Bueno amigos, ya con la navidad en ciernes, primero que nada permitidme que desde la barra del bar os desee felices fiestas a todos, faltaría más. Que tiempos estos. A mi me gustan, la verdad. Tendrán todo el rollo consumista que os de la gana, pero son unas fiestas que desde siempre me han parecido especiales. Por muchas historias, que evidentemente la mayoría no vienen a cuento. Tengo muchos recuerdos de estas fechas. Uno de ellos es aquellos fantásticos torneos de navidad que organizaba el Real Madrid en su sección de baloncesto y que nos daba Tve en directo, cuando no había que pagar a tocateja para ver deporte en televisión. ¡Vaya partidazos!. Me enganché al basket a final de los ochenta. Aquello era puto rock and roll hermanos. En la NBA los duelos Lakers vs Celtics. La irrupción de los Bad Boys de Isaiah Thomas que protagonizaron esos duelos casi barriobajeros contra los Celtics o los Bulls de un Jordan nacido para ser una estrella. Y en la vieja Europa, las ya desaparecidas URSS y Yugoslavia protagonizando duelos donde se echaban mucho más que chispas y no solo sobre la pista. Nombres míticos ya como Sabonis y por supuesto Petrovic. Aquellos duelos Cibona vs Real Madrid. Ese equipo blanco de los Corbalán, Romay, Fernando Martín, Biriukov y el Barca de los Chicho Sibilio, Norris, De La Cruz, Epi… El Maccabi de Tel Aviv. Las olimpiadas del 84 y aquella plata de la Selección Española. Esa inolvidable semifinal frente a Canadá. Una selección italiana de lo más rudo que recuerdo en una pista de baloncesto…. y por supuesto, como dije antes, los torneos de navidad del Real Madrid.
Aquella edición del 84 fue algo inolvidable. Las selecciones soviéticas y yugoslavas. Un combinado de New Jersey y por supuesto el Real Madrid. Los blancos derrotaron a yugoslavos y norteamericanos, presentándose en la final frente a su público. El rival, los soviéticos de Sabonis, Homicius, Kurtinaitis, Tkachenko…. El día 26 se cumplen 35 años de aquel partido histórico. Plena guerra fría. Hollywood criminalizando a los soviéticos a través de nuestros videoclubs. Yo pegado frente al televisor disfrutando de un baloncesto inolvidable. Nunca he sido fan del club blanco pero aquel equipo de basket me tenía encandilado. Cómo lo hizo la Cibona o el Zalguiris. Como el Boston Celtics, quienes por cierto pasaron por el torneo de navidad. La imagen icónica de aquella final es Arvidas Sabonis reventando el tablero del pabellón del Real Madrid. Aquel que conocí por primera vez gracias a aquella cinta de vhs de Saxon grabada en él que vi una y otra vez sin cansarme. Un partido de tu a tu. El Real Madrid sin perderle la cara al partido. Los soviéticos unos auténticos gigantes, unos titanes. Con ese halo especial que les daba todo el oscurantismo que envolvía a lo que venía el este de Europa. Uno imaginaba ese banquillo de la URSS intentando descifrar cual de sus ocupantes pertenecía a la KGB. Este frente a Oeste. Romay vs Tkchenko. Fernando Martín vs Arvidas Sabonis. Bendito Youtube que nos pone en casa de nuevo aquel partido. Disfrutadlo amigos y feliz navidad.
https://www.youtube.com/watch?v=auyoy5bbQjU&t=2406s
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