La felicidad es enamorarte de las pequeñas cosas. Entre tantos sucesos que nos sacuden en la vida debemos volver a recordar ese cartón, ese barro, esa arena, esos ojos, esa mejilla , esos palos, esa tonada… esas cosas sencillas y de infancia , eso es llamar a la Felicidad.
La banda THOSE PRETTY WORDS formada por esos dos estilistas de la melodía como son Luther Russell y Jody Stephens han convertido un simple disco ZED FOR LULU , en un arte para enamorarte de la vida . Un disco plagado
de cosas sencillas que no son más que un conjunto de canciones alejadas de la grandilocuencia ni de las mayúsculas. Canciones llenas de gestos de afecto y belleza encerrada en un simple frasco sin adornos. Temas en apariencia insignificantes pero transformadores del espíritu.

Recordando y rememorando delicados sonidos de antaño sobre todo de ese espejo llamado Big Star ,al que Jody salvaguarda como de las armonías y guitarras nacidas del folk pop de finales de los 60 y primeros 70 se va construyendo ZED FOR ZULU . Esencias del sonido Ardent en Tonight Tonight Tonight, You and Me, o It’s About Love ; elogíos a la amistad en la maravilla de corte Byrds que es Ain’t Nobody But Me, y esos ecos America o America que se aprecian en las emocionales armonías de Time To Fly , The Carousel o A Day In The Park .
Canciones con apariencia diminuta pero que acaban asombrándote sobre cuando surge su grandeza en un simple la la la y un pianillo ragtime como en Undertown muy del regusto McCartiano o en los teclados de cajita de música que crea una pequeña sinfonía en Hurricane of Love.
Those Pretty Things y su Zed For Lulu o el arte de asombrarte por la magia de las cosas pequeñas y simples. Soy Féliz