un_monstruo_viene_a_verme_BayonaUn Monstruo viene a verme culmina la particular trilogía de J.A. Bayona sobre la familia. Bien podría considerarse que su todavía corta (pero de indudable calidad) filmografía gira sobre el tema de la familia o, mejor dicho, sobre la pérdida de ésta. En todas sus películas padre e hijos se enfrentan a una pérdida irreparable. Es ese miedo a la muerte y a la ausencia lo que parece que ha sido el eje central de Bayona en esta primera fase de su más que prometedora carrera. Un monstruo viene a verme es la culminación de esa obsesión por la pérdida, pero también introduce la dolorosa aceptación de la misma. El joven protagonista (demasiado mayor para ser un niño, demasiado joven para ser un adulto) descubrirá que madurar es aceptar nuestras limitaciones y abandonar nuestros sueños. En definitiva, aceptar nuestra mortalidad y, por ende, la de los demás. Supongo que ahora que Bayona ha aceptado rodar Jurassic World 2 los temas familiares quedaran algo aparcados, aunque algo me dice que seguro que en esa cinta también habrá padres intentando salvar a sus hijos en peligro.

 En Un Monstruo viene a verme Bayona nos entrega en imágenes un guión de Patrick Ness, quien adapta su propia novela, algo que siempre es una garantía. Un guión sobre un muchacho que debe afrontar la grave enfermedad de su madre y la posibilidad de perderla para siempre. A todo ello hay que sumarle el acoso escolar que sufre y la mala relación con su abuela. No es que la trama sea especialmente novedosa, incluso me recordó a El laberinto de Fauno por la capacidad del niño de usar la fantasía para huir de una terrible realidad, pero está rodada de una manera impecable. Qué demonios. No puedo ponerle ningún pero a la forma de rodar de Bayona. El tipo es un gran artesano a la hora de contar historias. Técnicamente estamos ante una película que roza la perfección, con una ambientación, una dirección artística y unos efectos especiales simplemente perfectos. A todo ello hay que añadirle el hecho de que, como ya pasó con Lo imposible, no estamos ante una gran producción de Hollywood. Por mucho que la historia se ambiente en Gran Bretaña y aparezcan actores de renombre internacional como Sigourney Weaver, Liam Neeson o Felicity Jones, estamos ante una película española en la que buena parte del capital es español (del grupo Mediaset, para ser exactos).

 Sin embargo, la historia no alcanza el nivel de emoción de Lo imposible, cosa que tampoco esperaba nadie ni era obligatorio intentar. Bayona se obstina una y otra vez en intentar hacernos soltar una lagrimita y resulta un tanto pesado. Esas cosas surgen en el espectador de manera espontánea. Desencadenar en el espectador tal emoción a base de imágenes y sonido es lo que yo llamo la magia del cine. Más allá de una industria y una técnica, yo entiendo el cine como esa capacidad de provocar emociones en el espectador. Y Bayona sabe hacerlo. Reconozco que se me puso un nudo en la garganta y se me arrasaron los ojos varias veces, pero algunos momentos del final me resultaron redundantes e innecesarios. Bayona comete un único error que consiste en intentar convertir la sala de cine en un mar de lágrimas. Si todavía no has llorado, voy a sacarme de la manga otra escena intensa para ver si ahora te hago llorar. Alguna elipsis narrativa no hubiera estado nada mal. Quizás el montaje final se les quedaba muy corto y decidieron no recortar alguna escena que ahonda innecesariamente en el dolor. Reconozco que es la única pega que le he visto a esta excelente película. Con Lo imposible lloré de lo lindo y ninguna escena me pareció repetitiva o innecesaria. No puedo decir lo mismo de Un monstruo viene a verme, lo cual no significa que no me haya gustado.

monstruo-viene-vermeTampoco es un gran fallo que invalide los momentos de buen cine que incluye la cinta: las visitas del monstruo y sus historias son realmente asombrosas, pero sí que le resta enteros para lograr ser la gran fábula sobre la madurez que Bayona pretendía. Aún así, es un film notable.

 

Un monstruo viene a verme (A Monster Calls)

by: Luis Cifer

by: Luis Cifer

Luis Cifer, nació en la ciudad del cierzo. Se dice que siempre viste negro, que Luis no es su nombre real y que duerme en la calle. Otros dicen que tiene un trabajo, que no bebe alcohol e incluso que es padre de familia, pero no hay nada confirmado. También se le puede encontrar en su blog de cine.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Últimas entradas

Últimos comentarios

  1. En 2017 vi a éste hombre en directo en la Rocksound de Barcelona, os puedo garantizar que vendió más de…

Te puede interesar

Los Tigres

Los Tigres

El dilema moral es uno de los puntos del guion que suele suscitar interés en el guion pues, de esa forma, el espectador puede empatizar mejor con las acciones más reprobables del personaje, quien además mediante este recurso suele contener mayor profundidad...

Together

Together

En los últimos tiempos parece existir un resurgimiento del “body horror” culminado con el éxito de “La sustancia”. Esta “Together” es otro estimable acercamiento a este subgénero del terror. Cinta australiana escrita y dirigida por Michael Shanks cuya historia parte...

Maldita suerte

Maldita suerte

El mundo del juego y los casinos siempre ha sido terreno abonado para un cine que gira en torno a los robos increíbles y las historias de redención. “Maldita suerte” es de estas últimas aunque diste de las grandes obras que ha dado este sub género (sin ir más lejos la...

Bookish

Bookish

Mark Gatiss consiguió un enorme prestigio como co- creador de “Sherlock”, maravillosa traslación a la actualidad de las aventuras del detective inventado por la pluma de Arthur Conan Doyle. Sólo por eso, su nombre se ha convertido en uno de los fundamentales de la...

Together

Together

Together es body horror sin pretensiones y como tal funciona con eficacia clínica: no busca la elevación filosófica ni el prestigio de festival, sino obligarte a apartar los ojos de la pantalla en el instante preciso. El film de Michael Shanks nos confirma el buen...