesto su odio contra una institución en la que urgía un cambio. El tiempo le ha dado la razón. Obviamente, el gesto no fue bien entendido por miles de católicos y las reacciones de los sectores más conservadores no se hicieron esperar. El escándalo sexual da fama y dinero (que le pregunten a Madonna o Rihanna), el escándalo religioso da problemas. Sus discos se retiraron de algunas cadenas comerciales norteamericanas e incluso se quemaron públicamente. La aparentemente frágil chica calva con voz de ángel se había convertido en Satán. Desde el incidente de las declaraciones de John Lennon diciendo que los Beatles eran más famosos que Jesucristo, la puritana Norteamérica no se había convulsionado así. Sinéad fue vetada mucho antes de que se hablara de la cultura de la cancelación. Incluso fue abucheada en el concierto conmemorativo de los 50 años de Bob Dylan y ni siquiera pudo actuar, sólo el gran Kris Kristofferson la apoyó en el escenario. “No permitas que estos capullos te destruyan” le dijo. Sabio consejo.
A partir de ahí Sinéad O’Connor siguió editando discos, algunos realmente memorables como Universal mother (1994), Faith and Courage (200) o el citado el citado How about I be me (and you be you)? (2012) y colaboró con artistas como Peter Gabriel, Massive attack, Asian Dub Foundation o U2. Pero su carácter inestable y sus problemas personales fueron el mayor enemigo de su carrera. Lamentablemente, en los últimos lustros se ha hablado más de sus intentos de suicidio, de sus fugaces matrimonios, su ordenación como monja protestante, su conversión al Islam o sus salidas de tono en las redes sociales (buscando novio, psiquiatra o aconsejando a Miley Cyrus) que de su música. Diagnosticada de trastorno bipolar y fatiga crónica, Sinéad parecía haber reconducido su vida personal y su carrera en los últimos tiempos. Pero el suicidio el año pasado de su hijo de 17 años le hizo recaer en un pozo del que parece que no ha conseguido salir. Leer ahora su autobiografía sigue siendo un ejercicio más que recomendable para cualquier aficionado a la música que ahora se torna en su testamento vital.
Descansa en paz, al fin.
La verdad que en lo musical y humano es una gran pérdida. Quien no ha escuchado NOTHING COMPARES U2…por otra parte fue una gran vocalista, en solitario y en colaboraciones (peter gabriel, simple minds, The Chieftans, Afro Celt Sound Sistem, masive attack, incluso participó en The Wall (una de sus versiones), etc..
Seria muy interesante leer sus memorias que están en castellano…Te echaremos de menos!!