Vamos a entrar en otro de esos juegos que tanto nos gustan. Iniciaremos un listado mis 100 discos favoritos de rock y sus derivados, hard, prog, punk, heavy, blues, etc… por décadas empezando por los años 70, una de las décadas más suculentas y espectaculares del género. Seguro que te tirarás las manos a la cabeza porque falta tal o cual disco, o porque aparece este otro que a ti te parece basura, pero como siempre esto se hace desde un punto de vista totalmente subjetivo.
Aquí solo aparecerán los discos que a mí me parecen capitales, con la única limitación de elegir un único álbum por banda o artista. Hay grupos que merecerían colocar toda su producción en esta lista, pero ponemos esa limitación para abarcar más ampliamente lo que podría quedarse muy corto. Y dejamos claro que no hablamos de los mejores discos, porque eso es imposible, sino de mis favoritos, los que más pasan por mi reproductor.
Empiezo yo, y puede que grites al ver que Bob Dylan, Lou Reed, Bob Seger, Peter Frampton, Neil Young o Bruce Springsteen no aparecen, o que algunos de los más exitosos de la época como Fleetwood Mac tampoco están, incluso puede que no entiendas por qué no está ese que a ti tanto te gusta, pero seguro que algunos compañeros lo solventan, y aquí solo están los que para mí sí son imprescindibles. Así que siéntate con una tila calentita y un inhalador para combatir la posible falta de humor al leer estas listas que, únicamente, pretenden hacerte pasar un buen rato.
100 DISCOS 70’s
1.- Black Sabbath “Black Sabbath” (1970)
Los primeros 4 discos del grupo podrían entrar aquí, pero supuso la creación de tantas cosas, de tantos géneros, abrió la mente de tanta gente que no he podido elegir otro. Su ambientación, sus letras, obra de Geezer Butler, su poderoso sonido, sus riffs profundos de guitarra, todo lo convierte en algo único. Temas como el homónimo, “The wizard”, “N.I.B.”, “Behind the wall of sleep” o “Evil woman”, que fue el primer single, son incontestables en cualquier discografía.
2.- Led Zeppelin “Physical graffiti” (1975)
Al igual que con otras bandas de la época, cualquier álbum podría formar parte de esta sección. Esta 6ª entrega supuso el debut con su propio sello “Swan Song Records”, y les llevó directamente al nº 1. Clásicos irrefutables se dan cita en su tracklist, como “The Rover”, “In my time of dying” o “Kashmir”, pero a la vez dan una variedad asombrosa a su propuesta. Una maravilla de principio a fin.
3.- The Rolling Stones “Sticky fingers” (1971)
Como fan irredento de los Stones puede parecer un crimen no elegir “Exile on Main Street” o dejar abierta la elección a cualquiera de sus publicaciones setenteras, pero es tan fácil como ser el 1er disco que escuché entero de ellos y caí rendido a sus pies. Esa mezcla de rock, blues, r&b, country y r’n’r aderezado con unos textos durísimos lo hacen elegible. Además cuenta con un setlist espectacular, donde todas las canciones son magistrales, y la formación de Mick Jagger, Keith Richards, Mick Taylor, Bill Wyman y Charlie Watts pasó a la historia por méritos propios.
4.- Deep Purple “Burn” (1974)
Podría elegir cualquier disco del Mark II, Mark III o Mark IV y acertaría. Una de las bandas más grandes de la historia en un momento clave tras el abandono de Ian Gillan y Roger Glover y la llegada de David Coverdale y Glenn Hughes. Temas que siguen sonando espectaculares, con una variedad de estilos digna de un estudio superior. “Burn”, “Might just take your life”, “You fool no one” o “Mistreated” son un ejemplo de la calidad abrumadora de una banda mayestática.
5.- Pink Floyd “Animals” (1977)
La banda definitiva del progresivo para un servidor. Atravesaba unos años de creatividad e inspiración espectacular, y cualquiera de los álbumes de la época cabría aquí, pero me decanto por este porque es algo especial para mí. Tanto “Pigs” como “Dogs” o “Sheep” son de una ambientación y encanto especial, más las intro y outro de “Pigs on the wing”. Nunca los he visto en vivo, pero tuve la suerte de ver a una banda española en un momento especial que tocaba este disco a mitad del setlist de presentación de un disco propio y fue inolvidable. Las melodías, los arreglos, los ritmos y sus constantes cambios, todo lo hace especial y maravilloso. Roger Waters, David Gilmour, Richard Wright y Nick Mason son historia de la música y Animals una de las obras cumbres del género.
6.- AC/DC “Powerage” (1978)
Debut de la formación clásica del grupo australiano con la llegada de Cliff Williams al mando del bajo. Podemos definir este disco, sin temor a equivocarnos, con la palabra electricidad. La descarga que sufrimos al escucharlo es escalofriante, riff tras riff, golpe tras golpe, grito tras grito, un puñetazo en la cara que nos deja k.o. con temas tan emblemáticos como “Rock ‘n’ roll damnation”, “Down payment blues””, Riff raff”, “Sin city” o ese cierre tan brutal que supone “Kicked in the teeth”. Apoteósico.
7.- The Doors “L.A. Woman” (1971)
Hay muchas listas sobre el mejor 1er disco o el mejor último disco de una banda, y aquí encontramos a un grupo que podrían liderar ambas categorías. La despedida de Jimbo del mundo, 3 meses antes de fallecer en París, es un canto a alguno de sus amores en vida, el blues, la ciudad de L.A., la muerte, el chamanismo indio… Además de las archiconocidas, como “L.A. Woman” o “Riders on the storm” (es muy difícil despedirse de una forma tan maravillosa), hay joyitas menos reconocidas como “Been down so long”, “Cars hiss by my window”, “L’America” o la versión del clásico de John Lee Hooker “Crawling King Snake”. Jim, Robbie, Ray y John siempre estarán ahí.
8.- Judas Priest “Killing machine” (1978)
Tienen tantos discos significativos que la tarea ha sido titánica y me he decantado por el que más veces he escuchado. Con la formación clásica de los 70, con Rob Halford en las voces y Les Binks en la batería, más los sempiternos KK Downing y Glenn Tipton a las guitarras y al bajo Ian Hill. Fue la última grabación de Les con el grupo y supuso el asentamiento definitivo de la iconografía de cuero negro y tachas metálicas. Clásicos interminables como “Delivering the Goods” (genial versión de Skid Row), “Hell bent for leather” (nombre con el que publicaron el disco en Norteamérica), la versión de “The green Manalishi (with the two-prong crown)” de Peter Green o la balada “Before the dawn”, componen un disco referente para el heavy metal en el futuro.
9.- Aerosmith “Toys in the attic” (1975)
Tercer lanzamiento de la banda de Boston que incluye temas emblemáticos del grupo como “Walk this way”, “Sweet emotion” o “Toys in the attic” que da título al disco. Es el álbum más exitoso en USA y supuso la confirmación del mítico Jack Douglas como productor emblemático del quinteto estadounidense.
10.- Motörhead ”Overkill” (1979)
Quién nos iba a decir que un bajista drogata y borrachín con voz de cazallero montaría una banda cuando lo tiraron de Hawkind, que sería un icono mundial dentro del heavy metal. Pues sí, Lemmy Kilmister lo hizo y, ya con su 2º disco, alcanzó unas cotas difícilmente superables. Con la formación más clásica, con “Fast” Eddie Clarke a la guitarra y Phil “Philty Animal” Taylor a la batería, nos regalan un compendio de canciones que son absolutamente atronadoras y capaces de destrozar todo lo que pillen por delante. “Overkill”, “Stay clean”, “Capricorn”, “No class”, “Damage case”, “Tear ya down”, “Metropolis”… y todo junto en el mismo álbum. Brutal.
11.- Sex Pistols “Never mind the bollocks” (1977)
Un disco que revolucionó las islas británicas y siempre es portada de todo lo que engloba. Letras ácidas y combativas contra el stablishment patrio y una furia incontenible que sale de la garganta de Johnny Rotten, de la guitarra de Steve Jones y del golpeo salvaje de Paul Cook tras los parches. Glen Matlock es el bajista original que aportaba algo de musicalidad al combo, y Sid Vicious su sustituto como cara visible del movimiento punk. El tiempo no pasa por “Never mind the bollocks, here’s the Sex Pistols”.
12.- Rory Gallagher “Tattoo” (1973)
No soy objetivo con Rory, es mi guitarrista favorito y lo considero un personaje único, un músico privilegiado dotado de un talento especial. Algunas de sus composiciones más famosas aparecen aquí, como “Tattoo’d lady”, “Cradle rock” o “A million miles away”, haciéndose acompañar por Gerry McAvoy al bajo, Rod de’Ath a la batería y Lou Martin a los teclados. Las influencias blueseras de Rory se amplian al jazz, country o folk, confirmando que el irlandés era alguien especial.
13.- Thin Lizzy “Jailbreak” (1976)
El álbum más exitoso de la banda es un auténtico hito en el rock de los setenta. Contiene alguno de los hits más representativos como el tema que da título al disco, “Jailbreak”, “The boys are back in town”, “Cowboy song” o “Emerald”, juntando a su famoso dueto de twin guitars compuesto por Scott Gorham y Brian Robertson, además de Brian Downey a la batería y al líder absoluto del combo, Phil Lynott, que se encarga de las voces, bajo y la grabación de alguna guitarra, siendo el compositor de todos y cada uno de los temas que lo componen, con la puntual colaboración de Gorham, Downey o Robertson. Una auténtica maravilla de principio a fin que terminó de abrir las puertas de USA a la banda.
14.- UFO “Force it” (1975)
Álbum de consolidación de la banda como uno de los pilares indiscutibles de la década. La llegada de M. Schenker en el disco anterior confirmó un sonido propio y la creación de un emblema del hard rock. Phil Mogg a las voces, Schenker a las guitarras, Pete Way al bajo y Andy Parker a la batería confirman una alineación espectacular, junto a temas como “Let it roll”, “Shoot shoot”, “This kids” o uno de mis favoritos de su discografía como es “Out in the street”.
15.- Lynyrd Skynyrd “Pronounced leh-nerd skin-nerd” (1973)
Álbum inabarcable, con canciones que todo el mundo conoce, aunque no sea fan de la banda. “Tuesday’s gone”, “Gimme three steps”, “Simple man” o “Free bird” son ejemplo de un redondo perfecto. La Three Guitar Army compuesta por Gary Rossington, Allen Collins y Ed King se unen al talento desbordado de Ronnie Van Zant a las voces, Billy Powell a los teclados, Leon Wilkenson al bajo y Bob Burns con la batería, para firmar un disco mayestático que debe estar en todos los listados referentes al rock. Sus siguientes producciones también cabrían aquí, pero al elegir 1 disco por banda debo dejar fuera “Second helping” (1974) o “Nuthin’ fancy” (1975).
16- Allman Brothers Band “Eat a peach” (1972)
La discografía de la banda está llena de momentos gloriosos, pero este álbum puede que recoja su compilación más completa. Poco antes del fallecimiento de Duane, alma mater del grupo, y convirtiendo las mixtura de jazz, blues y rock en señal propia de estilo, nos encontramos una delicia absoluta que no hay manera de denostar. Hits como “Ain’t wastin’ time no more”, “Melissa”, “One way out”, “Trouble no more” o esa locura de desatada brillantez que son los más de 30 minutos de “Mountain jam”.
17.- Whitesnake “Lovehunter” (1979)
La saga Purple es indispensable e inacabable y el 2º LP de los Whitesnake de David Coverdale no podía faltar. Con la inclusión de Jon Lord a los teclados y la maravillosa pareja de guitarristas formada por Bernie Marsden y Micky Moody, además de Neil Murray al bajo y Duck Dowle a la batería. Aquí ya aparecen clásicos indisolubles a la banda como “Long way from home”, “Walking in the shadow of the blues” o “Mean business”, pero todas las composiciones son fantásticas y marcan a fuego el sonido clásico de la banda.
18.- Van Halen “I” (1978)
Debut de la banda estadounidense que marcó la siguiente década, con su formación clásica y la unión de todas sus claves típicas. Maestría musical, coros de escándalo, melodías muy pegadizas y efectos al servicio de las canciones. La aparición de un tema como “Eruption” puso a Eddie en boca de todos, pero hits como “Runnin’ with the devil”, “Ain’t talk about love” o el pelotazo que supuso la versión de “You really got me” no hacen más que confirmar que estamos ante una banda única.
19.- Rainbow “Ritchie Blackmore’s Rainbow” (1975)
La huida de Ritchie Blackmore de Deep Purple nos regaló otra banda inevitable para hablar del rock setentero. Reclutó a los músicos del grupo Elf (salvo el guitarrista) para grabar su debut como solista, con Ronnie James Dio como vocalista, Craig Gruber al bajo, Gary Driscoll a la batería y Mickey Lee Soule a los teclados, imponiendo la parte hard roquera que le hizo abandonar a su banda que derivaba hacia terrenos más funk/soul. Clásicos imperecederos como “Man on the silver mountain”, “Catch the rainbow”, “The temple of the king” o sus versiones de “Black sheep of the family” y “Still I’m sad” componen un redondo compacto como una roca.
20.- Camel “Mirage” (1974)
Uno de los discos cumbre de una de las bandas top del rock progresivo de toda la historia. La banda formada por Andrew Latimer, Peter Bardens, Doug Ferguson y Andy Ward ya había sorprendido con su álbum debut, pero es aquí donde alcanzan uno de sus picos más altos de creación. “Freefall”, el compendio compuesto por “Nimrodel/The procession/The White rider” y “Lady fantasy” son tan grandes que podrían definir el género por sí mismas. Una maravilla que algunos recuerdan por su portada, modificación de una cajetilla de cigarrillos norteamericana, y la mayoría por sus cambios de ritmo y melodías fantasiosas.
21.- Queen “A night at the opera” (1975)
Tras el éxito logrado con el single “Killer queen”, del anterior álbum, debían confirmar su ascenso con un álbum largo, caro, complicado y espectacular. Freddie Mercury, Brian May, John Deacon y Roger Taylor completan la escritura y composición de un compendio misceláneo de estilos y resultados superlativos. Clásicos escuchados hasta la saciedad como “You’re my best friend”, “Love of my life, “I’m in love with my car” o “Death on two legs”, nada comparable al impacto social mundial del clásico absoluto que es “Bohemian Rhapsody”.
22.- Uriah Heep “The magician’s birthday” (1972)
Siempre me ha fascinado este disco. Puede que el anterior “Demons and wizards” sea el más famoso o que los prefieras con este o aquel vocalista, pero esta colección de canciones sobre un libreto escrito por Ken Hensley me parece fascinante. Duro, complejo y progresivo, dando mucha importancia a los teclados del propio Ken y la mágica voz de David Byron. El sempiterno Mick Box a las guitarras, Lee Kerslake a la batería y Gary Thain al bajo terminan de componer la formación preferida por muchos de sus fans, y “Sunrise”, “Spider woman o “Sweet Lorraine” son composiciones únicas.
23.- Ramones “Rocket to Russia” (1977)
Tercer disco del grupo que ya había revolucionado el mundo musical con sus canciones directas, rápidas y de ritmos repetitivos. Aquí sigue la formación original, con Joey a la voz, Johnny con la guitarra, Dee Dee al bajo y coros, y Tommy tras los parches, presentando un puñado de sus clásicos inmediatos como “Cretin hop”, “Rockaway beach”, Sheena is a punk rocker”, “We’re a happy family” o “Teenage lobotomy”. Cualquier trabajo de los grabados para el sello Sire podría aparecer aquí, pero hoy me ha dado por elegir este. Clásico inmediato e infalible.
24.- Grand Funk “We’re an american band” (1973)
El séptimo álbum de la banda supuso su primera colaboración con el productor Todd Rungren. También apareció la figura de Craig Fost colaborando en los teclados, y la aparición del batería Don Brewer como voz principal en varios temas. Tuvo una gran acogida, tanto de crítica como de público, y supo moderar el salvajismo en directo con una variedad que dio mucha libertad a los músicos en la composición y desarrollo de los temas. Don Brewer y Mark Farmer deben pasar a la historia de la música, con Mel Schacher como compañero inseparable.
25.- Janis Joplin “Pearl” (1971)
A las pocas semanas de su muerte, Columbia Records lanzó el álbum más exitoso de la carrera de Janis. Con 10 cortes que podrían ser singles sin ninguna discusión, incluye la versión “Me and Bobby McGee” de Kris Kristofferson, la cantada a capela por la propia Janis “Mercedes Benz” o la instrumental “Buried alive in the blues”, además de clásicos suyos como “Move over”, “Cry baby” o “Get it while you can”. Fue el único disco grabado con la Full Tilt Boogie Band de John Till, Brad Campbell, Clark Pierson, Richard Bell y Ken Pearson, contando con la colaboración de Bobby Womack entre otros. Una delicia que sigue sonando maravilloso para recordarnos a una de las voces definitivas del mundo de la música.
26.- Montrose “Montrose” (1973)
El guitarrista Ronnie Montrose montó su propia banda, con Sammy Hagar a las voces, Denny Carmassi a la batería y Bill Church al bajo. Su debut ha cobrado mayor y mayor importancia con el paso del tiempo. Su reconocimiento en el momento no fue muy celebrado, pero después muchos han reconocido su influencia e importancia. Ese inicio visceral con “Rock the nation”, “Bad motor scooter” y “Space nation #5” es poderosísimo, y una cara B con “Good rockin’ tonight” o “Rock Candy” es simplemente espectacular. Un álbum a reivindicar y no olvidar.
27- New York Dolls “New York Dolls (1973)
La mezcla perfecta entre el glam de Bolan o Bowie y el punk de Stooges o MC5 salió de NYC, con estos 5 tipos que vestidos con ropa de mujer y maquillados, han influenciado de forma directa a muchísimos grupos. Este debut no tuvo nada de éxito, pero es un compendio extraordinario de lo que hablamos. Un uppercut directo a la mandíbula como “”Personality crisis”, un crochet de izquierdas como “Frankenstein”, un jab directo a la mandíbula como “Vietnamese baby”, todo un compendio de golpes que acabarán contigo en el suelo.
28.- Jethro Tull “Aqualug” (1971)
Una de las cumbres en la carrera de la banda de Ian Anderson. Considerada como conceptual, aunque el propio Anderson lo ha negado varias veces, incluye varias canciones que reflexionan sobre Dios, la religión e incluye muchos pasajes acústicos. Fue el primer disco de Jeffrey Hammond y John Evan, al mando del bajo y los teclados respectivamente, compartiendo estudio de grabación con Led Zeppelin en los Island Studios londinenses. El crecimiento imparable del rock progresivo con esos toques psicodélicos, blues y hard roqueros, lo hacen una pieza única, dando una importancia capital a la flauta de Ian Anderson, también responsable de la voz y la guitarra acústica. Temas como “Aqualung”, “Cross-Eyed Mary” o “Hymn 43” son recordados como piezas cave del movimiento en la época.
29.- Budgie “Never turn your back on a friend” (1973)
Varias significaciones las que contiene este disco. Es el tercero del trío galés formado por Bruke Shelley al bajo y voces, Tony Bourge a la guitarra y coros, y Ray Phillips a la batería. Último con Ray en el grupo, con portada del gran Roger Dean, y con todas las canciones originales del terceto excepto la versión acelerada de “Baby, please don’t go” de Big Joe Williams. El endurecimiento de su sonido y la velocidad de su propuesta los coloca como uno de los grupos originarios del heavy metal.
30.- Wishbone Ash “Argus” (1972)
Tercer álbum de uno de esos grupos a los que podemos llamar sin ningún lugar a dudas como especiales. Todos sus primeros discos son maravillosos, pero posiblemente sea este el que más he escuchado y más me gusta. Banda británica de rock con Martin Turner (voz y bajo), Andy Powell (guitarras), Ted Turner (guitarras) y Steve Upton (batería) que crean un álbum magistral que, da igual cuando lo descubras, te maravillará.
31.- The Dictators “Go girl crazy!” (1975)
Que los Dictadores son un referente absoluto para mí es algo impepinable, casi tanto como la importancia de este disco. Andy Shernoff creó todas las canciones que han pasado a la historia del punk rock americano, como “The next big thing”, “Two tub man”, “Master race rock” o “Weekend”. Una maravilla compuesta por todos los referentes clásicos del rock and roll y un humor desbordante, con la magia especial de un arma secreta, el gran Handsome Dick Manitoba. El recientemente fallecido Scott Kempner (guitarra), el mítico Ross Friedman (guitarra) y Stu Boy King (batería) completan la formación más clásica de uno de los grupos que marcaron a toda una generación.
32.- Mike Oldfield “Tubular bells” (1973)
Un chaval de 19 años, multi instrumentista destacado y con un talento espectacular, daba el pistoletazo de salida a las producciones musicales de Virgin Records con este binomio de canciones instrumentales que marcó un antes y un después en el mundo de la música. Su virtuosismo con tantos instrumentos, su desarrollo melódico de la canción, su experimentación continua, el desarrollo de la grabación multi pista, todo supuso una quiebra de las tradiciones y una ruptura muy exitosa, siempre hacia adelante. Su aparición en la célebre película “El exorcista” no hizo más que encumbrar más todavía su legado. Una de esas composiciones que suenan de fondo, enganchan y te obligan a ponerla de nuevo para prestarle la atención que merecen.
33.- Taste “On the boards” (1970)
Taste es la banda que encumbró al gran Rory Gallagher, y este es su álbum favorito, con algunos de sus temas más reconocidos, como el inicial “What’s going on”, y una demostración instrumental mayúscula, que le acompañó a lo largo de toda su trayectoria musical. Rory era la voz, guitarra, saxo y harmónica del combo, y se hacía acompañar de Richard McCracken al bajo y John Wilson a la batería. Recupéralo cada cierto tiempo y verás que, ya aquí, están muchas de las características prominentes del mejor guitarrista del mundo según Hendrix.
34.- Bad Company “Bad Co.” (1974)
Uno de esos discos que pasan a la historia. Fue el debut del sello Swan Song Records de Led Zeppelin, y fue un éxito arrollador a los 2 lados del Atlántico. 2 antiguos miembros de la emblemática banda Free se unieron al guitarrista fundador de Mott the Hoople, Mick Ralphs, y al bajista de King Crimson, Boz Burrell, creando una de los grupos más emblemáticos del hard rock melódico de la historia. Todas sus canciones son recordadas, pero ese inicio con “Can’t get enough”, “Rock steady” y “Ready for love” es difícilmente superable.
35.- Mountain “Climbing!” (1970)
Leslie West es uno de los mejores guitarristas de la música rock y aquí debuta con la banda que pasó a la historia junto a Felix Pappalardi (bajo, guitarra rítmica y productor), Steve Knight (teclados) y Corky Laing (batería y percusión). Contiene alguno de sus temas más emblemáticos, “Mississippi queen”, “Theme from an imaginary western” o “Never in my life”, y una combinación perfecta de poderío roquero y maestría instrumental, como ese cierre de “To my friend” o esos arreglos del inicio de “The laird”. También destaca la portada, obra de la esposa de Felix, Gail Collins, que ha pasado a ser una estampa única en la iconografía de la banda. De esa etapa inicial podríamos elegir cualquiera de los discos que la componen, pero creo que este es el más redondo.
36.- KISS “Kiss” (1974)
Los neoyorquinos iniciaban una aventura que les he hecho llegar hasta 50 años después con seguidores alrededor de todo el mundo y fanatismo a niveles extremos. Cualquier álbum de su etapa iniciática setentera podría caber aquí, así que tiramos por el sendero recto y elegimos su debut. Formación clásica con Paul Stanley, Gene Simmons, Ace Frehley y Peter Criss y emblemas de la banda como “Strutter”, “Firehouse”, “Cold gin” o “Black diamond”. Indiscutibles.
37.- Alice Cooper “Killer” (1971)
Tras el éxito que supuso el álbum “Love it to death” con el single “I’m eighteen”, la banda de Alice Cooper nos presenta su álbum más compacto y sólido hasta el momento. Con la formación clásica con Neil Smith a la batería, Dennis Dunaway al bajo, Glen Buxton y Michael Bruce a las guitarras y Vincent Furnier a la voz, nos llegan hits tan reconocibles como “Under my wheels”, “Be my lover”, “Desperado”, dedicada al recientemente fallecido Jim Morrison, o “Killer”.
38.- Cactus “Cactus” (1970)
Emblemas del rock blues norteamericano, contaban con Tim Bogert y Carmine Appice, bajo y batería de Vanilla Fudge, como principales emblemas, más Jim McCarthy a la guitarra y Rusty Day a las voces. La fuerza y potencia que desprenden sus composiciones les hace un nombre y este primer álbum ya demuestra la grandeza que atesoran. Las versiones de clásicos como “Parchman farm” y “You can’t judge a book by the cover” se acompañan de temazos propios como “Bro. Bill” o “Let me swim”. Un disco adictivo y creador de muchas innovaciones en USA.
39.- The Who “Quadrophenia” (1973)
Tras el éxito de “Tommy” y “Who’s next?”, además de los crecientes rumores de separación, la banda de Pete Townsend, Roger Daltrey, John Entwistle y Keith Moon se embarcó en otra ópera rock que contaba la historia de un joven dentro del movimiento mod británico y sus desilusiones vitales. Temazos como “The real me”, “I’m one” o “Love, reign o’er me” decorados con montón de orquestaciones, componen la BSO de otra de esas películas cuya filmación se recuerda por algunos detalles, pero no llegan a acercarse a la grandeza de su música.
40.- Rush “Caress of steel” (1975)
Tercer disco de la banda canadiense, fracaso estrepitoso de ventas, que supone una delicia escuchar. Con temas radiables como “Bastille day” o “Lakeside park”, incluye 2 extensas suites de 12 y 20 minutos que supusieron un fracaso comercial, pero son una delicia para los fans de la banda. A partir de aquí podemos considerar al trío formado por Geddy Lee, Alex Lifeson y Neil Peart como parte imprescindible de la historia de la música.
41.- Credence Clearwater Revival “Cosmo’s Factory” (1970)
Álbum más exitoso de un grupo exitoso y consolidado. John Fogerty es considerado merecidamente una de las figuras emblemáticas del rock norteamericano y aquí vuelve a demostrar que su capacidad para crear hits es insuperable. Canciones como “Travellin’ band”, “”Up around the bend” o “Who’ll stop the rain” confirman que estamos ante una de las bandas definitivas del rock americano, y John Fogerty como una de sus figuras indispensables.
42.- Scorpions “Lovedrive” (1979)
Tras el éxito del directo “Tokyo tapes” cambiaron de sello discográfico y debutaron con Mercury Records con este disco que, además del mercado alemán, francés o británico, les abrió las puertas de Japón y de Estados Unidos. Hits como “Loving you Sunday morning”, “Another piece of meat” o “Is there anybody there?” han pasado a ser clásicos de la banda, y la formación con Klaus Meine, Rudolf Schenker, Matthias Jabs, Francis Buchcolz y Herman Rarebell se convertiría en clásica. Aquí colaboró Michael Schenker en varios de los temas y Hipgnosis se encargó de la polémica portada.
43.- Johnny Thunders & The Heartbreakers “L.A.M.F.” (1977)
Hay tipos que personifican un género musical y, junto a Joe Ramone, Manitoba, Iggy y Stiv Bators, Johnny Thunders forma el repoker en Estados Unidos. Aquí se une a los Heartbreakers de Walter Lure, Billy Rath y Jerry Nolan para grabar uno de los álbumes definitorios del punk norteamericano. “Born to lose”, “I wanna be loved” o la versión del “Chinese rock” de los Ramones ponen a este disco entre lo mejorcito del punk.
44.- Supertramp “Breakfast in America” (1979)
Tras los éxitos de “Crime of the century” (1974) y “Crisis? What crisis?”, Rick Davies, Roger Hodgson, Dougie Thomson, John Helliwell, Bob Siebenberg y Slyde Hyde se desmarcan con su álbum más exitoso y celebrado. Con Hodgson y Davies como cabezas pensantes del proyecto, mezclan guitarras, vientos, armonías vocales y ritmos progresivos en una decena de canciones que fueron un éxito absoluto y han mantenido el paso del tiempo con una fortaleza a prueba de bombas. Hits como “The logical song”, “Goodbye stranger”, “Breakfast in America” o “Take the long way home” solo son un ejemplo incontestable de una discografía impoluta en los 70.
45.- The Stooges “Fun house” (1970)
Salvaje, seminal, crudo, con un Iggy desatado y un exceso en todo lo que propone. The Stooges son conocidos como el origen del punk, la banda protopunk más monstruosa por discos como este. Iggy es peligroso en su forma de cantar, Ron Asheton es oscuro es su tratamiento de las guitarras, y las bases de Dave Alexander al bajo y Scott Asheton a la batería son primitivas y violentas. El saxo de Steve Mackay da un halo de viaje alucinante constante y canciones como “T.V. eye” o “Fun house” te meten en una pesadilla de la que no quieres salir. Alucinante.
46.- The Police “Outlandos d’Amour”· (1978)
El álbum debut del trío que los colocó inmediatamente entre las bandas más preponderantes del momento. Su mezcla de estilos y sus instantáneos hits, caso de “Roxanne”, “So lonely” o “Can’t stand losing you” les llevaron al éxito casi inmediato. Esa mezcla de rock, reggae, melodías pop e instrumentación de gran calidad les colocó en lo más alto. Los siguientes años no pararon de agrandar su figura, y los nombres de Sting, Andy Summers y Stewart Copeland van aparejados a ello.
47.-Gentle Giant “The power and the glory” (1974)
Una de esas bandas que solo conocen los aficionados al género progresivo, pero que son una delicia para los oídos. Sexto álbum de la formación británica que consiguió grabar su mejor trabajo, con letras revolucionarias y un gusto musical exquisito. Derek Shulman, Gary Green, Ray Shulman, John Weathers y Kerry Minnear son los protagonistas de uno de los mejores discos de la década y del movimiento progresivo en particular.
48.- Tom Waits “Some change” (1976)
Descubrí a Tom Waits a principios de los 90, gracias a mi amigo el Indio y, desde ese mismo momento, caí ante su propuesta setentera. Esos inicios de crooner alcohólico, mezclando influencias cabareteras con textos callejeros y sonoridades deudoras del jazz y el blues, te permiten elegir cualquiera de sus trabajos de esa época. Me decanto por este porque cuenta con alguno de los temas que más me impactaron y me siguen gustando, como “Tom Traubert’s blues”, “Step right up”, “I wish I was in New Orleans” o “Invitation to the blues”, además de uno de sus canciones más icónicas como “The piano has been drinking (not me)”. Cuerdas y vientos al servicio del talento.
49.- Hound Dog Taylor “Hound Dog Taylor & The Houserockers” (1971)
Una de las cumbres del blues de Chicago. Un tipo que publicó su primer disco, después de muchos conflictos vitales, con más de 50 años y, pese a ello, todavía recordamos. Se encargó de las voces y guitarra, junto a Brewer Phillips como 2º guitarrista y Ted Harvey con la batería. Blues clásico de marcha irrefrenable y contenedor de un sonido poderoso y un par de temas clásicos de su set como “She’s gone” o “Give me back my wig”. Si te gusta el blues, adorarás este disco.
50.- Meat Loaf “Bat out of hell” (1977)
Uno de los discos más exitosos de la historia que surgió de la unión de Meat Loaf y el compositor y músico Jim Steinman. Steinman había escrito el musical Neverland sobre la figura de Peter Pan y, a partir de ahí, adaptaron algunas canciones y escribió otras para completar los 7 cortes que componen el álbum. Dieron golpes a muchísimas puertas para grabarlo hasta que dieron con Todd Rundgren que produjo y mezcló el disco, además de tocar en el mismo, dando el impulso necesario a su éxito. Su importancia fue tal que provocó una 2ª, incluso una 3ª parte.
51.- Humble Pie “Smokin’” (1972)
Primer álbum tras la salida de Peter Frampton, dejando todos los mandos en la dirección a Steve Marriott, y convirtiéndose en su disco más exitoso. Versiones tan personales como “C’mon everybody” o “I wonder” se juntan con exitazos como “You’re so good to me” o “30 days in the hole”. La llegada de Clem Clemson (guitarra) junto a Marriott (voz, guitarra, harmónica y teclados), Greg Ridley (bajo) y Jerry Shirley (batería) cierran la grabación de un redondo fantástico.
52.- Ted Nugent “Cat scratch fever” (1977)
Tercer álbum de Ted tras formar su propia banda después de los Amboy Dukes y es un auténtico escándalo de locura guitarrera. Tras la vuelta de Derek St. Holmes, el propio Ted se ocupó de las voces en 3 temas, que se ocupó de la guitarra rítmica y de las voces principales junto a Rob Grange al bajo y Cliff Davies a la batería, pero quedaba claro el protagonismo total del loco guitarrista de Michigan. Nos quedan algunos de sus temas más reconocidos, como el tema que da título al disco, “Wang Dang sweet Poontang” o la instrumental “Home bound”.
53.- Golden Earring “Moontan” (1974)
Otra de esas joyas ofuscadas por el éxito mundial de una de las canciones que contiene. “Radar love” los dio a conocer en todo el mundo, y es reconocida como una de las grandes canciones de la historia, pero párate a escuchar el disco entero con atención y descubrirás mucho más. A veces me recuerdan a esos interludios maravillosos que Deep Purple regalaban a sus audiencias y otras a un combo en pleno apogeo demostrando la grandeza con la que es reconocido en su país. Una joya a reivindicar.
54.- Derek and the dominoes “Layla and other assorted love songs” (1970)
El disco que es conocido por todos, por la colaboración de Duane Allman, por suponer uno de los momentos más altos en la carrera de Eric Clapton, y por un tema que todos conocen, “Layla”. Pero estamos ante un álbum enorme, de blues, de rock, de inspiración desbordante, de musicalidad fantástica y que ha pasado a la historia por su historia, su mística y su calidad. Imprescindible.
55.- Yes “Fragile” (1971)
Un disco que se esconde tras el éxito y reconocimiento del single “Roundabout”, pero supone varias cosas más. Fue la llegada de Rick Wakeman al mando de los teclados y su introducción en el mercado estadounidense. La labor de Jon Anderson, Steve Howe, Chris Squire, Bill Brufford y Rick Wakeman es asombrosa y supone uno de los picos del por entonces mainstream Prog-Rock.
56.- Blue Oyster Cult “Secret treaties” (1974)
Primer álbum realmente notable en la discografía de una de las bandas indiscutibles del rock duro americano. Con los clásicos Eric Bloom (voz y guitarra), Buck Dharma (guitarra), Albert Brouchard (batería), Joe Bouchard (bajo) y Allen Lanier (teclados), incluyen alguno de sus clásicos indiscutibles, como “Dominance and submission” (cantada por A. Brouchard), “Astronomy” (versionada con posterioridad por Metallica) o la inicial “Career of evil” (con la colaboración de la icónica Patti Smith). La mayoría se decantarían por alguna de sus obras posteriores, pero a mí me gusta especialmente esta y sirve de ejemplo para conocerlos.
57.- David Bowie “The rise and fall of Ziggy Stardust and the spiders from Mars” (1972)
La complejidad de su propuesta y la gran variedad de estilos que acomete en esta mezcolanza de Opera Rock y álbum conceptual sobre la llegada de un extraterrestre a la tierra para salvarla después de un apocalipsis es espectacular. Bowie contó con su banda de acompañamiento estelar, The Spiders from Mars, con Mick Ronson a la guitarra y coros, Trevor Bolder al bajo y Mick Woodmansey a la batería. Además contó con otras colaboraciones estelares como Rick Wakeman en los teclados y Ken Scott en la producción. Grandes canciones como “Starman”, “Ziggy Stardust” o “Sufragette city” forman parte de uno de esos discos que aparecen en todas las listas por méritos propios.
58.- Trapeze “Medusa” (1970)
El segundo álbum de la banda británica que fue el gérmen de músicos muy importantes en la historia del rock. Todos conocemos la importancia suprema de Glenn Hughes (voz y bajo), pero hay que recordar que Mel Galley (guitarra y voz) también formó parte de Whitesnake, Phenomena o Finders Keepers, y Dave Holland fue el batería de Judas Priest durante muchos años. Aquí vemos una muestra clara de la propuesta del grupo, fusionando funk, blues y rock a la perfección y contiene una canción tan brutal como “Medusa”.
59.- Vangelis “The dragon” (1971)
Tras la ruptura de Aphrodite’s Child, el debut de Vangelis supuso una maravillosa coda de 3 canciones de larga duración, con percusiones varias y ritmos cadenciosos. Grabado en 1971 y publicado en 1978, con la colaboración de Anargyos Koulouris con las guitarras, Brian Odger al bajo, Micky Waller con la batería y las percusiones, y Michel Ripoche al violín. El poco convencimiento de Vangelis y la quiebra del sello BYG supuso un impass hasta que Charly Records compró la discográfica quebrada y, entre sus fondos, encontró esta grabación sin publicar. Tras varios juicios se llegó a una sentencia, pero el disco ya estaba en el mercado y aquí una muestra del talento del griego sin filtrar.
60.- Eric Clapton “Slowhand” (1977)
Eric ya era una leyenda, desde los 60 había hecho que su figura no parara de crecer. En su 5º álbum en solitario, que sería el más exitoso se tituló con el mote como se le conocía y regaló alguno de sus hits más conocidos. Comenzar con una tríada como “Cocaine”, “Wonderful tonight” y “Lay down Sally” está al alcance de muy pocos. Se acompañó de músicos solventes como Carl Radle, Dick Sims, James Oldaker o George Terry, encumbrándolo en las listas de éxitos de todo el mundo. Que un tema como “The core” quede casi escondido en su discografía deja clara la grandeza de este disco.
61.- Rod Stewart “Every picture tells a story” (1971)
Fantástico tercer disco de la carrera en solitario de Rod “The Mod”, cuando aun iba despeinado y en camiseta y todo lo que hacía era maravilloso. Rodeado, entre otros, por alguno de sus compañeros en Faces como Ronnie Wood, Ronnie Lane o Ian McLagan, nos regala alguno de sus clásicos más famosos como “Maggie May”, “Every picture tells a story” o las versiones de los clásicos “That’s all right” o “Reason to believe”. Una deliciosa mezcla de rock, folk, soul o blues, con arreglos fantásticos, mandolinas, violines, todo tipo de guitarras y teclados y la maravillosa garganta desgarrada de Rod.
62.- ZZ Top “Fandango!” (1975)
Cuarto álbum del trío tejano, donde da cabida, en la 1ª mitad del disco, a su imponente directo, con canciones grabadas en vivo en Nueva Orleans, y una 2ª parte en estudio, donde aparecen emblemas del combo rockero como “Tush”. Billy Gibbons, Dusty Hill y Frank Beard pasan definitivamente a la historia de la música, si no lo habían hecho ya. El power trío del blues rock por excelencia.
63.- E.L.O. “A new world” (1976)
Sexto álbum de la banda de Jeff Lynne que los encumbró en las listas británicas. Rock sinfónico de alto octanaje que contiene alguna de sus canciones más reconocidas, como “Telephone line”, y que a mí me parece su mejor trabajo. Liderados por Jeff, con Kelly Groucutt al bajo, Richard Tandy a los teclados y Bev Bevan a la batería, con colaboraciones en las cuerdas y los coros, componen su mezcolanza habitual de música trabajada con orquestaciones de primer nivel.
64.- The Clash “London calling” (1979)
Apurando la década llegaba el 3er álbum de los británicos. Abrían tanto su abanico de influencias y sonidos que dejaban atrás el punk en el que se les había englobado por un rock social y contestatario. El rock and roll, el pop, el reggae, el pop y unas letras conflictivas y duras sobre las realidad social, las drogas, el racismo, etc… convirtieron a este disco en algo más. Joe Strummer, Mick Jones, Paul Simonon y Topper Headon convirtieron temas como “London calling”, “Spasnish bombs”, “Lost in the supermarket” o “Death or glory” en himnos generacionales.
65.- Riot “Narita” (1979)
El heavy explotó en los 80, pero hubo un puñado de bandas que sembraron la semilla en los 70 y, entre ellas, están los estadounidenses Riot que, con su 2º álbum, grabaron en los fans del género uno de los discos indiscutibles. Las iniciales “Waiting for the taking”, “49er” o la espídica versión del “Born to be wild” de Steppenwolf son un exponente de lo que vamos a descubrir. Guy Speranza a las voces, Mark Reale y Rick Ventura a las guitarras, Jimmy Iommi al bajo y Peter Bitelli a la batería llegaron para quedarse, siendo estos sus años dorados.
66.- Dead Boys “Young, loud and snotty”” (1977)
Debut de otra de las bandas norteamericanas definitorias del punk rock. Stiv Bators, Cheetah Chrome, Jimmy Zero, Jeff Magnum y Johnny Blitz definen el modo de vida excesivo del género. Drogas, alcochol, excesos, insomnio y profusión desproporcionada de todo en 10 temas, algunos de los cuales han pasado a la historia de la música. “Sonic reducer” o “Ain’t nothin’ to do” son icónicas y forman parte de la iconografía vital de un buen puñado. Dignos sucesores de los Stooges.
67.- Buffalo “Volcanic rock” (1973)
Banda australiana precursora del hard rock y heavy metal en el hemisferio sur, con un sonido espectacular, a medio camino entre el heavy psych y el hard stoner más primigenio. No tuvo ninguna repercusión, pero con los años aparece en muchas listas dedicadas al género y es una maravilla recuperarlo. Con Dave a las voces, John a la guitarra, Peter al bajo y Jimmy a la batería, ofrecen 6 canciones en menos de 40 minutos, como debe ser un álbum de rock de los 70.
68.- The Sensational Alex Harvey band “The imposible dream” (1974)
Tercer álbum de la banda formada por el escocés Alex Harvey que mezclaba elementos roqueros con flashes de cabaret, blues-rock, prog-rock, hard rock y una escenografía muy teatral que influenció a gente tan insigne como Bon Scott. Aquí apreciamos esa mezcla tan especial y juntó a músicos que demostraron su valía con una larga carrera como Chris Glenn (MSG), Zal Cleminson (Nazareth), Ted McKenna (Rory Gallagher, MSG) o Hugh McKenna que compuso todos los temas con Álex abriendo el mercado británico para la banda.
69.- The Damned “Damned, damned, damned” (1977)
Uno de los primeros discos realmente importantes del punk británico, por no decir el primero. Poco antes lanzaron el single “New rose”, que alcanzó repercusión y es una demostración clara del género, muestra la faceta más inicial del punk en las islas, bastante diferente del surgido en los Estados Unidos, aunque lo cierren con una versión del “I feel alright” de The Stooges. Fundamental e imprescindible para los amantes del punk rock o para los que quieren investigar un poco sobre ello.
70.- Foghat “Fool for the city” (1974)
Quinto trabajo de estudio de los británicos, dando la clave con su propuesta roquera, incluyendo alguno de sus temas más exitosos como “Slow ride”, “Fool for the city” o la versión del clásico de Robert Johnson “Terraplane blues”. Cuarteto formado por Dave Peverett, Rod Price, Nick Jameson y Roger Earl que lograron su redondo más completo y reconocido.
71.- Molly Hatchet “Flirtin’ with disaster” (1979)
Otras las bandas de southern rock por antonomasia, con uno de sus discos más emblemáticos. Con el típico juego de guitarras del género y unas melodías vocales pegajosas, componen uno de los álbumes más redondos recordados. El juego de Dave Hlubek, Duane Roland y Steve Holland con las guitarras se acompañan por la característica voz de Danny Joe Brown y las bases rítmicas de Banner Thomas y Bruce Camp, dejando algunos de sus temas característicos. Destaca también la representativa portada del artista Frank Frazetta, todo un icono dentro de su trabajo.
72- Genesis “Selling England by the pound” (1973)
Una de las bandas más reconocidas del rock progresivo llegaba a presentar su disco más emblemático. Peter Gabriel, Steve Hackett, Mike Rutherford, Phil Collins y Tony Banks presentan el culmen de su creatividad, acercando la comercialidad al mensaje y virtuosismo de sus composiciones. Temas como “I know what I like (in your wardrobe)”, “Firth of filth” o “The cinema show” dejan claro el grado de inspiración y complejidad estilística del grupo.
73.- The Runaways “The Runaways” (1976)
Cherie Currie, Lita Ford, Joan Jett, Jackie Fox y Sandy West marcaron un hito al ser una de las primeras bandas de hard rock/heavy metal totalmente femeninas que obtuvieron éxito y una carrera más allá de su imagen, con una fuerza escénica imponente y una rebeldía generacional que, en este disco debut, se muestra en todo su esplendor. Riffs vigorosos, una base rítmica consistente y una vocalista salvaje y demostrando que el género era perfecto para su propuesta. El single “Cherry bomb” les hizo famosas y abrió muchas puertas.
74.- Warhorse “Warhorse” (1970)
La saga Purple es tan extensa que, salvo los muy fans, ya no recordamos a Nick Simper como el 1er bajista del grupo. Al salir montó otro grupo con Ged Peck a la guitarra, Malcolm Poole a la batería y Ashley Holt al frente del micro. Las influencias de esos primeros años en Deep Purple son tan evidentes que el gusto por los primeros te lleva a estos últimos. Hard rock primigenio, con fuerza en las bases rítmicas y voz poderosa.
75.- MC5 “Back in the USA” (1970)
La fiereza y agresividad de su álbum debut en directo se transformó en su 2º lanzamiento en un compendio de rock and roll, con versiones de Little Richard o Chuck Berry, y un sonido más deudor de la década de los 50 cargado con letras igualmente políticas contra la guerra de Vietnam o la libertad. Rob Tyner, Wayne Kramer, Fred Smith, Michael Davis y Dannis Thompson siempre serán recordados por su presencia en MC5.
76.- Mott the hoople “Mott” (1973)
Sexto álbum de la banda liderada por Ian Hunter que fue un gran éxito. Supuso la última grabación con su guitarrista Mick Ralphs, y es considerado uno de los discos más representativos de la década por méritos propios. Incluye alguno de sus hits como “All the way from Memphis” o “”Honaloochie boogie” y supuso su mayor éxito en UK y su entrada definitiva en el mercado norteamericano. Ian Hunter, Mick Ralphs, Peter Watts y Dale Griffin son los responsables.
77.- Emerson, Lake & Palmer “Trilogy” (1971)
La súper banda por antonomasia del rock progresivo británico, con Keith Emerson (teclados), Greg Lake (voz y cuerdas) y Carl Palmer (batería y percusión). La fusión de maestría instrumental, desarrollos imaginativos y creatividad musical los hace parte fundamental de una década, de un estilo y de la historia de la música. Combinando pasajes instrumentales con el tema que da título a las primeras composiciones originales que aparecen en él, “The endless enigma”, y otros cortes emblemáticos como la balada “From the beginning” lo convierten en imprescindible.
78.- Black Oak Arkansas “High on the hog” (1973)
Otra de esas bandas que no debemos olvidar nunca cuando hablamos de southern rock en particular o rock setentero en general, es la de este grupo que lleva en su nombre el origen del que proceden. Su 4º álbum les coloca en una posición inolvidable del género, dejando a su líder y vocalista, Jim “Dandy” Magnum, como figura indisoluble del género y de la banda. 10 temas con clase y estilo que provocan satisfacción y sensación de bienestar inmediata.
79.- Faces “A nod is a good as a wink… to a blind horse” (1971)
Cuando Rod Stewart y Ronnie Wood, provenientes del grupo de Jeff Beck, se unieron a los ex Small Faces Ronnie Lane, Kenney Jones y Ian McLagan, ya se sabía que algo grande saldría de ahí. Estamos ante su álbum más compacto y exitoso, con hits como “Stay with me” o “Miss Judy’s farm”, sonando tan fresco, festivo y marchoso como siempre. Luego Rod rompería las listas de medio mundo y Ronnie se uniría a los Stones, pero eso ya es otra historia.
80.- Ruphus “New born day” (1973)
Banda noruega de prog rock con un montón de influencias y tonalidades típicas del género en su ámbito más enérgico. Gudny Aspaas, Hans Petter Danielsen, Rune Sundby, Kjell Larsen, Asle Nilsen, Thor Bendiksen y Hakon Graf componen 7 canciones de desarrollos largos, dominio musical y armonías poderosas. Otra maravilla a descubrir más allá de los grandes nombres del progresivo.
81.- Stone the Crowds “Stone the Crows” (1970)
Banda escocesa conocida por su vocalista Maggie Bell y por el accidente con la electrocución en un concierto de su guitarrista Les Harvey. Sin embargo, esa mezcla de blues, soul, rock y la comparación infinita de Maggie con Janis, aunque tiene su propia personalidad y cariz, les encumbra a ser una de esas bandas que nunca olvidas cuando las escuchas por primera vez. Este debut sirve como ejemplo.
82.- Tommy Bolin “Teaser” (1975)
Grabado a la vez que su llegada a Deep Purple para sustituir a Ritchie Blackmore, queda clara la diferencia entre ambos. Tommy era más cercano al jazz, blues y funk que trasladó a Purple, y su delicadeza tocando la guitarra es lo primero que te llega. Acompañado por músicos de reconocido prestigio, como Stanley Sheldon (Peter Frampton), Phil Collins (Genesis) o Jeff Porcaro (Toto), nos deja un breve pero intenso legado pocos meses antes de morir.
83.- Green Bullfrog “Natural Magic” (1971)
Estamos ante uno de esos discos curiosos, fruto de la cabezonería del productor Derek Lawrence. Juntó a varios músicos de sesión (Albert Lee, Jim Sullivan…) con otros de reconocido prestigio como Ritchie Blackmore (Deep Purple) Ian Paice (Deep Purple), Matthew Fisher (Procol Harum), etc… para grabar unas versiones de blues en un par de sesiones de grabación en los De Lane Lea Studios. Pero de ahí salió esta maravilla que te mete de lleno en esa época y, además, incluye el tema “Bullfrog”, original de Lawrence, Blackmore y Paice, que es una auténtica maravilla.
84.- The Alan Parsons Project “Tales of mystery and imagination” (1976)
El proyecto liderado por Alan Parsons y Eric Woolfson debutó con este álbum que ponía música a algunos de los relatos más conocidos de Edgar Allan Poe. Dos piezas componen la intro y outro del disco, eligiendo 5 cuentos, El cuervo, El corazón delator, El barril del amontillado, El sistema del Dr. Tarr y el Profesor Fesser, y La caída de la casa Usher, para ponerles música, siendo la última una monumental suite de más de 15 minutos. Cuenta con muchos invitados para colaborar con los instrumentos y varios vocalistas para encargarse de cada tema. Desde Orson Welles en algunas narraciones a Leonard Whiting, Arthur Brown, John Miles o Terry Sylvester como vocalistas principales.
85.- Blackfoot “Flyin’ high” (1976)
La banda de Rickey Medlocke, con sangre de la tribu india Pies Negros, de ahí el nombre del grupo, publica su 2º álbum de estudio, confirmando que están entre las bandas elegidas del llamado Southern Rock por mérito propio. Su hermanamiento con Lynyrd Skynyrd es evidente, tanto en sonido como en estilo, y ya en este disco vemos los desarrollos guitarreros que los situaron en ese escalón inferior, justo por debajo de los Allman Brothers o los Lynyrd. Acogen su formación más clásica con Rickey al mando del micro y la guitarra, Charlie Hargrett con las guitarras, Greg T. Walker al bajo, coros y teclados, y Jakson Spires con la batería, percusión y coros. 10 canciones de atractivo absoluto y querencia irresistible.
86.- Snafu “Snafu” (1973)
El principal atractivo de la banda, y el por qué llegas a ella, es la presencia de Micky Moody que será guitarrista en los iniciales movimientos de Whitesnake. Su sonido y estilo es claro desde la 1ª canción y, si eres seguidor de la Serpiente Blanca setentera te gustará este disco y esta banda. La banda de Moody y Bobby Harrison se completaba con Colin Gibson, Terry Popple y Pete Solley y solo llegaron a grabar 3 discos en estos primeros años de la década, pero también destaca por la portada del artista Roger Dean. Uno de esos discos que no recuerdas, pero cuando lo pones no lo puedes quitar.
87.- John Lee Hooker & Canned Heat “Hooker ‘n’ heat” (1971)
John Lee Hooker es uno de los bluesman clásicos más definitorios del género, y Canned Heat una de las bandas más representativas que intentaron revitalizar el blues en USA en los años 60. Aquí unen sus fuerzas para regalarnos un doble álbum de blues clásico, con John Lee al mando de voz y guitarra, y la compañía de músicos de Canned Heat, como Alan Wilson, Henry Vestine, Fito de la Parra o Antonio de la Barreda en diversas de las canciones que el gigante de Clarksdale nos regala. La comunión del blues y el rock llevado a su máxima expresión.
88.- Slade “Slayed?” (1972)
Otro de los grupos más reconocidos y triunfantes de la década, cabezas del movimiento glam, que con esta tercera entrega en su discografía abrió un hueco de reconocimiento que todavía se recuerda. Contiene alguno de sus temas más recordados, como “Mama weer all crazee now” o “Gudbuy T’Jane”, además de una versión bastante diferenciada del “Move over” de Janis Joplin.
89.- Suzi Quatro “Suzi Quatro” (1973)
Tras un par de singles de éxito, entre los que estaba “Can the can”, se lanza el debut de Suzi Quatro. Fue todo un éxito y el nombre y rostro de Suzi pasó a ser mundialmente conocido. Se convirtió en todo un icono roquero femenino. En el álbum encontramos un par de versiones reconocidas como “I wanna be your man” de los Beatles o “All shook up” de Elvis, pero siempre lo recordaremos por otro de sus mega éxitos como “48 crash”. Susan Kay cantaba y tocaba el bajo, acompañada de Len Tuckey a la guitarra, Dave Neal a la batería y Alastair McKenzie a los teclados.
90.- Atomic Rooster “In hearing of Atomic Rooster” (1971)
El tercer álbum de los británicos liderados por Vincent Crane, responsable de casi todo lo que escuchamos en el disco. John Cann y Paul Hammond lo grabaron con él, pero dejaron el grupo seguidamente. Crane escribió casi todos los temas con su esposa Pat Darnell, responsable de varias letras, y engloba la totalidad de estilos propuestos por el combo. Rock, hard, jazz, prog, blues, una mezcla de ideas y sonidos que las percusiones, teclados y guitarras aprovecharon al máximo. Justo antes de su publicación salió el single “Devil’s answer” que ayudó al éxito del álbum.
91.- Hawkind “Doremi Fasol Latido” (1972)
Tercer álbum de la banda que engloba varios hitos. Primero con el batería Simon King y el bajista Lemmy Kilmister, que luego fundaría y haría historia con su propia banda, y además fue el que encumbró el conocido como Rock Espacial. Su llegada hizo que la banda adoptara un sonido más fuerte y potente, y la portada del artista gráfico Barney Bubbles define perfectamente lo que vamos a encontrar, esa mezcla de baile ritual bajo el efecto del ácido lisérgico y la profundidad del cada vez más consistente origen del heavy metal.
92.- Johnny Winter “Johnny Winter And” (1970)
Cuarto disco del tejano que, bajo el sello Columbia, incluyó a Rick Derringer, Ramdy Jo Hobbs y Randy Zehringer en su formación, para grabar 11 canciones de blues/rock que convirtieron al albino más famoso del mundo musical en uno de los puntales más representativos del género. Con composiciones propias (3 de Winter, 4 de Derringer, 1 de Zehringer) y 3 versiones compone uno de sus mejores redondos.
93.- Sweet “Desolation boulevard” (1974)
Tercer lanzamiento de una de las bandas emblemáticas del glam rock. Tras el bombazo “The ballroom blitz”, lanzan su disco más exitoso que les abrió las puertas de Estados Unidos y contenía otro de sus temas representativos, “Fox on the run”, todo un boom que todavía hoy sigue sonando en medio mundo. Brian Connolly, Andy Scott, Steve Priest y Mick Tucker formaron uno de los grupos más reconocidos en toda la década.
94.- Granicus “Granicus” (1973)
Estamos ante una de esas bandas formadas al amparo de la irrupción de la British Invasion, con claros dejes a Deep Purple, Cream o Cactus, donde la fuerza que desprenden sus composiciones es tan brutal que terminas investigando, dando valor a lo puramente musical…, y volviendo a poner el disco. Blues rock de alto octanaje, hard rock primigenio, uno de esos discos a recuperar.
95.- Saga “Saga” (1978)
Álbum debut de la banda canadiense de rock progresivo y, aunque solo sea por eso, debe aparecer aquí. La importancia de los teclados, en varios formatos, es de una importancia suprema, con el sintetizador Moog al frente. Ya mostraban canciones fijas en su historia, como “How long”, “Humble stance” o “Perfectionist” y la alineación clásica con Michael Sadlet, Ian Crichton, Jim Crichton, Steve Negus y Peter Rochon.
96.- Savoy Brown “Hellbound train” (1972)
Banda inglesa de blues/rock de la que nadie se acuerda, pero que sacó unos cuantos discos que merecen mucho la pena, y por el que pasaron músicos que luego fueron más reconocidos por su paso por Foghat, UFO, Humble Pie o Yes. En este disco forman la banda Kim Simmonds, Paul Raymond, Andy Silvester, Dave Walker y Dave Bidwell, y nos dejan un compendio fantástico del género, entrando definitivamente en el mercado norteamericano, donde tienen más reconocimiento que en UK.
97.- Ursa Major “Ursa Major” (1972)
Única entrega discográfica de esta banda norteamericana de rock, formada por Dick Wagner, Greg Arama y Ricky Mangone. Un rock iniciático que se olvidó pese a la evolución de Dick con Alice Cooper o la aparición de Billy Joel en los inicios previos a la grabación del disco. Desde la inicial “Sinner” ya ves que estamos ante un gran trabajo.
98.- Bull Angus “Bull Angus” (1971)
Banda norteamericana de hard rock primigenio, desconocida por casi todo el mundo, pero que sacó 2 discos realmente disfrutables, y este debut es una muestra sugerente de su propuesta enérgica y poderosa ya en 1971. Frankie Previte, Dino Paolillo, Larry LaFalce, Lenny Venditti, Geno Charles y Ron Piccolo dejando claro que hay mucha buena música por descubrir todavía.
99.- Geordie “Hope you like it” (1973)
Álbum de debut de la banda que dio a conocer a Brian Johnson, vocalista que sustituyó a Bon Scott en AC/DC y se ha convertido en leyenda. Mezcla de hard rock y glam que constituye una curiosidad disfrutable para estudiosos y frikis trabajadores del rock.
100.- Midnight Sun “Midnight sun” (1971)
Banda danesa de prog rock que viene de la anterior Rainbow, con casi los mismos músicos, ahondando en la propuesta progresiva con toques jazzísticos y desarrollos oníricos. 6 músicos, con Allan Mortensen a las voces, Peer Frost a las guitarras, Bo Stief al bajo, Carsten Smedegaard a la batería, Niels Bronsted a las teclas y Bent Hesselman a los vientos. 7 canciones lideradas por la larguísima “Living on the hill”, de casi 15 minutos de duración. Podría elegir cualquier otro para cerrar esta lista, pero a mí me gusta este.
Espero que hayas pasado un rato divertido y te haya incitado a recuperar alguno de los discos mencionados. No existe ninguna motivación más allá de eso. Si lo hemos logrado, la satisfacción es total. Si, por el contrario, te ha subido la tensión, la solución es muy fácil. Haz tu propia lista. Gracias por leer.
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