sons-morpheus-sons-morpheus-67991Es curioso, pero en casa siempre están deseando que me ponga a contar alguna historia, casi se ha convertido en una tradición cuando nos sentamos a la mesa, aunque me repito alguna que otra vez. Entre algunos despistes míticos y la facilidad con la que en más de una ocasión me he metido en líos, siempre dan para mucho a la hora de rememorar y echar unas risas, conmigo o a mi costa, vete tu a saber. Siempre es bueno tener algo que contar, que decir, que recordar. Es señal inequívoca de vida, de que uno no ha pasado, al menos del todo, a hurtadillas.

Creo que la decisión de sentarme a escribir, la tomé, más por contar y contar, que por la necesidad de demostrar algo. Doctores tiene la Iglesia, dicen, yo solo soy un charlatán de feria, que a falta de crecepelos que vender en una caravana, de población en población, entremezcla momentos vividos con canciones de rock and roll que suenan por los altavoces, esos que casi nunca callan. Y hoy no se que contaros, no se que deciros, fíjate tu, que algo se me ocurre, pero pienso que mejor dejarlo en la intimidad, que nunca se sabe quien puede estar leyendo esto, y a vosotros os encontré en la calle, como diría la canción.

Mientras le doy vueltas, va sonando un disco que me llegó el otro día, proveniente de Suiza, y no, no era ninguna cuenta en ningún banco, ni nada de eso, ni falta que me hace, que uno es pobre pero honrado, ya sea por convencimiento, necesidad o porque no hay más cojones. ¿Que os estaba diciendo?, ah si, que en un sobre que vino desde Suiza, y que supongo que mi cartero se haría mil conjeturas, estaba el disco de estos Sons of Morpheus, de los que no tenía ni idea, y que ahora no me consigo quitar de la cabeza, con su sonido puro 60 y 70, mezcla de blues rock, psicodélico, hard setentero y guitarreo a lo Hendrix o Cream. ¿A que pinta bien?, pues mejor suena amigos, y ya solo una canción como «Further along» o la que pone punto final al disco, «Psilocybin», son señal de que estos tipos manejan material cojonudo entre manos. Manuel Bissing a las guitarras y voces, Lukas Kurmann al bajo y Simon Gautsch a la batería, lo mismo rememoran al mágico guitarrista de Seattle en la inicial «Pay for me» o en «Dragonfly», que incluso buscan el equilibrio entre el blues y la lisergia del stoner como en «Seed» o «Death in the clouds»

Grandes músicos, consiguen montar un muro sónico lleno de feeling y buen hacer. Un disco nada monótono ni lineal, que sabe combinar elementos hard rock como en «Sugar boogie», que se pierden en sonidos más psicodélicos en «Tsunami». No les conocía de nada, y a partir de ahora, se van a convertir en sospechosos habituales, de los que seguro que van a sonar más de una vez en casa o en el coche. Vámonos para Suiza, ah no, que no hay pasta en el monedero, da igual, seguro que disfrutamos tomando una birra mientras Sons of Morpheus dan caña. Joder, al final acabo esto y no se que contaros, bueno, voy a buscar la inspiración en las canciones de estos tíos y en otra jodida birra.

SONS OF MORPHEUS – Sons of Morpheus

by: Carlos tizon

by: Carlos tizon

Licenciado en el arte de apoyar el codo en la barra de bar. Comencé la carrera de la vida y me perdí por el camino, dándome de bruces con el rock and roll. Como no pude ser una rock star, ahora desnudo mi alma cual decadente stripper de medio pelo en mi blog, Motel Bourbon.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

Smith/Kotzen – Black light/White Noise

Smith/Kotzen – Black light/White Noise

Parece que tanto Adrian Smith como R. Kotzen le han cogido gusto a tocar juntos, oye, y nosotros que se lo agradecemos a ambos guitarristas. Si escuchaste -y disfrutaste- el debut de Smith y Kotzen -que parece los nombres de agentes del FBI en una serie...

Two Wolf – Two Wolf

Two Wolf – Two Wolf

El viejo espíritu del Rock Sureño sigue vivo aunque cada vez más extendido, o mejor dicho ramificado. Nuevas estrellas como Blackberry Smoke lideran una forma de entender la música que en los tiempis de la globalización digital ya no entiende de cunas y si de...

Fito & Fitipaldis – “El monte de los aullidos “

Fito & Fitipaldis – “El monte de los aullidos “

Fito Cabrales “rompió mi corazón” allá por un frío enero de 2004. Yo, fan confeso, profeso y a veces compulsivo de Platero y Tú, me acerqué presto y reconfortado aquella noche de sábado a la madrileña  sala Aqualung, al concierto que el de Zabala daba presentando el...

Fuet! – Make It Happen

Fuet! – Make It Happen

Continúo la senda 'hardcoreta' que he iniciado con el discazo que se sacaron los noruegos The Good, The Bad and The Zugly. Pues bien, como si de una respuesta española al trabajo de TGTBATZ, os traigo el debut, recién salido del horno, de los madrileños FUET!. ¿Y...

The Good, The Bad And The Zugly – November Boys

The Good, The Bad And The Zugly – November Boys

Vuelvo al ruedo después de unas semanas liado con historias que no me motivan en absoluto, pero que uno tiene que lidiar con ellas... Para compensaros... Cooooopón bendito, lo que se han vuelto a sacar del escroto los kamikazes de Oslo, THE GOOD, THE BAD AND THE...