Manos que tiemblan, las sombras caen.
Un susurro en el vacío,
¿resuena?
No logro ver el sol,
no siento la lluvia.
Sepultado bajo el peso de mi nombre,
siento que cada aliento me ha sido robado, así lo siento.
Dime, ¿estoy demasiado alejado?
Dios, me estoy rompiendo.
Estoy sufriendo,
sálvame de mí mismo.
Me estoy ahogando,
lo estoy gritando,
sálvame de este infierno.
Mi corazón sangra,
sigo creyendo,
lo pido a gritos
llorando.
Sálvame de mí mismo.
La noche se traga esa luz,
estoy solo cuando el espejo se rompe
pero ese trono es mío,
reflejos de una vida que no puedo reconquistar.
Estas cadenas pesan, mi alma está agotada.
Mi fe flaquea pero no se ha apagado.
Dime, ¿estás aún ahí?
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