Lindisfarne es el nombre de una pequeña isla, más conocida como Holy Island. Situada a unas millas de la costa escocesa, sirvió de nombre para una banda a la que le tengo un especial cariño. Lindisfarne eran originarios de Newcastle, en el noroeste de Inglaterra. Su cabeza pensante era Alan Hull, un músico muy influenciado por la época folk de Dylan y los sonidos tradicionales de su tierra. Ademas Hull fue todo un personaje, empezó a trabajar de enfermero en un hospital psiquiátrico donde en aquellos tiempos aun se administraba LSD a los pacientes. Hull también estuvo tomando LSD durante toda su estancia en el hospital, estando siempre en un estado de mas allá. Pero aquello no afecto a su pasión de componer y historias sobre las gentes y los pueblos de su región, Tyneside.
En 1969 se hace acompañar por los Brethren, un grupo local con influencias psicodelicas. Deciden unirse y tomar el nombre de aquella pequeña isla que vislumbraban desde la costa. La formación original se compuso de Alan Hull (voz, guitarra, piano), Ray Jackson (voz, mandolina , armónica ), Simon Cowe (guitarra, mandolina, banjo), Rod Clements (bajo guitarra, violín) y Ray Laidlaw (batería). Juntos grabaron un primer disco que paso prácticamente desapercibido, pero que reclutó una buena legión de seguidores en sus conciertos por tabernas y más adelante festivales. Fue con su segundo álbum; “Fog On The Tyne” , que alcanzaron fama internacional. Aquel disco desde su portada tiene algo de maravillosamente alegre y al mismo tiempo mucha añoranza en él.
Como le pasa a mucha música folk de tintes celtas, es una música que une la gente y recuerdas tiempos pasados. Este álbum alcanzó el puesto numero uno en las listas del Reino Unido y el sencillo «Meet me on the Corner» fue un tema radiado constantemente aquel año, sirvió para re -lanzar su primer single ; «Lady Eleanor» . El disco fue lanzado por el mítico sello el Charisma Records, pero el grupo nunca más pudo igualar la calidad de este disco, por lo que sucedió lo que pasa en muchas bandas… xambios de formación y poca inspiración a la hora de componer. Pero Lindisfarne siempre estuvo muy presente en el corazón de los habitantes de la pérfida Albion, por lo que año tras año se reúnen para ofrecer un concierto de navidad en Newcastle.
Allan Hunt murió súbitamente de un infarto en 1999, pero su espíritu siguió en la banda. Volviendo a grabar aquel mítico disco bajo el titulo de “Fog On The Tyne”(Revisited), con la curiosidad de que el jugador de fútbol Paul Gascoigne se encargó de algunos voces, alcanzando el número dos en la lista de singles del Reino Unido.
Un disco con melodías inolvidables, un clásico brillante, diverso, que va desde folk-acústico a ritmos mas joviales y juerguistas, pero otorgando siempre un ambiente muy relajado. Composiciones con fuerza y armonía, con letras profundas e ingeniosas hacen de este disco una obra para cualquier persona que ame los clásicos del pop, rock y folk.
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