En este año movido y de muchos cambios. Todavía ha habido tiempo para la música. Siempre hay tiempo para la música. Ha sido un año más bien triste, melancólico, oscuro, como lo vienen siendo últimamente. Por esto en la lista de este año predominan los sonidos más sombríos aunque como siempre melódicos, agradables para el oído y el alma, de manera que nos ayudan a continuar con la vida venga como venga. Hay para todas las edades y gustos. Sonidos más actuales y otros más clásicos. Un poco de todo, vamos. Espero que os gusten o que en alguno descubráis vuestra canciones favoritas.
Mejores discos de 2025
Naxatras – V
Este disco es el primero que elegí este año. Me gustaron sus atmósferas etéreas, similares, aunque distintos a Crown Lands, por ejemplo. Un disco muy escuchable con unos bonitos coros que te hace pasar un buen momento.
Principe Valiente – Oceans
Atentos a Principe Valiente, un grupo que viene de Estocolmo con una música muy bien hecha y unas texturas oscuras y prolongadas que nos recuerdan a The Cure, por ejemplo. Oceans es un trabajo bien producido que contiene varios hits en su interior, de esos que te pones en bucle en los momentos de intimidad y autoabrazo.
John Serrano – Still Alive
Siguiendo el orden de descubrimiento vamos con uno de los discos que forman la trilogía última publicada por John Serrano. Se titula Still Alive, disco central de la trilogía que me ha acompañado durante todo el año. Probablemente es el disco que más he escuchado. Un disco bien elaborado, maduro, bonito, barroco en su justa medida, fresco, natural como la fruta fresca mojada de rocío.
Deftones – Private Music
El siguiente de la lista es este de Deftones. Un bombazo con unas letras que demuestran que la banda sigue en vanguardia y no se deja arrastrar por espejismos. Con un sonido habitual, con guitarras prolongadas y ecos etéreos, nos han dado un disco que sirve de guía para adentrarse en los márgenes de la existencia, esos márgenes irrespirables que nos advierten, con su aire irrespirable, que las fronteras y los límites no están lejos.
Suede – Antidepressants
Suede siguen su en su línea de seguir avanzando sin renegar de su pasado, claro. No se han acomodado en su éxitos de los 90 y siguen demostrando que tienen un lugar importante en nuestro presente. Más maduros, más dulces, como sólo el mar puede serlo, nos ayudan a entender esos momentos malos por los que pasamos desgranando esos porqués cosechados en su tránsito por los diferentes desarrollos metafísicos.
Curtis Harding – Departures & Arrivals: Adventures of Captain Curt
Este disco de Curtis Harding me cautivó enseguida. Esos sonidos soul con la voz negra y esas panderetas zarandeándose al viento me gustaron desde el principio. Un sonido más clásico, que aunque no nos descubre nada nuevo, nos ayuda a disfrutar de estos ritmos negroides creando nuevas rutas en nuestra imaginación al ser melodías desconocidas.
Baxter Dury – Allbarone
La música electrónica también tiene cabida en esta lista. Tengo gustos muy, muy amplios y este disco que me recomendó el máster Bernardo de Andrés me caló enseguida. Con una mezcla de sonidos enlatados y otros más analógicos, tenemos un resultado bailongo y disfrutable. Un disco que nos mueve los pies sin quererlo con una calidad que nos recuerda eso sonidos más clásicos mezclados con intención y acierto.
The Birthday Massacre – Pathways
The Birthday Massacre han sufrido algún que otro malnacer y se han propuesto navegar esa fina línea entre la realidad y la realidad real sin esperar estar en ninguno de eso dos lados. De esta manera nos ofrecen un trabajo muy melódico y agradable que los más jóvenes sabrán valorar. Un disco con algún que otro hit en su interior también que nos ofrece de la misma manera sonidos oscuros, melancólicos y etéreos, con un resultado muy afinado.
Kanadian – The Fire That’s Tearing Through Our Home
Kanadian son una banda de rock alternativo e indie de Barcelona. Tienen un rock melódico tipo shoegaze y dream pop. Si no miras su origen no piensas que son de aquí. Tienen un enfoque muy internacional y suenan de maravilla. Una banda que apuntarse sin ninguna duda. Este disco nos ofrece unas canciones diferentes entre sí, un trabajo muy dinámico y estiloso que juega con momentos libres instrumentales que hacen disfrutar mucho. Dicen que las mejores canciones son de desamor, pues estas son de desvida.
Manolo García – Drapaires Poligoneros
Las canciones de Manolo García son camino, son pizarras en un colegio vacío lleno de polvo de tiza. Son ríos, sendas sinuosas que seguir hacia atrás. Son calendarios de situaciones adversas, son remedios contra el mal de ojo. Drapaires Poligoneros es el último disco de uno de los mejores artistas de este país. Son canciones con conciencia, con latido propio que resuena en nuestro interior cuando llegan bailando por el aire.
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