Rokets – Fast Times (2020)

Seguimos en la senda de la energía decibélica y los ritmos más encendidos y action rock’n’rolers con los finlandeses de Helsinki, ROKETS (no, sigo sin confundirme, ¡su nombre es así!). Ya se pasaron hace poco más de un año por esta casa el quinteto formado por Sami Mustonen (vocals), Giorgios Aspetakis (drums), Heykki Nyman (bass), Sakke Väntinnen (lead guitar) y Jaani Kaoukonen (guitar) para declarar con su EP debut, Speed & Sound (2019) (reseña AQUÍ), su militancia dentro del rock escandinavo más encendido y principalmente adherido a The Hellacopters pero con un ojo también puesto en el rock’n’roll aussie de los hermanos Young y el de Detroit con los Stooges. Consolidados dentro de la escena, como no podía ser de otra manera, vuelven a la carga con su primer LP, Fast Times (2020), que ahora ‘mismito’ te cuento de él. JUMP!!!…

Con los Rokets el ‘tiempo se te va a pasar muy rápido’, «FAST TIMES»!!!…

Como os decía, la banda de Sami Mustonen & Cia ya tiene nuevo disco bajo el brazo y bueno, hay que reseñar que ha sido grabado en el Studio Humbucker así que, como os imaginareis, el mismísimo Robert Pehrsson ha estado tras los controles ofreciendo una producción más equilibrada y rica en matices con respecto al debut. Siguiendo parámetros sónicos parecidos a Speed…, los finlandeses siguen fieles a esa música de ascendente Detroit/Aussie pasado bajo el filtro escandinavo, con canciones que van al grano, con guitarrazos ardientes y melodías muy conseguidas. Y es que estos no son los Scumbag Millionaire del anterior post, no está en su guión el sonar lo más kamikazes posible y provocar vértigo sónico con sus guitarrazos, los Rokets son algo más sutiles, setenteros, intensos, muy intensos sí, pero el Action Punk no pasa por su hoja de ruta y sí el High Energy más vacilón y menos fiero. Cortes como «The Prey» atestiguan su apego a los hermanos Young, igual que el inicial «Fast Times» es rock’n’roll 50’s embadurnado de grasa y distorsión eléctrica, «Locked Up» es un ejercicio trotón 70’s del copón y el final con el semi-acústico y oscurillo «Noise» bajando revoluciones y acercándose claramente a los Märvel justifican sus sutilezas y distintos matices. Por el contrario, cortes como «Thrillseeker», «Fall» u «On The Roll» son la parte más explosiva y cruda de una banda que empieza a demostrar sus cartas dejándonos bien claro que no se cierran tan sólo a la banda de Nicke Andersson y que su cadencia setentera tiene cada vez más peso y quizás en esto haya tenido mucho que ver Mr. Humbucker…