ENEMY (2013)

El director canadiense Denis Villeneuve nos ofreció su arriesgada y muy libre adaptación de la novela El hombre duplicado de José Saramago. Enemy es una ardua reflexión sobre la identidad que puede gustar a los fans de David Lynch o Donnie Darko (también con Gyllenhaal). Enemy es una rareza, un film complejo y hermético en el que cuesta entrar pero que, una vez visto, deja huella en el espectador durante días.

Adam (Jake Gyllenhaal) es un profesor que lleva una vida repetitiva y sin alicientes. No creo que sea casualidad que el único tema que le vemos impartir en sus clases sea sobre la dictadura y sus formas de controlar a las masas. Mientras nuestro protagonista lleva una vida anónima, su doble, Anthony (interpretado obviamente también por Jake Gyllenhaal), opta por exponerse ante el público siendo actor, su trabajo le permite convertirse en otro y escapar de sí mismo. Son dos caras de la misma moneda, dos opuestos idénticos.

La identidad es el tema central de esta perturbadora y asfixiante película. Por cierto, la confusión reinante en el film aumenta debido a que no se nos explica el motivo de que estos dos personajes sean idénticos, es tarea de cada espectador crearse su propia teoría sobre lo visionado. ¿Puede deberse a una clonación?, ¿Es todo un sueño?, ¿Es el estado quien está clonado a la gente?, ¿Se debe a una invasión de arañas extraterrestres? Más abajo os expongo mi propia teoría sobre el significado del film. Desde luego, hay que admitir que a Villeneuve no le falta valor, sabe que su film va a ser incomprendido por la inmensa mayoría del público y que muchos lo tildarán de tomadura de pelo. Hay que aplaudir el valor de este cineasta a afrontar un proyecto tan arriesgado y minoritario. También sabe que Enemy será justamente considerada una obra de culto de aquí a no mucho tiempo.

Me inquietó la estética del film y el uso de los edificios de apartamentos como metáfora de la soledad y el anonimato reinantes en la sociedad actual. Tampoco creo que sea causal que las dos chicas del film sean rubias e incluso se parezcan físicamente, hecho que me recordó a Hitchcock y su afición por las rubias de gélido aspecto. También la aparición de Isabella Rossellini como madre de Adam en una reveladora escena me hizo pensar en Blue velvet de David Lynch. Quizás Villeneuve deje ver sus influencias a través de los personajes femeninos. Por cierto, me gustó mucho la actriz Sarah Gadon (Antiviral, Cosmópolis).

 El film tiene su mayor problema en un ritmo excesivamente lento y pausado. Villeneuve deja tiempo al espectador para que reflexione sobre lo visionado pero también para que se aburra si no consigue encontrar un nexo de unión entre las escenas. Unicamente en el último tercio la trama se acelera y empiezan a pasar cosas interesantes (y confusas) pero quizás sea demasiado tarde para la mayoría de los confundidos espectadores.

Aquí va mi teoría sobre Enemy:

El protagonista, Adam (cuyo nombre no es casual como nada en esta película, él es el original), es esquizofrénico. Tiene una doble personalidad. Me inclino a pensar que el solitario y aburrido profesor ansía llevar una vida más plena (con un trabajo apasionante y una pareja estable) y de esa fantasía crea una nueva personalidad totalmente independiente, Anthony. Ambas partes de su mente viven en  planos de consciencia paralelos pero la personalidad originaria (Adam) tiene bajo control a la de Anthony. De ahí que en sus clases Adam cite repetidamente la forma en la que las dictaduras controlan a los ciudadanos. Adam es un dictador que reprime su otra personalidad (Anthony). Pero, ¿por qué Adam creó y reprimió a Anthony?

La madre castradora

Pensemos que la madre (Isabella Rossellini) le expresa a Adam que quiere que abandone sus aspiraciones de ser actor. Pero Adam no tiene esas aspiraciones, las tiene Anthony. Anthony empezó siendo el nombre artístico de Adam, así aparece en los títulos de crédito y en internet. Como en Psicosis, la madre es el eje central de los problemas mentales de su hijo. Todo parece indicar que fue su madre la que desaprobaba ciertos aspectos de la personalidad originaria de Adam (le recrimina sus intenciones de ser actor). Todo ello nos lleva a pensar que Adam intentó ser actor y fracasó, llegando sólo a aparecer como extra en algunas películas. Adam  intenta olvidar su fracaso y elimina de su personalidad todo aquello que su madre no aprueba. Crea dos personalidades distintas totalmente diferenciadas con rasgos de su personalidad original. Adam se queda con los atributos que su madre aprueba y Anthony con los que su madre rechaza. También se podría interpretar que la verdadera dictadora es la madre y Adam una víctima de su represión.

El conflicto interno

El visionado de una película provoca el descubrimiento de la existencia de esa otra personalidad reprimida y olvidada. Pero Adam no se da cuenta mientras ve la película, sino mientras duerme, es como si su subconsciente hiciera saltar la alarme. A partir de ahí, el frágil equilibrio mental de Adam se va desmoronando. Es como si sus dos personalidades pugnaran por tener el control. De ahí el título del film, el enemigo está dentro del protagonista, él es su propio enemigo.

No olvidemos que Adam reconoce no ver nunca películas, así evita que afloren sus deseos de ser actor. Una prueba de que una vez Adam se dedicó a ser actor con el nombre artístico de Anthony nos la da el guardia de seguridad cuando llama Anthony a Adam y le dice que hace al menos 6 meses que no le veía. Otro hecho que refuerza esta teoría es que Anthony conteste a la llamada de teléfono de su mujer cuando Adam sale del plano, ambos son la misma persona. De hecho, es la mujer embarazada de Anthony (Sarah Gadon) la que empieza a sospechar que su marido tiene una doble personalidad tras su encuentro en la universidad con Adam.

Incluso es probable que las parejas de ambos protagonistas sean una sola mujer (como en Vértigo de Hitchcock o Carretera perdida de Lynch), una es real y otra es una proyección de cómo le gustaría a Adam que fuera su pareja. Puede incluso que ambas mujeres sean imaginarias, imposible de saberlo a ciencia cierta. La confusión reinante se hace cada vez más evidente y acaba por devorar la poca cordura del personaje. Al final del film, la confusión y perplejidad del espectador coinciden con las del protagonista. Villeneueve nos sumerge en el laberinto sin salida de una mente enferma.

La llave 

En la escena inicial Anthony asiste a un bizarro espectáculo en un club. No olvidemos que el Anthony es la expresión de los deseos reprimidos de Adam.  Anthony desea escapar de las responsabilidades de la vida familiar. Su mujer (Sarah Gadon) le pregunta si ha estado otra vez con ella, lo que parece indicar que ya le fue infiel una vez. La llave del club que se envía a cada miembro viene a representar la tentación de ser infiel. La llave representa la tentación latente que cada cierto tiempo vuelve a aparecer. Anthony tiene miedo al compromiso y ahora se siente atrapado ante el bebé que esperan. Quizás tema convertirse en su padre, personaje ausente en todo el film y a quien ni siquiera se le nombra. Quizás el padre fuera anulado por la madre de Adam/Anthony y ambos teman correr la misma suerte.

La araña

En la onírica escena inicial en el club la mujer aplasta una araña, lo que nos lleva a pensar que la araña simboliza lo que más teme Adam: la pérdida de libertad a manos de su madre. Obviamente, esto no lo sabemos en la escena inicial.

Finalmente Adam logra quedarse con la mujer de Anthony (quien acepta de buena gana el intercambio) y decide que es el momento de eliminar a su otro yo imaginario, de vivir su propia vida. Ya no hay hueco para las dos personalidades. Anthony debe morir. De ahí que Anthony tenga un accidente mortal junto a la novia de Adam, ambos elementos negativos debían ser eliminados de la ecuación. Adam decide finalmente vivir la vida de Anthony e ignorar todo lo concerniente a su personalidad. Estando en la ducha, apaga el transistor en el que se da la noticia del accidente ¿un intento de su otro yo de volver a manifestarse?

Vayamos con la araña de la escena final: Adam cree que finalmente ha escapado del férreo control, de su madre y ha empezado de cero adoptando una nueva personalidad (la de Anthony) con los aspectos que su madre nunca aprobaría. Pero todo es una ilusión. Realmente su nueva vida no puede prosperar. Al descubrir la llave en la chaqueta de Anthony, decide inventarse una excusa para acudir al club. Adam también tiene deseos de ser infiel, no es una característica exclusiva de Anthony. La tendencia a la infidelidad como vía de escape ante el compromiso permanece ahí. Para más inri, su mujer (o, mejor dicho, la de Anthony) le informa que ha llamado su madre. Adam no ha conseguido escapar de su madre ni haciéndose pasar por su otro yo. Y ella no va a aprobar este nuevo intento de escapar de su tela de araña. La madre es la araña que irrumpe en su casa. Es hora aceptar el fracaso y crear otra nueva personalidad. Como bien dice Adam en sus clases, todo sigue un patrón, la historia se repite una y otra vez. No hay salida del laberinto.

Otra teoría

Tampoco es descartable la teoría que dice que Adam sufrió un accidente de coche y a partir de ahí se produce el desdoblamiento de personalidad. En ese caso, el accidente sería el inicio de todo y justificaría la cicatriz en el pecho de Adam, los dolores de cuello que parece sufrir así como su cambio en el sentido del gusto. Personalmente, me quedo con la explicación anteriormente expuesta, pero no puedo negar que tampoco le falta verosimilitud a esta versión (si ello es posible). Como vemos, esta historia da para múltiples interpretaciones.

Enemy es un paranoico rompecabezas cuyo desenlace deja aturdido al espectador. Sin embargo, pasado el tiempo no puedo quitármela de la cabeza y mi opinión mejora cada vez que le pienso en ella.