A pocos días para que concluya, ahora toca hacer un repaso a los mejores discos del 2012. Una revisión que finalizará con la pertinente lista, pero aprovechando las diversas críticas que a lo largo de los últimos meses han ido saliendo, no estará de más detenerse un poco en cada uno de los discos que van a estar incluidos en la misma, y, quizás para no dar pistas de como va a quedar el cuadro final, se va a proceder a realizarlo de forma aleatoria.
Y para empezar, nada mejor que detenerse en uno de los auténticos discazos en mayúsculas que nos ha obsequiado este 2012. Un disco absolutamente imprescindible del que hace algo más de un mes @Edgar_Corleone diseccionaba en Metall4All:
Imposible ser imparcial al criticar a tu vocalista favorito. Pido disculpas por un posible ensalzamiento en mi propia emoción, aunque desde mi punto menos subjetivo, estoy convencido de que este disco es bueno. Muy bueno.
Si había algún temor hacia este lanzamiento, ese iba dirigido hacia la labor de Erik Mårtensson. Discazo de Eclipse (crítica), discazo de Toby Hitchcock (crítica), discazo de W.E.T. (crítica), pero como se comenta a menudo, el estilo Mårtensson se graba a fuego en cada trabajo. Sencillamente, no queríamos un disco de Jimi Jamison cargado de riffes pesadísimos y rasgueos afilados. De Jimi queremos el mejor AOR, como el de su anterior álbum en solitario (crítica), aunque muchos, abrimos las orejas a ciertas evoluciones. Así, Erik ha disipado la niebla, y nos ha regalado… otro discazo.
Una mezcla de la marca Mårtensson y el AOR de los 80, no es difícil de imaginar a priori. Lo complicado era esperar un resultado tan satisfactorio. Hay riffes pesados desde “Everybody’s Got A Broken Heart” a “Walk On (Wildest Dreams)”, pasando por la afilada “Street Survivor” y, sobre todo, “Bullet In The Gun”. Riffes de hard rock, de guitarras de crujiente distorsión, de metal ochentero de producción actual, pero equilibradas. Los teclados cobran muchísimo protagonismo, y estos, por supuesto, son marca Peterik. Los sonidos del piano que inundan el disco son constantemente sublimes, desde la introducción al disco, a las suavísimas y delicadas baladas, destacando por encima de “The Air That I Breathe”, que cumple con todos los estándares y llega a emocionar, a “Heaven Call Your Name”, que despierta pasiones, típica joya que no se olvida.
Claro, que todo el trabajo compositivo de Mårtensson se quedaría a medias sin algunas de las interpretaciones más sentidas que le he escuchado a Jamison. La leyenda se entrega en cuerpo y alma al micrófono: introduce voces rasgadas, susurros, y tonos altos de pura garganta, llegando a cotas de antaño en “Heaven Call Your Name” y “Street Survivor” a sus 61 años. Rompe la voz en estribillos y estrofas, y juega con vibratos a su antojo. El estribillo de “The Great Unknown”, o el puente de “Never Too Late” son toda una clase de interpretación melódica, y el feeling que desprende en cada línea, es comparable al de grandes como Turner, Edman o Jidhed. Un trabajo vocal excepcional que toca el cielo en “I Can’t Turn Back”, mi favorita, “Bullet In The Gun” y “Heaven Call Your Name”. Un tipo que canta con el pecho abierto.
No es excesivo, a pesar de su gran producción. Es intimista, gracias al carisma vocal de Jamison y a unas composiciones de alma ochentera y estribillos motivadores. Son canciones positivas, amorosas y nostálgicas, interpretadas de corazón, con una sinceridad que abruma. Un recorrido de once cortes, con algún leve altibajo de intensidad que apenas se nota, como en mi caso lo fue “Not Tonight”, algo que percibo muy personal. En conjunto, estamos ante una joya. Un trabajo impecable, resultado del talento nato. Dudo que este año aparezca un lanzamiento melódico tan directo, tan bello y tan bueno.
Edgar Carrasquilla @Edgar_Corleone para Metall4All
Megusta J.J!
A+
Pedazo de disco, si señor. Me pone muchísimo «Street Survivor».
Abrazos
Sin duda un gran disco al que habrá que echarle más escuchas.
El mejor álbum Aor del año I CAN’T TURN BACK videoclip ya!!!! Lo mejor en años pedazo de canción