Noche de clásicos de rock and roll, doblete de tributos… El pasado 9 de junio nos visitaron en Barcelona dos de las bandas que mejor tributan a dos de los grandes. Directos desde Inglaterra llegaron Live/Wire, con un show completo de AC/DC y los Sack Sabbath, con el repertorio más selecto de Ozzy de Black Sabbath (1970-1975).
Sack Sabbath fue formada en 2002 por el guitarrista Tony IOU con el fin de tocar una mezcla de material de Ozzy y Dio. Con la llegada de Ozzy Oddbin (vocalista) en 2005 empezaron a concentrarse en lo más electrizante de la época de Ozzy y Black Sabbath, el periodo desde 1970 hasta 1975. Junto con el resto de la banda, Geezer en el bajo y Brill Ward en la batería se han convertido en una de las más auténticas bandas tributo.
Por su lado, Live/Wire, de la que dicen es la más exacta réplica de la banda original AC/DC, incluye dos cantantes, uno para la época de Bon Scott (Gary) y el otro para la de Brian Jhonson (Pete). El resto de la banda, un magnético Angus (Simon) a la guitarra, Dan en la otra guitarra, Daz a la batería y Eddie al bajo.
Puntuales salieron a escena Sack Sabbath, ataviados con su pelucas y sus ropas para deleitarnos con un mágico repertorio. Desde Iron Man, N. I. B., a las que le siguieron Snowblind y Black Sabbath. Lo cierto es que se metieron al público en los bolsillos. Muchos eran los que cerraban sus ojos y se transportaban con la música de sus grandes.
Ozzy Oddbin era un continuo de guiños al público sin parar encima del escenario. Fairies wear boots, War Pigs y el implacable que no falla, Paranoid. Su punto final, el temazo Symphony of the universe.
La noche siguió con la gran entrada en escena de Live/Wire, caracterizados y sonriendo a todos los amantes de AC/DC que habíamos allí. La primera parte del concierto fue dedicada a Bon Scott. Los temas Shoot down in flames, Hell isn’t a bad place to be, Dirty deeds no, Sin city y el Whole lotta Rosie nos dejaron bastante satisfechos. Muy buen comienzo.
Y ya la segunda parte, para una enamorada de Brian Johnson como yo, fue impresionante. Era un placer escuchar a Pete y ver a Simon regalándose a los asistentes, aporreando su guitarra y saltando a lo Angus.
Rock or bust fue la primera de esta segunda parte. A Shoot to Trhill le siguió la oscura Hell bells. Back in black nos hizo bailar a todos y You Shoot me all Nigth long dio paso al coreado Thunderstruck. De repente, con Highway to Hell vemos a los dos vocalistas en el escenario. Curioso ver a los dos juntos y escuchar los dos timbres de voz en la misma canción. Acabaron con broche de oro, elLet there be rock y For those about to rock (we salute you).
Una noche de himnos. Una noche para recordar a los grandes Black Sabbath y AC/DC. Una noche para admirar estas dos bandas tributo y su trabajo. Una noche para amar la música un poquito más.
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