Pequeñas lagrimas , dos palabras cautivadoras , y unos escasos tres minutos y medio son suficientes para quedar atrapado el corazón. LITTLE TEARS , una joya escondida que parece extraída de un libro de apuntes del ex Byrd Gene Clark , ha sido el detonante para quedar cautivado por TIME HASN’T CHANGED YOU, el nuevo trabajo del cuarteto de Edmonton, ALTAMEDA.
Desde aquellos viejos tiempos de despertar con otros ilustres canadienses Blue Rodeo no había vuelto a encontrar una motivación igual de dejarme arrastrar una y otra vez por el discurrir de un disco. LOSIN SLEEP , perfecto
despertador de mañanas de sol , una carga de caballería cual canción firmada por Fogerty se ha convertido en la sonrisa al sol . BOWLING GREEN, con ese teclado onmipresente de Refugee, transporta a los años 80 cuando uno manoseaba unos discos uno con portada con un cantante rubio paseando por una tienda de de lps ,o el otro recién adquirido con un señor sentado en un sillón de diseño con la luz del sol iluminando su cuerpo mientras nos cuenta las historias de un lugar llamado Wonderland. WISH UPON THE WEATHER y su piano Roy Bittan vuelve a traducir el estado de felicidad que tantas veces sonaba camino del baño de mar de tiempos pretéritos. TIME HASN’T CHANGED YOU, la necesaria canción de amores perdidos que todo compendio debe tener en su cuerpo , con sus vientos otoñales y esas guitarras españolas . ROLLING BACK TO YOU , nuevamente esos vientos excelsos añadidos a unos sonidos que recuerdan al sonido de LA con Poco a la cabeza. FIRE , balada de alto contenido en destilado de folk rock. RUN AWAY ON YOU , preciosidad con sentido running on empty que tantas veces se tatareo SOFT SHOES SLIP AWAY , épico country soul que me ha obligado a rescatar esa cazadora blanca con bordados rojos y flecos aún sabiendo que ya no me abrocha. GOOD WILL SURELY COME , canción de atardecer , de sol cayendo , de cerrar los ojos y oler la brisa.
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