bdNada mejor que empezar el año hablando de un disco de Dylan, le pese a quien le pese, un músico que sigue de actualidad y con unos discos a los que no le afecta el paso del tiempo. Publicado en 1970,  Self Portrait es el décimo álbum de estudio de Bob Dylan.

Tras Blonde On Blonde, es el segundo álbum doble de Dylan.  En su mayoría contiene versiones de temas de country y folk populares, además de nuevas composiciones, temas instrumentales y canciones en directo junto a The Band. Dylan canta en la casi totalidad de los temas con el mismo tono de voz que en Nashville Skyline. Asimismo es como un definitivo corte de manga a todos los “freaks” compulsivos que le acosaban sin cesar, tanto psíquicamente como persistentemente.

Greil Marcus escribió sobre este disco en la revista musical Rolling Stone: «¿Qué es esta mierda?». Se catalogó a Self Portrait como el tercer peor disco de rock en el libro The Worst Rock and Roll Records of All Time, siendo tan sólo superado por los álbumes Metal Machine Music de Lou Reed y Having Fun With Elvis On Stage de Elvis Presley.  Lo que viene a explicar que todo lo que no se comprende se tacha de malo y que hay mucho supuesto «critico» musical que no tiene ni la menor idea de lo que escribe.

Dylan explicaría en entrevistas posteriores que Self Portrait era una broma, para quitarse de encima el san benito de «profeta de una generación». Pero a pesar de tanta crítica negativa, el disco es un inmenso patchwork confeccionado por un genio. Un disco que desconcierta a la primera escucha pero que va ganando cuerpo con las siguientes escuchas. Dylan estaba hasta las mismas narices de tanto fan «Stalker», de tanto Mesías por aquí y por allá. Hizo lo posible para molestar a esos fans ofuscados de fanatismo atorado. A la pregunta de porque fue el disco doble, el bueno de Bob respondió: «Bueno, no podía ser un disco sencillo porque entonces no sería malo. Quiero decir, que si vas a poner mucha mierda en él, probablemente te lo cargues.»

Dylan relató otra historia a Cameron Crowe:  “Self Portrait son trozos de canciones que hicimos el tiempo en que estuvimos en Nashville. Había más material olvidado en las estanterías. Durante ese tiempo habían pirateado discos y había aparecido material mucho peor en bootlegs. De modo que pensé recopilarlo y publicarlo, mi propio bootleg, por decirlo de alguna manera”.

Dylan podría haber lanzado un cuádruple disco sin ningún problema. La mayoría de las canciones no han sido nunca publicadas. Dos de esos outtakes son Went to See the Gypsy y Time Passes Slowly, ambas finalmente publicadas en New Morning.  Las sesiones de Self Portrait, duraron más tiempo de lo previsto en las se inmiscuyeron un montón de músicos, de los cuales destacar a The Band al completo y Charlie Daniels al bajo y guitarra, Al Koper, guitarra y teclados, Charlie McCoy, guitarra, bajo y armónica. Muchos de los músicos eran veteranos de las sesiones con Elvis Presley.  Bob Moore había tocado el bajo habitualmente en todos los discos de Presley.  Entre tanta curiosidad que se encuentran en este disco, destacar los temas «Early Mornin’ Rain» del maestro Gordon Lightfoot, a quien le debo un post desde hace tiempo, «Let It Be Me» de un icono de la canción francesa: Gilbert Bécaud. «The Boxer» de Paul Simon que al parecer trata de Dylan.

 

[youtube id=»05HGkv34l-A» width=»620″ height=»360″]

 

Todo esto demuestra una imperativa necesidad de dejar claro que sus canciones sean consideradas como tales y no mensajes proféticos o trayectorias a seguir, asimismo manifiesta su gusto en adaptar a sus coetáneos. De esta forma al disfrutar de antiguos colaboradores de The King,  Dylan cumplía su sueño de estar cerca de Presley, de alguna manera. La versión en directo de «Like a Rolling Stone», es como tirar piedras en su propio techo, una desmitificación del tema. «Self Portrait» contiene la misma atmosfera que su programa radiofónico «Time Radio Hour», un espíritu desenfadado.

En aquella época la concordancia de Bob con Albert Grossman (representante de Bob) estaba muy deteriorada y Bob sabía que Grossman percibiría la mitad de los beneficios de las canciones que él grabase; el lado judío de Zimmerman se agudizo, ya que al grabar temas de otros artistas, Grossman no percibiría ningún porcentaje de la publicación. Con Self Portrait Dylan se niega a ser encasillado en un género musical y por ello perecer de una muerte lenta de una única identificación musical.  El «Autorretrato» es uno de los ejercicios de análisis más difíciles que puede realizar un artista y Bob hace gala de un sentido del humor muy personal.  Self Portrait es un disco sencillamente echo para escuchar y disfrutar, tal cual lo imaginó Bob Dylan.

Bob Dylan, el pintor, igualmente se dio el gusto de plasmar su autorretrato para la portada del disco, era sus primeros pinitos en pintura y una de las primeras obras que veía el público: Del mismo modo ilustro el disco de The Band, Music From The Big Pink  y su disco Planet Waves. Por si a alguien le apetece o coincide en un viaje, a Dinamarca, recordar que unas 100 obras serán exhibidas en la Galeria Nacional de Dinamarca (Statens Museum for Kunst) el próximo año.

Como costumbre se grabaron más canciones que quedaron olvidadas en largas bobinas, aquí os dejo repertoriadas algunas: «Folsom Prison Blues» (Johnny Cash), «Ring Of Fire» (June Carter/Merle Kilgore), «Sitting On The Dock Of The Bay» (Steve Cropper /Otis Redding), «Spanish Is The Loving Tongue» (Charles Badger Clark), «Annie’s Going To Sing Her Song» (Tom Paxton),»Universal Soldier» (Donovan Leitch), etc, etc……

En agosto de 2013 Dylan lanzo en la colección The Bootleg Series, las demos de las sesiones de grabación de los álbumes Self Portrait y New Morning. Un total de  35 canciones, en una espléndida caja con un nuevo auto retardo de Dylan esta vez mucho mejor parecido, y de paso esta caja sirve para demostrar que Self Portrait es un disco a tener en cuenta.

Revisando a BOB DYLAN – Capítulo 10: Self Portrait

by: Laurent Berger

by: Laurent Berger

Tsi – Na – Pah estudió Bellas Artes y más tarde cocina. Actualmente recorriendo Andalucía vendiendo y comprando viejos vinilos. Apasionado del rock progresivo y del rock americano de los setenta. Colaborador en distintas revistas musicales y tiendas de música en la época donde se vendía música de verdad.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Últimas entradas

Últimos comentarios

  1. Sí, vale, Whitesnake, Dio, Led Zeppelin... pero este disco suena más a la continuación del primer LP de Badlands que…

Te puede interesar

Sonic Wolves – III

Sonic Wolves – III

De la mano de Argonauta Records nos topamos de frente con el nuevo disco de los italianos Sonic Wolves, banda con más de una década de experiencia a sus espaldas y que facturan un hard rock guitarrero de corte setentero en el que se pueden intuir influencias de Black...

Lares – Et in Arcadia Ego

Lares – Et in Arcadia Ego

"La misteriosa sentencia, por inacabada y porque se desconoce su origen, Et in Arcadia ego", es un memento mori, una advertencia sobre la fugacidad de la vida. Que se tenga noticia, apareció por primera vez en un cuadro de Guercino en 1623..." -Peregrinos de la...

Midnight – Hellish expectations

Midnight – Hellish expectations

Más allá del hype que puedan suponer la banda de Athenar, que se ha colado en alguna que otra gran revista que de vez en  cuando trata de redimirse dedicando algún artículo al heavy metal, Midnight es una de esas bandas que personalmente me hace disfrutar de modo...

The Black Crowes- Happiness bastards

The Black Crowes- Happiness bastards

Desde su primer disco, aquel mítico “Shake you money maker” (al que rindieron tributo en su última gira) The Black Crowes lograron hacerse el favor de un público de lo más heterogéneo pues lo mismo gustaban a heavies que a amantes del blues, del soul o del rock. Y eso...

Judas Priest – Invincible Shield

Judas Priest – Invincible Shield

The Priest is back! Una vez más, y esperemos que no sea la última, la ya famosa exclamación que podemos escucharle a Rob Halford en el fabuloso directo del 87, Priest... Live!, vuelve a tener pleno sentido. Han pasado cincuenta años desde su debut en 1974 con Rocka...

Pin It on Pinterest