No sé si contando esto voy a tener algún tipo de problema con efecto retroactivo. Estaba terminando mi ciclo superior cuando me mandaron a hacer prácticas. Tuve la grandísima potra de no ir solo, compartía martirio con un compi de clase que era skinhead anarquista (otro tema para ahondar, skin y nazi no es necesariamente lo mismo). El tipo, aparte de ser un descojone (más de una vez en clase me hizo llorar de risa), tenía una cultura musical que no voy a tener en mi vida. Un día nos escaqueamos en una habitación que no usaba nadie y empezamos a hablar un poco de todo, hasta que terminamos hablando de la muerte de Bob Marley. Empezó a hablar de otros músicos de reggae que no me sonaban de nada, y, desesperado, puso una canción bajo el lema: “lo malo es que esto te quita las ganas de trabajar”. Laurel Aitken, Rudi got married. Pues es cierto, se me apagó todo el cerebro, salvo las neuronas que se encargan de silbar y de sonreír. Estos Dubinci Sound seguro que saben más de música que yo, pero… alguien tiene que ir de listo. Un, dos, tres… ¡Dubinci!
[divider]DUBINCI SOUND[/divider]
This is a message for all of u. Primer mensaje: cabronada. Por un momento pensaba que iban a entrar las guitarras de Entre dos tierras. Unas percusiones electrónicas con unas bases replicantes, a lo Morcheeba en Big Calm (llevaré como tres millones de escuchas, y las que quedan), van cimentando ese ambiente de buen rollo. Como si la gravedad se hubiera invertido y sólo disfrutaras de la manera en que ganas altura, hacia el espacio.
Lioness. Voz femenina, que tiene un aire a La Kinky Beat en Pirata Capitán, pero pasado por el tamiz de una diva del soul, a fuego lento, como Etta James versionando It’s a Man’s World. Batería a medio tempo, bajo y guitarra supeditados a un teclado que le pone atmósfera, que canaliza la energía que transmite el tema.
Revolucionary souls. Cuando arranca me trae a la mente los primeros instantes de Go-Go Gadget Gospel, de Gnarls Barkley, pero, una vez que ha entrado la batería, tiene más aire a Gone daddy gone. Cee Lo Green, otro prodigio de la naturaleza. Es curioso, porque la batería imprime un ritmo más vivo, pero si tratas de seguir con la cabeza lo que marca la canción, vas más lento que el bombo o la caja.
C_19-3. Vengo condicionado por experiencias previas. Las trompetas son para los finales de los discos, como hizo Falsalarma en Mi legado (de lo mejorcito que han dado los de Sabadell). Cuando metes un poco de reggae, algo de electrónica y una trompeta casi de jazz moderno, a lo J.J. Johnson en Old Devil Moon, te sale esto. Una canción que suena a despedida, pero también a reinicio, como si el disco tuviera dos actos bien diferenciados.
Digital Dub Rockers.esta me recuerda a otros grandes: Asian Dub Foundation en Culture Move, que no es la canción que más me mola de ellos (cuanto más leñeros, mejores temas), pero es un bombazo también. Dubinci Sound es una banda con muchas raíces, que bebe de muchos sitios.
Andalucía. Batería electrónica que, seguro que está grabada de forma tradicional y es mi oído cazurro, pero suena a la base de un dj en un grupo de rap, por ejemplo. Me estoy acordando de Judy Mowatt en Black Woman, seguramente porque si pienso en mujeres en el reggae, la escucho cantar dentro de mi cabeza. Bajo y teclado hacen una amalgama homogénea, punteada por la guitarra, en ese medio tempo relajante, para disfrutar, ese ambiente que transmite la ya mencionada Big Calm, de Morcheeba.
Daddy Noa. Referencia conocida: Asian Dub Foundation, pero canción nueva: Flyover. Vale que el parecido no es evidente, pero las baterías y los teclados consiguen un resultado levemente familiar. Pon a un Morodo berreando por encima y bailaremos hasta desgastar las suelas.
In the dark. Si entran en sonidos más trap o dubstep no me puedo meter, porque apenas conozco, y no para bien, leves incursiones de bandas como Korn o Linkin Park. Baterías a lo Fortress Europe, también de Asian Dub Foundation, pero un aire también a Delta Heavy en Space Time, conocida también por ser la canción con la que Tarec Saffiedine entra en el octágono de UFC.
In A Vibration. La homónima para el final. De fondo escuchamos, creo que, a través de la batería, una especie de latido de corazón. Herederos de Vangelis o Enigma, aunque salvando las distancias, derivan a una especie de mestizaje reggae, dub y electrónica. Mucho foco en la parte de teclados, aunque bajo y guitarra llevan en peso desde un segundo plano.
En resumidas cuentas, media horita de mover la cabeza al compas, de cerrar los ojos y dejarse ir. ¿Sabéis que os digo? Que a ver quién se pone a trabajar ahora. Paso de todo. Voy a comprar unas patatas y a jugar al Super Mario hasta que se me caigan los ojos.
Para los convencidos, enlaces de la banda:
Bandcamp https://dubincisound.bandcamp.com/releases
Youtube https://www.youtube.com/channel/UCAWs38fQWcsh6c1VovSES7A
Spotify https://open.spotify.com/artist/5VMwByhuTCVYv4JkwpbLrA?si=AM4Meml9R2OhoZ8AOkjQYg
Facebook https://www.facebook.com/dubinci.soundband
Instagram https://www.instagram.com/dubinci_sound/?hl=es
0 comentarios