Luces y Sombras en el concierto del pasado viernes 12 de Enero en la sala Fanatic de Sevilla.

Empezamos fuerte este 2024 pudiendo asistir al concierto de Abbath en la capital hispalense, acompañados por la joven promesa del metal extremo Hellripper y unos portentosos Toxic Holocaust, que han sabido mezclar su pasión por el Thrash Metal con los oscuros toques del Black Metal, y que cumplen este año 25 años de su carrera musical. Y en esta ocasión Sevilla tuvo la suerte de que le cayó que fuera viernes el dia que visitaban las 3 bandas la ciudad, ya que normalmente esas fechas suelen estar más reservadas para las ciudades que suelen ser más visitadas en estas giras internacionales, propiciando que muchos andaluces se pudieran trasladar desde las provincias cercanas, encontrándome gente que venía desde Huelva, Málaga incluyendo el grupo con el que yo me desplace desde Cádiz.

Llegando apurados de tiempo cuando las puertas ya deberían estar abiertas, comprobamos que todavía la gente esperaba pacientemente formado una ordenada cola ante las cerradas puertas de la sala Fanatic, ubicada en pleno polígono industrial de Sevilla, y muchos otros se encontraban en sus coches apurando las bebidas que se habían traído en sus propios coches, ya que por los alrededores no hay un bar donde pasar el rato, y toca hacer una breve botellona mientras haces tiempo para acceder a la sala.

Esperaba con ansia esta gira, ya que la ultima vez que vi a Abbath en directo fue hace cuatro años en la antigua But de Madrid y aquí os dejo la crónica por si queréis repasarla y compararla con esta, ya que si de aquella jornada sali muy contento, en esta ocasión la cosa me ha dejado algo mas frio.

Una vez abiertas las puertas, la gente fue entrando rápidamente al recinto, ya que había muchas ganas de ver a Hellripper en directo tras su soberbio “Warlocks Grim & Withered Hags” de este pasado 2023, que no han llegado a entrar en mi lista de los mejores discos del año por no haberlo escuchado antes de redactar dicha lista (ya sabemos qué salen tantos discos que no hay tiempo humano para poder escucharlos todos). La organización o la propia banda dieron un margen de unos 15 minutos para que entraran todos los que estaban fuera, y cumplido ese tiempo fue el momento de ver a James McBain defender su proyecto en directo acompañado por Clack Core al bajo, Joseph Quilan a la guitarra y Max Southall a la batería, siendo los músicos oficiales que le están acompañando en sus directos desde hace unos años.

Hellripper es uno de los proyectos en solitario del músico escoces James McBain, combinando el Speed Metal con el Black Metal, trasladando la opresiva atmósfera de sus canciones a las agrestes tierras de Escocia y su rico folklore. En sus 10 años de carrera ha sacado 2 EPs y 3 Lps, y estuvo a punto de venir a España en Noviembre del 2020 acompañando a Midnight, pero como le pasó a otras tantas bandas, no se pudo realizar dicha gira por culpa de la pandemia. Y ahora por fin visitaba nuestro país abriendo la tarde en una abarrotada sala Fanatic.

Hellripper estuvieron soberbios de principio a fin, comenzando su espectáculo con la rockera “Vampire’s Grave”, que nos traía a la memoria el sonido característico de Motorhead, pero con el toque personal de McBain, seguida inmediatamente por “Hell’s Rock’N’Roll” produciéndose el primer pogo de la noche, con la atenta mirada de la banda, que animaba desde el escenario para que girara constantemente mientras iban descargando su música, contentos de disfrutar de un fantástico sonido, por lo menos es lo que yo apreciaba desde la zona en la que me encontraba.

Con una breve introducción en cada tema por parte de McBain, le llegó el turno a “Nekroslut” al que siguio “Demdike (In League With The Devil)” sonando entonces el primer tema de su reciente Lp “Warlocks Grim & Withered Hags” siendo la canción elegida “Goat Vomit Nightmare” volviendo a discos anteriores con “The Affair Of The Poisons” y “Bastard Of Hades” para volver al presente con “The Nuckelavee”.

Afrontando la recta final de su concierto, Hellripper continuó repasando su discografía interpretando “From Hell” dejando para el final “All Hail The Goat” y “Headless Angels” despidiéndose de los presentes y agradeciendo el entusiasmo del público que no paró de bailar y aplaudir cada tema durante los 45 minutos de actuación de la banda, que la dedicó a darnos una muestra de sus 3 Lps y un par de temas de sus primeros Spilts.

Por ahora todo iba marchando bien pero a partir de aquí la cosa empezó a complicarse, empezando que para el cambio de cables y material de batería en los que estuvieron implicados los propios Hellripper y Toxic Holocaust tardaron unos 20 minutos. Y cuando ya todo estaba en condiciones para los americanos, comenzó a sonar la intro y la saturación de humo y luces que les gusta algunas bandas para sus directos pero que dificulta el tener imágenes claras de su concierto, de ahí las fotos que acompañan esta crónica.

Los de Oregon arrancaron de manera enérgica con “Bitch” seguido de “Gravelord” con Joel Grind a la voz cantante compaginándolo con el bajo, teniendo a su lado al guitarrista Rob Gray y machacando la batería a Tyler Becker. A continuación la banda interpretó el tema “Silence” enlazando con “Acid Fuzz” para a continuación presentar “Wild Dogs”, sonando para mi bien aunque escuche después que alguno se quejaba de una excesiva presencia del sonido de la batería. De todas formas la gente lo iba disfrutando y se iban creando constantes pogos frente al escenario con cada uno de los temas.

Continuó el concierto, pero no se les veía muy contentos a la banda a la hora de sonar, ya que hacían diversas indicaciones hacia la mesa pero seguían cayendo los temas, algunos presentados por Joel y otros no, por lo que ya me fue complicado seguir el orden de las canciones, aunque sí pude distinguir “Death Brings Death”, “I Am Disease” y “Nuke The Cross”, pero esta crónica de su concierto va a ser igual de breve que su actuación. Cuando llevaban cumplidos 30 minutos de estar tocando, se despidieron del público presente y recogieron trastos. No puedo decir si tocaron todo el repertorio que tenían preparado, si se fueron cabreados por el sonido que no les gustaba o lo que fuera, ya que aunque le pedí el set list al batería que lo tenía bastante cerca, Tyler paso de mi y se lo guardó en el bolsillo antes de empezar a recoger la batería. Leo en otras críticas que pasó lo mismo en Murcia o Barcelona y creo que debieron de traer un repertorio muy corto.

Otro parón de 25 minutos mientras se recogía la batería sobrante en la que habían tocado los dos primeros grupos y se preparaba la que estaba en el centro del escenario lista para la banda principal, con prueba de sonido para cada uno de los tambores, aparte de ver cómo probaban las guitarras y el bajo, que entonces no entiendo para que se hizo la anterior prueba de sonido que se suele hacer antes de que entre el público. Aunque puntuales a la hora fijada para el comienzo del show, Abbath salió del autobús aparcado en el lateral de la sala y se subió al escenario acompañado de Ole André Farstad a la guitarra, Ukri Suvilehto a la batería y Rusty Cornell con el bajo.

Ataviado con su indumentaria característica y las pinturas de guerra propias de su amplio legado en Immortal, comenzaron con “Hecate” al que siguió “Acid Haze” y “Dream Cull”, con una banda muy comunicativa con el público, algunas palabras de Abbath entre tema y tema, y saludando al público más próximo, por lo que todo iba al ritmo que quería la banda y el público lo pasaba muy bien.

Y llegó el primer tema de Immortal, que mucha gente esperaba con ganas, siendo “The Rise Of Darkness” el tema elegido para hacernos disfrutar de ese sonido característico de la banda que mucha gente recordamos con nostalgia. De seguido volvimos a los temas en solitario sonando “Ashes Of The Damned” y “Dread Reaver”, que precedieron a un fijo en su setlist, el archiconocido “In My Kingdom Cold” de Immortal, seguido de otros clásicos como son “Beyond The North Waves” y “Nebular Ravens Winter”.

Pero ahí no quedaban las sorpresas y repescas de otras formaciones, ya que lo que siguió fue disfrutar en directo del tema “Warriors” perteneciente al proyecto I de tan efímera existencia, volviendo entonces al presente con “The Artifex”, para dejarnos después con otro nostálgico tema como es “One By One” de su época en Immortal.

Y entonces llegó el momento de cerrar el concierto con “Winterbane”, abandonando el escenario tras una muy breve despedida y reparto de púas sonando de fondo el tema “Anvil Of Doom” de Basil Poledouris, quedándonos expectantes por si volvían para tocar algún tema más después de sólo 65 minutos de actuación, viendo que ningún técnico subía al escenario para empezar a recoger cosas, como pasa del tirón en la mayoría de conciertos, y según el set list que si pude observar en las hojas que suelen usar las bandas como referencia, se dejaban en el tintero el tema “Endless”.

Pero tras unos 10 minutos de duda, todo se aclaró cuando se encendieron las luces de la sala y aparecieron en escena los técnicos empezando a desmontar las cosas, por lo que ya nos tocó salir de la Fanatic con ese regusto amargo de haber disfrutado de 3 buenas bandas en directo, pero que por uno u otro motivo, se habían quedado a medias en sus actuaciones.

Disfrutamos muchísimo con el directo de Hellripper, pero parece ser que él se lo pasó mucho mejor en Murcia, donde llegó a tirarse sobre el público asistente para hacer crowdsurfing. Toxic Holocaust puede que tocaran todo el repertorio preparado, pero 30 minutos nos parece demasiado poco tiempo para una banda que tiene 25 años de carrera y una amplia discografía, aunque sus temas duren menos de 5 minutos. Y Abbath estuvo genial, muy sociable con la gente, sonando bien y recuperando unos cuantos clásicos, pero 65 minutos me parece muy poco tiempo de actuación para el cabeza de cartel. 

Un evento donde participan 3 bandas no se puede solventar en 3 horas justas de concierto incluyendo los 45 minutos de los 2 cambios de cables y reglajes entre las bandas.

A pesar de estas quejas personales, no puedo cerrar sin agradecer a Madness las facilidades dadas a la hora de cubrir el evento, el que hicieran el esfuerzo de traerlo a Sevilla, donde la gente respondió abarrotando la Fanatic, y espero poder volver a disfrutar de más eventos organizados por ellos por tierras andaluzas o alguna escapada a otras ciudades, que nunca se sabe.

Muchas gracias por leerme hasta aquí y ya me cuentas tu punto de vista sobre lo dicho en estas líneas.

by: David Galeote

by: David Galeote

Especie protegida que responde al olor del lúpulo fermentado, navega entre la música clásica y el metal extremo, para amargura de sus sufridos vecinos.

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