Bien, sigámonos poniéndonos al día con las crónicas de eventos alrededor del Rock’N’Roll más puro y sincero. Me estrené con el Club «La Flaca» de La Cañada (Valencia) el pasado 11 de febrero.
Y si hablamos de sinceridad, compromiso, clase y sensibilidad, aquí volvemos a tener al Sr. Pau Monteagudo (Corazones Eléctricos, Uzzhuaïa) con su habitual set improvisado de covers para volver a dar un Máster de sabiduría y pasión por el Rock en todas sus vertientes junto a su colega y amigo de toda la vida, Rafa Fernández.
El formato de concierto fue en clave ‘unplugged’, con Pau a la guitarra acústica y Rafa a la caja y percusiones. Formato desnudo, sincero, directo, íntimo a la par que muy divertido en ocasiones como podréis comprobar después del salto…
A eso de las 19:00 dio comienzo la magia con un tema que ya me ganan de calle, AMO «Sitting In The Dock Of The Bay» de Otis Redding desde que ví por primera vez TOP GUN en los 80’s (¡Sí!, ¡lo siento!) y es uno de mis temas más TOP en la Soul Music. Por cierto, os diré que Pau iba escogiendo los temas alojados en dos carpetas de forma prácticamente aleatoria en todo momento, previa consulta a veces del sufrido Rafa. Ja, ja.
Como habíamos empezado con clásicos, pues así siguieron con un himno inmortal de Elvis como «Can’t Help Falling In Love». Clavado. Actualizamos repertorio para el público con «Californication» y «Wonderwall» que, ¡oiga!, sonó de categoría en boca de Pau. Quien me lo iba a decir. Morbo.
Turno para el ídolo definitivo de Monteagudo, El Duque Blanco, su Bowie, su Rebel Rebel de siempre y para toda la vida. «Space Oddity» sonó así de bien…
Cuando respiras a Bowie, y Pau lo hace, la atmósfera que se crea es absolutamente especial…
Hora de cambiar de tercio y de ritmos. Nos volvemos a los 50’s para mover el esqueleto a ritmo del «You Never Can Tell» de Chuck Berry. La gente empezó a conectar aquí con la pareja protagonista, muchos vinieron simplemente a pasar un buen rato y el público comenzó a agitarse por primera vez. Tras el mega hit de Green Day vino otro tema crucial de la velada para quien suscribe, «Wicked Game», de Chris Isaak, volvió a quebrarme el corazón como siempre lo ha hecho y más si es interpretada con ese entregado sentimiento que impone Pau. En fin, por no ponerme pesado y sacar matices de todos y cada uno de los veinte temas allí ejecutados, destacaría el siempre efectivo y participativo «Let It Be», el «You Got It» de Roy Orbison, la aportación femenina, reivindicada a la hora de ser cantada por el sexo masculino, gracias a los excelsos «Ironic» de la Morrisette y el hitazo de 4 Non Blondes, «What’s Up», perfecto para este formato acústico. Tampoco podía pasarme desapercibido que ‘el Rubio’ recurriese a otro de sus ídolos, Chris Cornell, con su aportación al imaginario 007, «You Know My Name»… Me hizo llorar, joder… Y qué decir de «Drive», el baladón de Incubus, que imagino que muy pocos conocerían, pero que un servidor disfrutó al máximo. Acabo con los que considero los temas más celebrados por el público y ahí estuvieron «With Or Without You» (coreada, saltada y celebrada por los asistentes), el «Stuck In The Middle» de Stealers Wheel y el meddley que se marcaron para cerrar con la perfecta y conocida mixtura por todo lo alto del «Twist & Shout» ‘a la Beatles’ y «La Bamba» de Ritchie Valens…
Se puede decir más alto, pero no más claro, Pau Monteagudo & Rafa Fernández siempre serán de los nuestros… ¿o seremos nosotros siempre de los suyos?…
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