Como reza la coletilla del titular de este post, así es y así os lo voy a contar, porque sí, porque el segundo disco de los SCUMBAG MILLIONAIRE quema entre las manos… ¡¡¡pero sobre todo en los oídos!!!. El cuarteto de Gotemburgo sabéis que salió a la palestra hace poco más de seis años y su carrera ha sido meteórica hacia la cima de la escena escandinava más urgente y kamikaze, oséase, la escena high energy rock’n’roll de la que se jactan de ser los perfectos continuadores del legado de Hellacopters, Backyard Babies, Gluecifer y Turbonegro, bueno, con permiso de los The Drippers, Deadheads, The Boatsmen y Hard Action. Como veréis, la competencia por el cetro de la ‘electricidad escandinava’ vuelve a ser muy fuerte y nosotros desde aquí lo gozamos…
Te invito a entrar en el particular ‘Inferno’ de decibelios e infamia de estos action punkrockers, ¡¡¡te lo vas a dejar sobrado!!!…
En una línea de producción inagotable como la que también atesoran los ingleses The Hip Priests, la banda formada por Max, Adde, Dennis y Max han sacado en poco más de un lustro la friolera de veinte singles, unos cuantos splits compartidos con bandazas como Electric Frankenstein, The Boatsmen, The Drippers,…, recopilatorios magníficos como el tributo a Hellacopters y el de los Stooges y, ¡cómo no!, un pepinazo de debut que dejó a todo el mundo con la baba colgando como lo fue aquel Speed del 2018. Sumado, eso sí, ha su ‘neverending tour’ que ya les ha traido unas cuantas veces por nuestra Piel de Toro. Unos currantes del Action Rock, por si te quedaba alguna duda a estas alturas…
Pues bien, dos años después, con multitud de bolos y carretera a sus espaldas, más experiencia acumulada, fans a patadas (al menos en nuestro país) y con las mismas ganas o más de seguir ofreciendo adrenalina suicida en forma de pepinazos sónicos, nos ha llegado hace poco menos de dos semanas Poor And Infamous (2020), la constatación y consolidación de estos kamikazes obsesionados con aquel high energy que empezó a hacer estragos a finales de los 90’s en toda Europa y parte del Universo. Grabado en el mítico Sunlight Studio de Estocolmo y teniendo tras los controles al ya habitual en este tipo de sonidos, Tomas Skogsberg, los Scumbag se han marcado otro disco enrabietado e infame, furioso y encendido to the Max pero notándose cierta evolución en su sonido, bajando un poco revoluciones, en definitiva, gestionando mejor su desenfrenada descarga decibélica con subidones y bajones de intensidad alejándose de un tracklist lineal repitiendo los esquemas del debut. Cortes como el inicial «Demi-God», «Ain’t No Doubt», «Desperado» o «Chasing Down» te van a levantar del asiento a sopapo limpio, la banda no ha perdido pegada, tan sólo la dosifica para intensificar su descarga, sin embargo, cortes como el cadencioso «Inferno», el soulero high energy de «You Had It Coming» con las excelsas colaboraciones de Jenna (Hot Breath) y Elin Larsson (Blues Pills), el death rock decadente de «Put A Price On My Soul», ‘aturbonegrado él’, y el ‘Dregeniano’ «Subterranean Twist» nos regalan, entre comillas, cortes menos encendidos pero que ofrecen un paso adelante sin perder crudeza y encabronamiento. Poco más me queda por decir, ¡¡¡esto hay que metérselo en vena Pupil@s!!!…
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