He oido y leído quejas sobre la producción de este paciente número 9. El hecho de que Ozzy trate de acercarse a tendencias actuales no es una novedad, ya se hizo patente en el anterior disco, «Ordinary man» que incluía un par de canciones totalmente fuera de lugar al menos bajo mi punto de vista, algo que afortunadamente no me encuentro en este «Patient Number 9» donde Ozzy parece recobrar fuerzas. Rodeado de un puñado de músicos reconocidos y solventes se muestra inspirado. Ha dejado caer el peso del disco en las manos de Andrew Watt tal vez buscando como dije antes ese nexo con la actualidad y cierto es que los efectos en la voz de Ozzy son evidentes, pero bueno, estamos hablando de un tipo de 74 años que ha maltratado de todas las maneras conocidas e incluso alguna desconocida su garganta sin que esta fuese tampoco uno de los grandes tesoros del Rock and roll si nos ponemos a comparar. 

¡Me gusta el disco y mucho!. La canción que da nombre al disco si la radio aún fuese receptiva al rock podría estar sonando una y otra vez en antena. Además Jeff Beck, ese guitarrista por encima de otros muchos que por mucho que su nombre apareciese en las paredes no han conseguido la estabilidad en el tiempo de Beck se desata tanto con el solo como con su riff y además vuelve a la carga en «A Thousand shares». Ozzy se acompaña de conocidos, amigos, para las canciones de este disco. La guitarra de Mike McCready es la siguiente en aparecer en escena y coño, que manera de aportar contundencia. Siempre me alegra volver a ver a Zack Wylde cerca de Ozzy. Aunque el guitarrista ha forjado su camino y destino, quieras o no su relación con el Madman es imposible de borrar. Son cuatro canciones en las que no deleita con su manera de tocar, y ese riff ultra heavy de «Parasite», el medio tiempo «Mr. Darkness» donde insufla una fuerza natural. «Nothing feels right» con esa melodía tan Ozzy y «Evil shuffle» son las otras dos canciones donde disfrutamos de la guitarra de Wylde.

Ozzy rescata a Eric Clapton para la causa – si, y me da igual lo que digan o el que se pueda llevar las manos a la cabeza – en «One of those days» para que Slowhand sin excesos para los que ya no se presta deje constancia. Cuidado, que en este disco también podemos escuchar y disfrutar de Duff McKagan, el tristemente fallecido Taylor Hawkins, Chad Smith, Robert Trujillo y Chris Chaney. Además del propio Watt que pone su guitarra que por cierto suena de vicio en ese infeccioso blues llamado «Darkside blues.

He dejado conscientemente para el final las dos canciones donde aparece Tony Iommi. Ambos, vocalista y guitarrista son dos fuerzas de la naturaleza que por fortuna para nosotros convergieron en el tiempo y el espacio. Siempre hay una magia implícita cuando ambos forman parte de una canción. «No escape from now» con esa entrada acústica de la guitarra secundada por la voz hasta que el demoledor riff entra en acción y no puedo dejar de pensar en un nuevo disco de Black Sabbath entre mis manos. «Degradation rules» es la otra canción donde Mr. Iron Man nos deleita con su monstruoso riff y por si nos faltaba algo, Ozzy tira de armónica haciéndome viajar de nuevo a esa banda que amo sobre todas las cosas. No merece la pena preguntarse si este será el último disco de Ozzy, si será capaz de aguantar la gira, si habrá un futuro cercano. Todo se centra en el presente y yo, gente de mal vivir, ya soy un jodido paciente número nueve.

OZZY OSBOURNE – Patient number 9

by: Carlos tizon

by: Carlos tizon

Licenciado en el arte de apoyar el codo en la barra de bar. Comencé la carrera de la vida y me perdí por el camino, dándome de bruces con el rock and roll. Como no pude ser una rock star, ahora desnudo mi alma cual decadente stripper de medio pelo en mi blog, Motel Bourbon.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Últimas entradas

Últimos comentarios

Te puede interesar

Opera Magna – Heroica

Opera Magna – Heroica

Me fascina de manera similar, como lo que casi antes de ayer alcanzaba la primera plana hoy ocupa un segundo lugar en el opaca estancia de la actualidad musical, a la vez que las décadas van pasando página dejando como índice los retazos de aquellos sonidos que...

Max Richter- In a landscape

Max Richter- In a landscape

Max Richter es uno de los grandes genios contemporáneos dentro de la música clásica. Éste “In a landscape” es su noveno álbum. Disco lleno de matices pero que entronca en intenciones a aquel fabuloso “The blue notebooks” de hace ahora veinte años. Una comparación no...

Brant Bjork Trio – Once Upon A Time In The Desert

Brant Bjork Trio – Once Upon A Time In The Desert

Cerramos trilogía de ilustres del Desierto con el último disco del prolífico workaholic BRANT BJORK. En el anterior post lo teníamos liderando en directo a su otro proyecto, Stöner, dando una lección de maneras y feeling encima de las tablas, pero hoy vuelve a la...

Stöner – Hitting the Bitching Swift

Stöner – Hitting the Bitching Swift

Después del comeback de Hermano hace algunas semanas, continuamos con esta tríada especialísima de discos Stoner que os propongo planteando a la realeza del movimiento. Turno para otros dos capos absolutos del desierto de Palm Desert y el Sky Valley, turno para...

John Serrano – Rise

John Serrano – Rise

En esta revista, estamos siempre muy atentos a lo que saca este versátil músico andaluz conocido en la escena indie, y que participa en los diversos proyectos que le proponen, siendo el más reciente el disco que reseñé en septiembre, “Providence”, de SomeWhereOut,...