Muchas, ¡muchas ganas! de ver los movimientos de directo de los Imperial Jade tras un glorioso debut que me dejó con la baba colgando hace dos años con el obligatorio Please Welcome (2015).
Se habían paseado ya triunfalmente por la Ciudad de La Plana y, en concreto, por la Veneno Stereo Rock y nunca había tenido ocasión de asistir por lo que el único precedente que tenía fue aquel sorpresivo y sorprendente concierto acústico para guiris que Arnau (vocals) y Hugo (guitar) dieron en un chiringuito de la playa de Calella (El Maresme, su feudo natural por otra parte) en la que me encontraba de veraneo. Por suerte, el pasado sábado 18-N pude resarcirme y comprobar que la banda tiene un nivelazo igual o superior incluso de lo que demostraron en estudio hace dos años. Vayamos con la crónica porque tiene mucha miga…
Acudir a un bolo en la Veneno Stereo Rock siempre se convierte en una pequeña reunión de apasionados por la música, a parte de enriquecedoras conversaciones y ligeros debates, le tengo que agradecer a su programador, Alejandro Pérez B., su cercanía, respeto y buen rollo siempre que puedo acudir a ver a algunas de las inmejorables bandas que siempre trae. Programador nato y muy coherente, ya os lo aseguro.
Pasando a hablar de los Imperial Jade, afables es decir poco, cuando llegué a la sala me encontré de bruces con Arnau que estaba echando la última mirada al ‘setlist’ al que enseguida se le unió Hugo y Francesc (batería) para humildemente agradecerme la labor que hacemos con ellos a la hora de promocionarlos e intentar vender al máximo su propuesta. Vinieron luego Alex (guitar) y Ricard (bass) y el buen rollo continuó en la pequeña conversación que tuvimos en la que las preguntas se me apelotonaban intentando tirarles de la lengua para saber qué coño pasa con ese segundo disco que no termina de llegar (tranquilos, hay buenas noticias…). Incluso fueron ellos mismos los que me preguntaron algun secretillo de mi blog que no acababan de tener claro…
Pero pasemos a hacer crónica que es a lo que venimos hoy aquí. Con un setlist muy equilibrado y con mucho sentido, los del Maresme comenzaron calentando el ambiente ‘a la Deep Purple’ con su «Fire Burning Sound» a pesar de no haber podido disfrutar de esos teclados de los que presume la canción en formato estudio. Llega el primer pelotazo supino de la noche, funk rock y groove sexual para el enorme «Highway». A estas alturas ya me han quedado claras dos cosas, la primera es que la banda se ha convertido ya en una maquinaria bien engrasada (y rozan los veinte años) sintiéndose segura del sonido y la personalidad que defienden, la otra es… lo inmenso (en todos los sentidos) que es Arnau con un carisma como frontman incuestionable (aún podría soltarse escénicamente mucho más si quisiese) y una capacidad vocal A-PA-BU-LLAN-TE.
La banda no tarda en mostrar su lado sureño con un tridente insuperable gracias un temazo como «A Rolliking Song» que conectaron con el primero de los dos temas nuevos que formarán parte del nuevo trabajo, «Glory Train», que apesta a blues southern por los cuatro costados. Cerró el bloque una increíble cover y homenaje al clásico de Gregg Allman, «Midnight Rider». Increíble feeling Ladies & Gentleman, BUFFFF!!!!
Vuelve el blues rock por sus fueros con «High On You». A la banda la siento como una puta locomotora de ‘boogie rock’, engrasada al milímetro y demostrando lo mucho que los Rival Sons les han influenciado. Faltó la harmónica, ya se lo echó en cara alguna fan, pero Arnau justificó su ausencia por cuestiones técnicas y de afinación…
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A continuación, los Jade se marcan la segunda sorpresa de la velada con un tema más directo y funky, más hard blues como parece ser «Dance». Esto pinta de muerte. Aires y arpegios zeppelianos para nuestro disfrute son los que nos ofrecen tanto Alex como Hugo en una composición tan ambiciosa como maestra. Los dos guitarras demuestran aquí que sus increíbles maneras y técnica guitarrística a pesar de su juventud. «Electric Lady» es el siguiente, la sombra de Jimmy Page (pero también la de ‘Manolenta’) sigue pululando por la Veneno Stereo en un track muy especial para la banda por la ‘intro’ que le hizo Arnau. Ambientes múltiples, delicadeza melódica, épica vocal muy Plant, diálogos guitarrísticos Hugo/Alex, crescendos intrumentales, solazo por parte de Alex. Un ‘must’ en este concierto, sin duda!.
Llega «Crossroads», Arnau se toma un descanso para dejar todo el protagonismo a la instrumentación pero también a las grandes voces que demuestran tener Hugo, Alex y Francesc en una composición muy ‘jammy’ en donde el blues se hace con el control y Francesc nos deleita con su ‘solo’ de batería (y su desgarrado timbre vocal!). El cantante vuelve a escena en uno de mis temas favoritos, «Camel», con esa psicodelia zeppelinesca y bluesera, de riff muy marcado y atmósfera oscura. Hipnotizado hasta con ese punteo al bajo de Ricard que hace de puente hacia el ocaso del tema. Como no podía ser de otra forma, la banda nos deleita después con un ‘medley’ de Zeppelin inmejorable, ¡son una banda perfecta para interpretar a los ingleses! pero, en mi opinión, esto ya no les hace falta con el nivelazo que demuestran.
La banda cierra el bolazo, ¡sí!, ¡EL BOLAZO!, con dos ‘instant classics’, el primero homenajeando al recientemente desaparecido Malcom Young con un «Mr. Rock & Roll» rebosante de boogie rock y excesividad rock’n’roler, perfecto para tributar al arquitecto de AC/DC. Su público se desató definitivamente celebrando un temazo muy Berry. Cerró el concierto su tema más conocido y por el que me enamoré de ellos y es que «Satyr» es un mostruo de cabo a rabo que en directo es más gigante que en disco, una composición epatadora, con un riff muy pegadizo y una melodía y estribillo a la altura de los grandes clásicos del Rock. Perfecto cierre, sin duda.
Acabado el concierto, no tardé en comunicarles que España se les queda pequeño, que son una banda exportable al 100% y que tienen que encontrar ese contacto que les lleve a Suecia y Alemania como poco porque esta banda lo tiene absolutamente todo para triunfar, juventud, hambre, técnica, inspiración compositiva, carisma, imagen…
Seguí departiendo con Arnau sobre el nuevo disco tras el bolo y me pudo confesar ‘si el debut fue un poco mostrar todas nuestras cartas sobre la mesa, el nuevo va a ser un disco de contrastes, temas muy directos y sencillos en contraposición a canciones más trabajadas y ambiciosas’. Obviamente le tenía que preguntar qué pasa con su segundo disco que no acaba de llegar a lo que me contestó ‘está todo ya compuesto, tranquilo, los disfrutarás para finales de 2018, no nos tomamos las cosas con demasiada prisa (risas)’. Era obvio preguntar sobre este Please Welcome Tour 2017 confesándome ‘nos ha costado mucho tiempo y esfuerzo cerrar fechas pero ya estamos en ello y deseando ir la semana que viene a Andalucía para darnos a conocer en el único sitio en donde no hemos estado todavía, ¡sabemos que les vamos a gustar!’. A partir de ahí a la conversación tomó otros derroteros saliendo a colación su experiencia positiva teloneando a Rival Sons, su reciente incorporación al Resurrection Fest 2018 para acabar departiendo sobre la carrera de Alice Cooper y las delicias de la discografía de Aerosmith. Broche de ORO.
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