El sábado 22 de marzo celebraba su aniversario la Peña Motera Rockers en su sede ubicada en un polígono industrial de Jerez. Nave inmensa que desde el mediodía ofrecía comida, bebida, tatuajes y mercadillo a precios populares. Buen ambiente, mucha gente y gratas conversaciones las que pudimos tener con amigos y conocidos de este “mundillo” cerveza en mano. Damos las gracias a la organización por abrirnos las «puertas de su casa».
Además como colofón ofrecían un concierto gratuito de una banda que nos habían recomendado grandes amantes del proceloso mundo del rock & roll. Los Saint Peter Square, trío procedente de Sevilla al que no habíamos tenido la suerte de conocer. Una recomendación de las que se agradecen pues estamos ante un trío de rockabilly, en más de un momento tan acelerado como el psycho Billy que funciona a la perfección, animando hasta la última persona.
Y eso que las condiciones no eran las más favorables pues la sede de la Rockers es magnífica: amplia, con una decoración estupenda, gran barra y buen escenario pero con el hándicap de al ser una nave industrial su techo es de uralita y el sonido rebota por todos los rincones del local por lo que la acústica no es la más adecuada. Aun así se ve profesionalidad en la banda, intentando sacar petróleo ante la adversidad. Seguro que nuestros caminos se vuelven a cruzar en otros lugares.
Los componentes son la guitarra (una preciosa Gretsch) y voz de Ismael Lojo, Juanlu Núñez con su contrabajo decorado con un dentado tiburón y José Carlos Oria a la batería, tocando de pie, mirando al público en pose “chulesca”, levantando la ceja. No podemos dejar de pensar en Slim Jim Phantom de los Stray Cats. Tampoco en Lee Rocker y Brian Setzer. De hecho, nos suena entre un cruce entre el celebérrimo trío americano y otros grandes como Reverend Horton Heat. Son palabras mayores. Más si pensamos que no provienen del sur de Estados Unidos sino desde el de España. En concreto, Sevilla.
Tienen dos discos editados e imaginamos que la mayoría de temas provienen de esos trabajos. Canciones cortas y directas, de las que no hacen “prisioneros” y con las que es imposible dejar de mover los pies. Nos interesan unas cuantas de su amplio repertorio (pues tocaron cerca de dos horas), desde la inicial “Funnel of love”, pasando por el genial título de “Mutant monkeys of Gibraltar”, “I´m coming home”, pasando por sus acercamientos en español “Tren de medianoche”, “Expreso a Transilvania” o “1000 años”. Las versiones son llevadas a su “terreno” y alucinamos con “This boots are made for walking” o “The house of the rising sun” aunque el gran momento llega, creo, que con “Baby, please don´t go” en el que baja primero Núñez con su contrabajo posándolo en el suelo y tocando como si de un bajo se tratase, llegando luego Lojo subiéndose encima del instrumento para puntear a las seis cuerdas y, por último, Oria pegando con las baquetas en la parte posterior del contrabajo.
Con el corte que da nombre a la formación “St. Peter Square” parece que todo terminará pues Juanlu Nuñez desaparece mientras sus compañeros parecen finalizar los últimos acordes pero tras unos momentos de desenfreno el contrabajista llega subido a la barra disfrazado de un superhéroe llamado Catman y de esta guisa toca el tema homónimo, junto a “23”, “Live of die” y la final “Death by rockin” ante un público rendido, dejando claro que Saint Peter Square son actitud y aptitud. Han ganado un seguidor más en este modesto cronista.
Pasamos un buen rato con esta banda, para repetir…
Gracias por la lectura, Gonzalo. Por supuesto, banda para repetir.