Será porque uno va ya acumulando vivencias encima pero sigue luchando contra corriente para no ser vencido por el desánimo respecto a ciertas cuestiones que se instalaron en la forma de ser y pensar desde hace ya mucho. Y mira que las actuaciones invitan a mirar hacia otro lado pero la situación no invita a cerrar los ojos ni mirar hacia otro lado adoptando una postura cómplice. Llegué a Reincidentes en el 89 con su primer disco. Acababa de descubrir el Rock Radikal Vasco, el sindicato de estudiantes un par de años antes, cuando aquella huelga de estudiantes del 87 me pilló en el instituto. Los de Sevilla tocaban en Gaztetxes y eso era algo que reconozco que idealizaba. Significaban una avanzadilla desde el Sur que tenía demasiado sol y rabia que escupir. Han pasado ya muchos años, para Reincidentes, para mi. Ellos siguen a lo suyo, haciendo canciones, metiendo el dedo en la llaga, sin dejar de luchar. Yo también sigo a lo mío, con mis convicciones más fuertes, y resistiendo a que el rock salga de mi vida.
Reincidentes tienen nuevo disco, con la gente de Maldito Records detrás, después de aquel recopilatorio, «Hijos de la calle», los incombustibles Madina, Rodriguez y Pizarro con nuevas canciones, al pie del cañón. Otro que de peleas por vivir sabe un buen rato, Javi Chispes, que entró a cubrir el hueco del no menos mítico Finito de Badajoz, y desde entonces es parte importante también de Reincidentes. Lo suyo, lo de Reincidentes, para mi siempre ha sido más rock punk que punk rock, en sus hechuras siempre se notaban las abruptas costuras del Rock and Roll clásico de actitud, de maneras punk. Reincidentes siguen utilizando sus letras como rosa de los vientos de los tiempos que nos tocan vivir, en los que el ¡Peligro! como han decidido llamar a este disco, se reviste de normalidad para vergüenza de una sociedad que a veces parece dar pasos decididos hacia el abismo.
¡Peligro! luce letras contestatarias, historias diarias, de las que te encuentras en el trabajo, en la esquina de tu calle, en la puerta del centro de salud donde pediste cita con tu médico hace ya un buen puñado de días y no en redes sociales o videos virales manipulados a gusto del consumidor. ¡Peligro! se rodea de guitarras contundentes, de sonido fresco y en primera línea siempre. Reincidentes siempre llamaron a las cosas por su nombre, y no iban a ser menos ahora, que la edad quizás no nos haga más sabio pero debería hacernos menos temerosos. Reincidentes no dan ni un paso atrás y eso siempre es de agradecer y de reconocer. Reincidentes siguen siendo referencia, incluso en tiempos oscuros en los que los cerebros se reblandecen de estar tanto tiempo cara al sol. ¡Qué nunca nos falten Reincidentes!.
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