Venga, vamos a hablar de uno de los animes más estimulantes que he visto: Perfect Blue. He de reconocer que si hay un producto musical que me repugna es el de los grupos de laboratorio destinados a ser consumidos por los más jóvenes. Concretamente me repelen esos grupos japoneses femeninos de pop facilón y repetitivo conocido como J-Pop e ideados descaradamente en los despachos de una discográfica para el consumo masivo de adolescentes (y también algunos adultos que quizás no han madurado demasiado). Es todo tan naif y tan perfecto que me resulta vacío e infantil. Supongo que será una de esas tradiciones que fuera de su lugar de origen no se entienden del todo (como los toros o lanzar a una cabra desde un campanario).

 El director japonés Satoshi Kon (Paprika, Tokyo Godfathers) debutó con Perfect blue adaptando la novela homónima de Yoshikazu Takeuchi. Inicialmente la adaptación se iba a rodar con actores pero un inesperado recorte en el presupuesto obligó a replantearse el proyecto como una película de animación. Así surgió Perfect blue.

 Satoshi Kon nos describe la pesadilla de Mima Kirigoe, una estrella adolescente que abandona su exitoso grupo musical de J-Pop para iniciar una carrera como actriz. Al salir de su zona de confort, Mima debe aprender a aceptarse y madurar, dejando de ser una niña para aceptar que se está convirtiendo en una persona adulta. Sin embargo, pronto empezará a arrepentirse de su decisión; las cosas no salen como ella esperaba. Por otro lado, muchos seguidores le reprochan que haya madurado y haya acabado aceptando papeles mucho más adultos. El abandono de su imagen de ídolo juvenil y su participación en escenas y sesiones fotográficas de contenido erótico enfurecerá a muchos seguidores. Mima empieza a recibir la amenazas de muerte a la vez que personas responsables de los cambios en su carrera son asesinadas. Por si fuera poco, Mima tiene episodios esquizofrénicos en los que recibe la visita de su antiguo personaje dentro del grupo musical. Es como si la antigua Mima se resistiera a ser eliminada o algo dentro de la mente de Mima no acepta el avance de su carrera ni el inevitable paso a la edad adulta.

El espectador se siente partícipe de la confusión mental de Mima ya que pronto dejamos de estar seguros de si lo que vemos es real o sólo está en la mente de la protagonista. Para más inri, la serie en la que Mima interpreta inicialmente un pequeño papel empieza a tener peligrosas similitudes con su historia, lo cual dificulta más al espectador la tarea (casi imposible) de adivinar si lo que está viendo es real. A pesar del aspecto visual del film (parece un anime más de esos que hay cientos) los temas tratados son de una trascendencia poco habitual en el anime. No estamos ante un film de acción ni la violencia o el sexo mostrados son gratuitos. Estamos ante un film que traza un perturbador retrato psicológico de una joven con graves problemas mentales. Perfect blue se podría definir como un thriller psicológico pero la confusión mental de la protagonista nos transporta a un estado de constante ansiedad del todo inusual en el cine de animación.

 Mima parece vivir de cara a la galería y le afecta demasiado lo que opinan los fans, hasta tal extremo de llevarla a perder la noción de realidad. Y eso que en 1998 todavía no existían las redes sociales ni el Instagram. El hecho de que un fan algo trastornado usurpe su personalidad en una página web la empuja a un desdoblamiento de personalidad que nos ofrece los mejores momentos del film. La presión del público es tal que su rechazo es toda una tragedia (no olvidemos que estamos ante un film japonés), incluso parece que los fans tienen derecho a no aceptar el nuevo rumbo de sus artistas favoritos. A mí me vinieron a la mente casos recientes de estrellas para adolescentes que han dado un giro radical a sus carreras una vez que alcanzan una determinada edad. ¿Puede que el público adolescente ejerza un brutal tiranía sobre sus ídolos o está todo perfectamente estudiado?  En el film, Mima toma unas arriesgadas decisiones siempre asesorada por sus representantes, quienes sólo parecen buscar un rápido beneficio económico, mientras la participación de su familia se ve limitada a una llamada telefónica. Mima está sola ante la presión del público, el miedo al fracaso y el temor a madurar. Como podéis ver, la complejidad psicológica de los films de Satoshi Kon no es baladí. Lamentablemente, Satoshi Kon murió en 2010 con solamente 46 años. Una gran pérdida para el anime, que perdió  a uno de sus creadores más interesantes a pesar de su corta carrera.

Como curiosidad cabe destacar que Darren Aronofsky compró los derechos para adaptar el film pero realmente nunca lo hizo, sólo usó la escena del baño para Réquiem por un sueño. Posteriormente tomó prestada la premisa principal para elaborar Black swan. Las similitudes entre ambas son evidentes ya desde el parecido entre los nombres de las protagonistas ambos films (Mima y Nina). En ambas películas las jóvenes protagonistas son esquizofrénicas que confunden ficción y realidad. Nina pierde la cordura debido a la presión que sobre ella ejerce ser elegida como primera bailarina, Mima pierde su cordura al dejar su grupo y ver que no consigue el éxito esperado en su nueva carrera como actriz. Son matices que las diferencian, además Nina no tiene la presión de las fans, elemento que sí es fundamental en la evolución mental de Mima.

En ambos casos creo que está muy bien conseguida esa imposibilidad de distinguir la realidad de la ficción. El estilo de Aronofsky es mucho más oscuro, quizás el film de Kon pierda algún entero al están realizado con un estilo visual casi naif. En mi opinión, Black swan tiene personalidad suficiente como para no ser considerada un remake de Perfect blue, pero es innegable la influencia recibida del film japonés. Sin Perfect blue no hubiera existido Black swan.

Muy recomendable para aquellos que busquen un buen anime. Y ahora está en Netflix.

Perfect Blue (1998)

by: Luis Cifer

by: Luis Cifer

Luis Cifer, nació en la ciudad del cierzo. Se dice que siempre viste negro, que Luis no es su nombre real y que duerme en la calle. Otros dicen que tiene un trabajo, que no bebe alcohol e incluso que es padre de familia, pero no hay nada confirmado. También se le puede encontrar en su blog de cine.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Últimas entradas

Últimos comentarios

Te puede interesar

La franquicia

La franquicia

No es sencillo conseguir una sátira que tenga sentido del humor pues lo habitual es que las intenciones queden en un estrato superior que el resultado. En los últimos años uno de los que lo han conseguido fue Armando Ianucci con "La muerte de Stalin" que con un...

Here (aquí)

Here (aquí)

Robert Zemeckis es un director infravalorado, considerado como discípulo de Spielberg ha unido siempre en sus películas los buenos sentimientos (algo naif para algunos) con los efectos especiales, filmando arriesgadas obras como la trilogía de “Regreso al futuro”,...

Todas las criaturas grandes y pequeñas (Temporada 5)

Todas las criaturas grandes y pequeñas (Temporada 5)

A su quinta temporada llega “Todas las criaturas grandes y pequeñas”, serie británica, estrella en el Channel 6 que sigue la estela creada por “Los Durrell”, marcada por los buenos sentimientos y el tono amable. De nuevo, vuelve a lograr un tono notable, tras una...

La virgen roja

La virgen roja

La apasionante historia real de Hildegart Rodríguez Carballeira y su madre, Aurora, ya tuvo una adaptación hace décadas de la mano del gran Fernando Fernán-Gomez e incluso algún documental. A pesar de conocer la vida y obra de Hildegart, debo admitir que esta película...

El señor de los anillos: La guerra de los Rohirrin

El señor de los anillos: La guerra de los Rohirrin

Desde la monumental “El señor de los anillos” de Peter Jackson, las aproximaciones posteriores no llegaron, ni de cerca, al grado de excelencia del universo de Tolkien pues “El Hobbit” era alargado hasta la extenuación, ya que con una novela no demasiado larga...