El pasado jueves 23 de Enero acudimos a la sala Caracol de Madrid para asistir al concierto de la banda germana Equilibrium, acompañados por sus paisanos Nailed To Obscurity y Lord Of The Lost, que llegaban a España gracias a la promotora Resurrection Fest en una gira expres actuando en la Capital y en la Ciudad Condal.
Debido a que eran tres las bandas participantes, el horario de apertura se fijó a las 18:30 horas, y en la cola que esperaba ansiosa para entrar abundaba el público joven que fue ocupando las primeras filas frente al alto escenario de la sala, en esta ocasión con las cortinas retiradas a un lateral, para disfrute de todos los presentes mientras se iban dando los últimos toques para el comienzo de los conciertos.
Los primeros en aparecer fueron Nailed To Obscurity, quinteto proveniente de la ciudad de Esens, en la Baja Sajonia o como pone el propio grupo en biografía de Frisia Oriental, en Alemania. Activos desde el 2005, la banda está formada la banda por el cantante Raimund Ennenga, los guitarristas Volker Dieken y Jan-Ole Lamberti, el bajista Carsten Schorn y el baterista Jann Hillrichs. Actualmente se encuentran presentando el que es su cuarto trabajo “Black Frost” que editaron a principios del año pasado. Saliendo unos minutos antes de la hora anunciada, salieron a darlo todo desde el comienzo frente a un público que iba llegando a cuenta gotas y que en los primeros acordes del tema “Black Frost” superaba por poco las 50 personas. Combinando el Death Metal con el Doom Melodico, la banda tuvo un sonido apropiado donde destacaba la contundencia de Jann Hillrichs en la batería, al que creo que le sobraban los micrófonos, ya que se oía perfectamente sin ellos, demostrando un buen nivel que plasma en algunos videos que tiene colgados. Con algunas palabras en castellano, la banda continúo su descarga con el tema “King Delusion” perteneciente a su anterior disco homónimo del 2017, pero volviendo a su reciente trabajo con “Feardom”, para retroceder de nuevo con “iNnerMe”, tema con el que comenzaba su disco “Opaque” del 2013, que recomiendo escuchar para entender lo que hablo sobre el batería. Afrontando ya la recta final de su actuación volvieron al presente con el tema “Tears Of The Eyeless”, terminando con “Desolate Ruin”, con el simpático detalle de que el cantante Ennenga se despidió del público en la parte acústica del tema abandonando el escenario mientras el resto del grupo continuaba tocando, para volver en la parte final, como a veces pasa con los grupos progresivos con largas partes instrumentales. Buena actuación de la banda que calentó algo al público presente mostrando su buen nivel y su sonrisa durante los 40 minutos con los que contaron.
Los siguientes en tocar fueron los alemanes Lord Of The Lost, grupo de rock y metal gótico, procedentes de Hamburgo, concretamente del barrio de St. Pauli, que se formó en el 2007 como un proyecto en solitario de su cantante Chris Harms, y que actualmente está acompañado por el guitarrista π, el bajista Class Grenayde, Gared Dirge con el teclado ayudando también con la percusión y la guitarra y el batería Niklas Kahl, contando con 6 discos de estudio, 4 Eps y 14 sencillos. Con un uso continuo de contraluces como bien se puede apreciar en la foto adyacente, comenzaron su actuación con una versión corta del tema “Lament For The Condemned”, que fue recibida con gran alegría por la gente que me rodeaba, seguida del tema “Morgana” coreada por el público presente, que ya llenaba el recinto. Se notaba que aparte de la actuación de Equilibrium, una gran mayoría del público había acudido para disfrutar de esta gente en directo, que continuaron con su espectáculo con el tema “Drag Me To Hell” seguido de “Under The Sun” y de “Loreley”, todas ellas coreadas por cuantos me rodeaban. La banda siguió con su triunfal concierto tocando los temas “Full Metal Whore”, “Ruins” y “Fists Up In The Air”, que hacían bailar a todo el mundo con estos ritmos muy discotequeros. Ya en la recta final de su recital le llegó el turno al tema “Die Tomorrow” dejando para el final uno de sus temas estrellas, “La Bomba”, y cerrando su espectáculo con el tema “Trisma”. Tengo que admitir que no soy muy fan del rock gótico, pero esta gente consiguió que diera algún saltito y consiguió calentar a todo el público con una magnífica actuación dejándolo todo listo para el siguiente grupo de la noche.
Los alemanes Equilibrium no se hicieron de rogar, y cuando todo estaba ya listo, aunque faltaban todavía 25 para la hora anunciada como inicio de su concierto, salieron al escenario para regocijo de todos. El quinteto de Metal Épico está liderado por su enorme cantante Robert “Robse” Dahn, acompañado por los guitarristas René Berthiaume y Dom R. Crey, el baterista Tuval “Hati” Refaeli y el bajista Marcus “Makki” Solvalt, llevando los teclados pregrabados, y actualmente se encuentran presentando el que es su sexto disco de estudio, “Renegades”, que lanzaron al mercado en el verano del año pasado. Arrancaron enérgicamente su concierto imitando el inicio de su disco más reciente interpretando los temas “Renegades, A Lost Generation”, “Tornado” y “Himmel & Feuer”. Con un espectáculo de luces que acompañaba a cada tema que descargaban, los alemanes hacían saltar a los presentes en todo momento, siguiendo su descarga con la animada “Waldschrein” con Wall Of Death incluido, seguida de la épica “Freiglug” y de “Apokalypse”. Ya por fin ubicado en una zona más tranquila lejos de los apretones de las primeras filas, me dispuse a seguir disfrutando del concierto, que siguió con los temas “Path Of Destiny”, “Born To Be Epic”, “Prey”, “Heimat” y “Der Ewige Sieg”. Ya se veía que estaban en la recta final de su actuación, pero el ritmo no bajaba y los únicos descansos eran aprovechados por Robert Dahn para dedicar unas palabras al público. Los últimos temas de la noche fueron “Final Tear”, “Blut Im Auge”, “Ruf In Den Wind” y “Rise Of The Phoenix” con el que se cerró una noche de metal en la mítica Caracol. Equilibrium hace disfrutar a sus muchísimos seguidores con cada actuación en directo, con cada pogo y Wall Of Death que solicitan haciendo una fiesta de cada concierto que dan y posiblemente le veamos en alguno de los numerosos festivales que tenemos cuando terminen con su gira del nuevo disco.
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