Hace unos meses tuve la oportunidad de hacerme con una entrada para asistir a un concierto de PHIL COLLINS. Se trataba de Berlin, en junio y coincidía con la Romería del Rocío en Huelva. Por ser profesor disponía de unos días libres. Estaba claro que no me haría con un ticket de los caros sino que optaría por unos 100 euros más o menos.
Al principio desestimé el concierto que los vuelos eran muy caros, pero encontré unos pasajes a buen precio y me dije, ¿Por qué no? Me lancé.
En los meses siguientes fui gestionando el alojamiento en BERLIN MITTE y por fin llegó el GRAN DÍA, tras un viaje algo azaroso desde Huelva pasando por Faro (Portugal) hasta llegar a Berlín.
No conocía el Olympic Stadium pero era impresionante. La organización perfecta con un cordón policial que separaba los asientos cerca del escenario del público. Las gradas se fueron llenando poco a poco. Fuera los vendedores de salchichas y cerveza hacían su “agosto”. Camisetas y sudaderas de la gira muy caras, no así una serie de vasos hechos para el concierto donde los alemanes bebían y brindaban por doquier,
Otro de los atractivos del concierto era la actuación como teloneros de MIKE & THE MECHANICS, que acaban de publicar OUT OF THE BLUE. Los Mecánicos salieron a escena con su formación básica mas un guitarrista de apoyo. Mike muy elegante con chaqueta y pantalón de tonos claros, todo un “dandy” que me recordaba a Bryan Ferry (RM). Mike & the Mechanics con Andrew Roachford y Tim Howar a la voces empezaron con fuerza haciendo algunos temas de LET ME FLY y de OUT OF THE BLUE, destacando su batería Gary Wallis. Cada vez suenan mejor, aunque no puedo dejar de recordar las voces de Paul Young y Paul Carrack. Pero poco a poco se fueron haciendo con el público, tocando temas de toda la carrera de M&M, predominando los temas antiguos. El sonido era muy bueno, como lo fue a lo largo de toda la noche. Tras su actuación de unos 45 minutos salió a escena PHIL COLLINS.
Collins empezó esta gira en 2017, tras la publicación de su AUTOBIOGRAFIA: AÚN NO ESTOY MUERTO. Suele hacer un mes de conciertos y luego descansa. En Octubre de 2019 visitará USA.
Empezó con canciones como ANOTHER DAY ON PARADISE, ALL AGAINST ALL ODDS, intercalando piezas de su extensa y fructífera carrera solista con temas de GENESIS. Y aquí llegó una de la novedades de la noche, que se hizo MAGICA. Phil llamó a su amigo MIKE, que tomó su guitarra e hicieron FOLLOW YOU, FOLLOW ME. Soberbia, se despidieron con un abrazo. Fue un momento especial.
La banda estuvo FANTÁSTICA, con Brad Cole a las teclas; su hijo Nicolas a la batería que cada día se parece más a su padre; Lelland Sklar al bajo; Ronnie Cral en guitarra rítmica; Daryl Stuermer en guitarra solista que brilló en IN THE AIR TONIGHT otro de los grandes momentos y en DONT LOSE MY NUMBER. En IN THE AIR TONIGHT se encendió el estadio como un cielo estrellado. La percusión en esta gira no la lleva Paolo Conte sino Richie García ; la sección de vientos ha ganado presencia e impulso dan Fornero, George Shelby, Luis Diego Bonilla y Harry KIm), al igual que las voces: Amy Keys, Bridgette Bryant, Arnold McCuller y Lamont Van Hook.
El juego de luces muy bueno. Recordemos que fueron GENESIS los que comenzaron a utilizar sistemas innovadores.
Otro de los momentos estelares fue cuando Nicolas y el percusionista, se enredaron en una jam sesion, demostrando Nicolas sus enormes cualidades al igual que su compañero. Fue casi al final cuando aparece PHIL COLLINS tocando una caja metálica Parecían tres flamencos arrancándose por bulerías. Apabullante.
No hubo un solo bajón en todo el show. Aparte de FYFM/FOLLOWM YOU FOLLOW ME tocaron INVISIBLE TOUCH de GENESIS con un aire más funky.
También brilló una de las vocalistas que hace con Phil, SEPARATE LIVES y su hijo que toca con su padre un tema de GENESIS.
El concierto avanzaba como un tren de alta velocidad sonando clásicos de la carrera de COLLINS en solitario y llegó casi el final con DANCE INTO THE LIGHT, para terminar con TAKE ME HOME…
No los conté pero el OLYMPIC STADIUM estaba lleno. Salí del concierto caminando y pensando que había asistido a una noche mágica, con Phil y M&M. Me subí al metro tras recorrer unos 1500 metros, como tantos alemanes que se llevaban a casa las sensaciones y emociones de un GRAN CONCIERTO, además de esos vasos con la cerveza que habían compartido, que por cierto son los vasos de la gira. Estoy seguro que cuando llegasen a casa los colocarían en un lugar visible, para recordar que PHIL COLLINS (y M&M) pasaron por Berlín en junio de 2019 y no por España (Madrid/Barcelona) que aún les espera.
No hay mucha gente el los blogs de por ahi que contarian un concierto de Mike and the Mechanics y Phil Collins con esta pasion … felicidades