Mientras arrancan los primeros festivales de verano en la península, la promotora Rocknrock nos propuso una alternativa con una gira de cuatro buenas bandas de metal extremo a un precio muy asequible visitando diversas ciudades españolas. Pero después de ver la preferencia del público por los festivales, han tenido que cancelar la mayoría de la gira salvándose solamente los conciertos de Madrid y Barcelona, siendo el concierto de Madrid del jueves 13 de Junio del que voy hablar en estas líneas.
Puntuales en el horario fijado y con una buena parte del público asistente ya formando fila ante la puerta, accedimos a la sala Mon de Madrid para poder de nuevo a los neerlandeses Carach Angren en directo, pero esta vez encabezando el cartel, escoltados por los finlandeses Wolfheart y acompañados por las dos bandas americanas Nevalra y Thy Antichrist.
Los primeros en subirse sobre el escenario frente al centenar de personas que ocupábamos la mitad de la sala fueron los Nevalra, proyecto del guitarrista y cantante Scott Eames junto con el bajista Cody Sprock, cerrando el trio durante la gira el batería Adrian Galindo. Provenientes de Missouri y apostando por una mezcla de Black/Death muy melódico sin riffs alocados y donde la guitarra y el bajo acompañan con muy buenas melodías a la voz desgarrada de Scott, presentaban el que es su primer Lp “Conjure The Storm” editado este año después de su Ep debut “The Black Flame” del 2015. Con un look muy de andar por casa el batería y el bajista mientras que el guitarrista y cantante aparecía con las pinturas de guerra que después encontrarían su explicación, la banda se dedicó a defender su último trabajo en los 25 minutos de actuación que tuvieron dejando muy buen sabor de boca siendo los temas más destacados “It Dies In Vain”, “Warchestra”, “…Of Ruination” y el propio “Conjure The Storm” terminando de manera abrupta para mi gusto, sin palabras de despedida y recogiendo inmediatamente sus enseres. Muy buena banda que me sorprendió muy gratamente en el sonido y que tendré en cuenta en futuras visitas para ver su evolución.
Un cambio muy rápido de material que duro casi 10 minutos y ya teníamos a la segunda banda lista sobre el escenario. Los estadounidenses Thy Antichrist, cuarteto originario de Dallas, formado por el cantante Andrés Vargas, apodado Antichrist 666, el guitarrista Abyssus, el bajista Frost Giant y el baterista Oricuss, acompañados durante sus actuaciones en directo por el otro guitarrista Scott Eames, con el apodo de Wicked One. Con una indumentaria muy al estilo de Mad Max, aunque Antichrist me hacía recordar al jefe morlock de la última versión de la película El Tiempo En Sus Manos, la banda salió a darlo todo desde el inicio, lo que engancho al público presente que los ovaciono en todo momento. Presentando el que es su último trabajo, “Wrath Of The Beast”, editado el año pasado, fueron una autentica apisonadora de Black Metal, pero siendo simpáticos en el trato al público, sonriendo en cada momento, repartiendo púas al que se lo pedía, y animando constantemente al personal. Se pueden destacar de su concierto los temas “The Great Beast” y sobretodo “Desolation” que arranco algún ole con su introducción de guitarra clásica o española. Muy buena banda que calentó al público presente para el resto de la noche y mostró muy buenas maneras en todo momento.
Ya tomándose las cosas con calma e incluso haciendo una prueba de sonido antes de comenzar su concierto, le llegó el turno a la banda finlandesa Wolfheart, veterana banda de Death Metal Melodico que lleva dándonos caña desde el 2013. En esta ocasión, el cuarteto liderado por el guitarrista y cantante Toumas Saukkonen, acompañado por el guitarrista solista Mika Lammassaari, el bajista y corista Lauri Solvonen y el baterista Joonas Kauppinen llegaban a España con su “Constellation Of The Black Light” bajo el brazo editado en el 2018. Con un uso de teclados grabados en la mayoría de los temas e incluso alguna guitarra clásica mientras la formación se quedaba estática en el escenario abrieron su concierto con “Everlasting Fall” perteneciente a su más reciente trabajo. Siguieron su descarga con “Aeon Of Cold” del disco “Shadow World” del 2015, para continuar con “Stregth And Valor” de “Winterborn” editado en el 2013 y con el que solicitaron el primer pogo de la noche. Con un disfrute continuo del público, siguió su espectáculo con “Breakwater” de “Constellation Of The Black Light” para sumergirse en sus primeros discos enganchando los temas “Veri” y “Zero Gravity” del Lp “Shadow World” y terminando con “The Hunt” y “Ghosts Of Karelia” de su disco debut “Winterborn” generando algún pogo más de unos cuantos valientes. Buena banda que hizo bien su trabajo aunque me reitero en el abuso de sonidos pregrabados como introducción de sus temas y sobretodo de interludios.
Y para terminar la noche, llegaba el momento para los reyes de la noche, que después de demostrar su buen estado de forma en pasadas visitas, volvían a España aunque en fechas muy veraniegas. Proveniente de los Paises Bajos, el trio Carach Angren formado por el cantante Dennis Droomers, apodado “Seregor”, junto con los hermanos Clemens Wijers, apodado “Ardek” a los teclados e Ivo Wijers “Namtar” a la batería, van acompañados en los directos por el guitarrista Baastian Boh “The Butcher”. Prescindiendo del teclado con brazo hidráulico de anteriores visitas sustituído por uno estático, el grupo arranco con “The Sighting Is A Portent Of Doom” con la habitual sinfín de gestos de sus sus dos miembros principales, ya que Seregor y Ardek no se están quietos en ningún momento, mientras Namtar machacaba la batería luciendo una máscara completa de cordero que le aguanto solo este tema. El guitarrista como siempre, ubicado en el lateral derecho del escenario, dedicado a los continuos riffs de la guitarra disfrutando del momento. La descarga continuo con “General Nightmare” y “The Carriage Wheel Murder” seguido de “Spectral Infantry Battalions” con solo Seregor y Namtar en el escenario. El siguiente tema fue “In De Naam Van De Duivel” (In The Name Of The Devil) para a continuación descubrir un maniquí femenino de aspecto grotesco para interpretar “Blood Queen”, hacernos disfrutar con “Charlie”, demostrar todo su nervio de puro black metal con “Pitch Black Box” y mostrar su lado más gore con Seregor simulando cortarse parte de la lengua antes de “A Strange Presence Near The Woods. Ya afrontando la recta final del concierto, cayendo los últimos temas de la noche “Heretic Poltergeist Phenomena”, “The Funerary Dirge Of A Violinist” y “Bloodstains On The Captain’s Log” tras el que se despidieron, dando por finalizada su actuación saludando a todos los presentes.
Una noche con muy buenas bandas que lo dieron todo frente a un reducido publico debido a circunstancias varias. Toca esperar que vuelvan de nuevo a nuestro país para que la sala luzca el lleno que esta gente se merecen.
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