La evolución de los griegos Rotting Christ es cuanto menos curiosa pues pasó de ser abanderado del death- black metal desde la década de los noventa del siglo pasado a un cambio radical en el 2013 hacia el doom en el maravilloso “Kata ton daimona eatoy” continuando su nueva andadura con el “Rituals” y finalizando con, su hasta ahora, último disco “The heretics” del 2019 donde se acercaban más al gótico (aunque sin dejar de ser ellos mismos).
Siguiendo la evolución de este trabajo de la banda matriz, su guitarra y vocalista Sakis Tolis nos presenta este álbum, compuesto e interpretado en solitario, con creaciones pensadas durante la pandemia. Lp corto que no llega a cuarenta minutos y que, a la perfección, podría haber sido un nuevo “plástico” de Rotting Christ, pues no olvidemos que la formación es Sakis y su hermano Themis, con George Emmanuel y Vaggelis Karzis desde el cambio del black al doom.
Y este “Among the fires of hell” a pesar de esa línea de continuidad nos deja algunas sorpresas como la inicial “My salvation” que comienza con un riff “marca de la casa” y esos coros demoniacos tan propios de Rotting Christ para cambiar en el puente y con estribillo que nos traslada al gótico de los noventa, con un punteo en la onda de los de Billy Duffy en «The cult». Un tema oscuro pero melódico que funciona a la perfección.
La canción homónima “Among the fires of hell” mantiene las constantes del último “The heretics” aunque notamos un toque en la voz a lo Fernando Ribeiro, algo normal pues recordemos que con este disco tuvieron una importante gira con los portugueses Moonspell. En estos dos primeros cortes encontramos un Sakis Tolis más accesible dentro de los parámetros del metal extremo (corríjame mi compañero, y sin embargo amigo, David Galeote, auténtico especialista en estos brutales sonidos).
“The dawn of the new age” mantiene la misma tesitura que la anterior “Among the fires of hell” destacando con su machacón riff de guitarra que se entremezcla con las partes más melódicas. Menos pesado que el “doom” y jugando con el gótico, sobre todo en la parte del puente cuando la voz cavernosa de Sakis Tolis nos canta “Ashes to ashes, dust to dust”.
“We the fallen angels” es puro Rotting Christ, con un inicio demoledor a guitarra que nos trae a la mente mucho de lo bueno de multitud de temas del “Kata ton daimona eatoy” aunque pasado por el tamiz más melódico del “The heretics”. En este momento, ya con la mitad del disco escuchado, nos damos cuenta que sin ofrecer nada nuevo tampoco hay material de derribo ni ninguna canción que sobre. Además nos gusta como están integrados los coros y los recitativos en el tema.
“Ad Astra” es otra oscura composición, con un arranque espectacular de más de un minuto de riff guitarrero para entrar la voz de un Sakis Tolis que no necesita gritar ni hacer guturales para mostrarnos su agresividad al encarar la melodía. Otro de los destacados en el Lp, gracias en buena parte a esa estructura circular finalizando con el genial punteo riff, acompañado de otro recitativo.
“Live with passion (die with honour)” mantiene la constante del álbum aunque varias voces masculinas juegan a ser coro antes de que Sakis Tolis acometa la melodía, sumergido en cierta oscuridad y en una estructura repetida con las seis cuerdas, con cambios de ritmo bajando en el recitativo antes del punteo, quizás lo más alejado del “doom” en el corte más parecido a este estilo del metal extremo (con la salvedad de la final de la última “The silence”, de la que hablaremos unas líneas más abajo)
“I name you under our cult” tiene la novedad de una voz más agresiva y cavernosa en el estribillo donde se invoca a Apolo, dejando la “traca final” con “The silence”, una invocación en medio tiempo a Satán, con coro, recitativos y la pesadez de la guitarra propia del “doom”, una suerte que domina a la perfección y que sirve de colofón a un disco que gustará a los seguidores de Rotting Christ en esta etapa que comenzó en el 2013 y que les ha convertido, por méritos propios, en uno de los nombres mayúsculos dentro de esta corriente del metal extremo. Un álbum sin apenas promoción que Sakis Tolis no ha puesto a la venta y que he descubierto gracias a Gema DB (al que agradezco habérmelo descubierto) que ha tenido a bien mostrarlo en su Facebook. Es cierto que estas redes sociales (más bien “cadenas de masas” en palabras del filósofo José Sánchez Tortosa), de vez en cuando, sirven para algo más que la “vanitas vanitatis”.
Joder como molan los Rotting!! pues a mi este disco me está recordando a lo que para mi fue la epoca gotica de estos tipos, con los discos a dead poem y sleep of the angels.