El sábado se presentaba con incertidumbre debido al anuncio de borrascas y tormentas. Llegaba el turno de la segunda edición del festival Electric Rock Day que se celebraba en la jerezana Sala Paul, testigo mudo de grandes conciertos, que acogía una cita con trabaja duro para afianzarse como propuesta rockera al sur del sur. Los partes meteorológicos fallaron y la lluvia no hizo acto de presencia pero sí el bochorno de calor que produce su calma. El patio de la Sala Paul era un hervidero, la organización (a la que felicitamos desde aquí por su buen hacer y facilidades) había previsto tanto una barra exterior como otra interior así como puestos de merchandising y artesanía que propiciaban la expectación entre el público asistente mientras compartía una cerveza fría y mucha conversación a la espera del comienzo de los conciertos.
Surya eran los primeros en subirse al escenario del Electric Rock Day -en el patio exterior debían de haber tocado a medio día Clear Lines pero el anuncio de lluvia llevó a suspender su actuación y mostraron un muy buen nivel instrumental aunque a veces daban la impresión de que se creaba un poco de distancia con el público. Lo cierto es que sus canciones sonaban bien, manteniendo durante la actuación una línea de sonido homogénea.
El movimiento migratorio se producía del patio al interior cuando comenzaban los primeros acordes de los sevillanos Pinball Wizard que salían dispuestos a caldear el ambiente con su dosis de hard rock guitarrero. Mientras comenzaba el concierto llegaba la primera noticia, la avería en el sistema de aire acondicionado, algo que llevó a la gente a ir saliendo en pequeños intervalos al patio a refrescarse debido a la temperatura que se acumulaba en el interior de la sala. Pero eso no amilanó a Pinball Wizard que salieron a por todas y si el calor ya era considerable su actuación hizo que aumentara la temperatura. Gran actuación de Memphis su vocalista, cuya voz es uno de los distintivos del grupo, que a pesar de que el sudor les recorría de arriba a abajo se dejaron la piel en el escenario. Canciones como «Hard rock steal our souls tonight» o «Good girl gone bad» hicieron vibrar y brotar al público asistente. Pinbal Wizard siguen avanzando y consolidándose como una apuesta de futuro dentro del panorama hard rockero y conciertos como este son su mejor tarjeta de presentación. Era mi primera vez ante su directo y salí plenamente satisfecho.
Llegaba el turno de los también sevillanos Hard Days a los que ya había tenido la suerte de disfrutar en concierto por lo que era consciente de lo que se nos venía encima. Frente a la fuerza de Pinball Wizard, Hard Days ofrecen un tipo de hard rock de corte más clásico. Aún estaban probando sonido cuando la gente ya se agolpaba frente al escenario por lo que sin más dilaciones comenzaban el show. Hard Days son una banda que no puedes analizar solo por el conjunto también por sus individualidades, que forman realmente un todo en la personalidad del grupo. Reconozco tener debilidad por una de sus canciones «Maybelline» que sonaba de maravilla. Se conjuntan perfectamente sobre el escenario y tanto los solos de Luis como el peso rítmico que llevan junto a ese sonido de teclados que les envuelve en la mejor tradición Purple/Heep consiguieron atrapar a los asistentes. Suenan canciones de su de momento único disco como «Hey Jimmi» y finalizan con una excelente demostración individual de los miembros de la banda. Lástima que no pudiesen tocar todo su repertorio por falta de tiempo porque la sensación es de un crecimiento continuo.
La organización trabajaba rauda en intentar solucionar el problema de la alta temperatura en la sala, y con unos grandes ventiladores consiguen rebajar el calor mientras saltan al escenario Sexplosion. Desde el primer momento, su hard rock sleaze de claras influencias ochenteras cala rápido entre el público asistente que se contagia de la movilidad del grupo sobre el escenario. A raíz de un muy buen cover de «You could be mine» el concierto se convierte en una fiesta sin fin. Tres bandas con tres propuestas distintas de hard rock. Sexplosion se notan seguros sobre el escenario, comandados por su vocalista y guitarrista Guillermo Starless y bien respaldado por una banda que suena potente, fresca y divertida. Repasan su disco “Swallow n’ Shut Up» y uno tiene la impresión de viajar en el tiempo y estar disfrutando en algún garito de L.A. a mitad de los ochenta. Sexplosion me sorprendieron gratamente seguramente por ser la banda que menos controlaba de las que tocaban esta noche y demostraron muchas tablas y lo más importante, buenas canciones y maneras para ejecutarlas en directo.
The Electric Alley jugaban en casa y eso se notó. Con el aire acondicionado reestablecido la sala se llenaba en toda su capacidad ante la descarga de los gaditanos que presentaban su nuevo disco «Turning wheels» del que sonaron bastantes canciones en este concierto junto a clásicos de la banda como «Can we have some love between us?» o «Get electrified!» e incluso una sorprendente versión de «Wicked game» de Chris Isaak. La evolución de The Electric Alley es imparable y el Electric Rock Day fue testigo de una banda que ha derribado todas las puertas por derecho propio. Su cantante Jaime Moreno está en un estado de forma brutal y se encuentra entre los mejores vocalistas de este país. Su concierto fue simplemente espectacular junto a un Nando Perfumo que sobresale con su guitarra. Aunque, realmente The Eletric Alley son un todo, lo que les convierte en imbatibles sobre el escenario.
Con un público entregado desde el primer momento dejaron una descarga inolvidable y se están ganando por derecho propio su lugar entre los grandes de la escena. Su actuación ponía punto final a esta segunda edición del Electric Rock Day, a la que le deseo que nos ofrezca muchas más y por supuesto no quiero dejar de agradecer a Antonio Albert todo su esfuerzo para sacar este proyecto adelante.
Caras de felicidad y cansancio, encuentro con viejos amigos y la suerte de hacer otros nuevos. Muchas horas de rock para demostrar que a pesar de todo esto sigue bien vivo. Ah, y una buena entrada que es importante, si la gente no asiste a los conciertos, a los festivales, no pasa por los puestos de merchandising… al final el esfuerzo queda en vano, pero esta vez, el rock salió triunfante.
Crónica de Surya -Juanjo Esborronda-
Ecelente pagina muy buens en verdadad