Mientras sufrimos el fin de semana más caluroso de los que hemos tenido en los últimos años, acudí a la sala Nazca el pasado sábado 11 de Junio para refugiarme en su interior de estas altas temperaturas y ver en directo a la banda madrileña Bridge To Nowhere, cuyo concierto me habían recomendado, y que tras la cancelación del concierto de Ñu de la Riviera, tenía un hueco en la agenda para poder verlos en directo.
Aunque la apertura de las puertas de la sala estaban anunciadas a las 8 de la tarde, no accedí a la sala hasta pasados 45 minutos mientras disfrutaba de algunas cañas en un bar cercano y saludaba a conocidos, que aprovechando las terrazas, esperaban pacientemente a las 9 de la noche, que era la hora anunciada para el inicio del concierto. Aunque una vez en el interior de la sala, el ambiente era estupendo con una música variada, acorde al estilo que íbamos a presenciar, y con el público presente sentados en los asientos laterales que la sala posee.
Bridge To Nowhere es una banda de Metal Melódico Oscuro formada en el 2013 que editó su primer disco “Wars Of Avalmeth” ya en el 2015. Tras varios cambios en la formación, la banda lanzó en el 2019 “Divine Tragedy (La Divina Commedia Di Dante Alighieri)”, obra conceptual sobre la famosa obra del escritor italiano, y que la banda por fin iba a poder interpretar de manera íntegra tras aplazar el concierto anunciado previamente para el 20 de Enero de este año.
Actualmente la banda está formada por la cantante Ana Rochas (ex cantante del grupo Wereworld), el guitarrista solista César L. Pazos (guitarrista de Avalmeth), Rubén Otero como guitarra rítmico, Paulo Tchilibass bajista chileno conocido por tocar en numerosas bandas de categoría internacional, y Luis Rodríguez ‘Lucho’ a la batería. Además en el directo contarían con la participación de varios invitados que fueron anunciados con antelación, y de los que ya iré hablando en su momento.
Cuando ya la sala presentaba un lleno respetable dadas las circunstancias actuales, con la presencia de gente de todas las edades, incluso algunos niños pequeños, que protegidos sus delicados oídos con los protectores adecuados, ocupaban las primeras filas frente al escenario para no perderse nada del espectáculo, arrancó entonces a sonar el intro “The Dark Forest” con la que comienza el disco, y que lógicamente era la señal para que la banda hiciera acto de presencia, cogiendo sus instrumentos para introducirnos con su música en el Infierno de Dante.
Ataviados completamente de negro, con un fondo de pantalla Led donde se veía el nombre de Bridge To Nowhere, la banda comenzó con la descarga del disco con el tema “Descent” y con Ana Roches luciendo un fular rojo, color asociado al infierno que nos iba a describir con este tema y los restantes “Into The Hell” y “The Devil’s Jaws”, sonando de manera estupenda el cuarteto musical y alucinándome el portento vocal de Ana, que bien te podía cantar una estrofa de manera operistica, como pasaba a los guturales sin problema, y luego mostraba todo su poderío con la voz melódica. Y eso que a la largo de la noche estuvo disculpándose por no estar al 100% ya que recientemente había tenido la mala suerte de coger el Covid y todavía arrastraba sus secuelas en las cuerdas vocales a la vez que se asfixiaba de vez en cuando.
Un cambio de afinación en las guitarras, acorde al cambio de escenario en la obra, incluyendo el cambio de color en el fular de Ana, siendo para el Purgatorio el color negro el elegido, y iniciamos el camino con “Regret”, para a continuación presentar al primer invitado de la noche, el guitarrista de Lujuria Nacho de Carlos, que les acompañaría tocando el tema “Seven”, interpretando el solo final tras el que se despidió con una sonora ovación, cerrando entonces la banda el paso de este desolado paraje con el tema “Rivers Of Paradise” dedicado a la persona de Dante.
Otro cambio de afinación en las cuerdas y de vestuario en la protagonista y luciendo un fular blanco nos introducimos en el Paraíso con los temas “Ascent”, contando con la colaboración de Julián González, guitarrista de Voodoo Tales, “Walking On The Stars” y “Light”, dedicando este último a la madre de un amigo de la banda, y con la que cerraban su periplo por la obra de Dante, abandonando el escenario durante unos minutos con una gran ovación del público presente.
Pero como todavía quedaban dos invitados por aparecer, a los pocos minutos la banda regresó frente al público, en esta ocasión con Ana luciendo una de las camisetas de la banda, abandonando los fulares, y tras anunciar la presencia de Marta Sternfeld, cantante de la banda Iblis’ Mistress, y dedicar la canción a los presentes, interpretaron juntos el tema “Energizer Me” de After Forever, a pesar de un percance en uno de los micros, que se quedó sin cable, pero Ana le cedió el suyo a Marta y pudo terminar el tema a pesar de todo.
Y para terminar, contaron con la presencia de César Ortiz, cantante del grupo Lethargus, para interpretar con el público saltando al ritmo de la música, el conocidísimo tema “Out In The Fields” de Gary Moore & Phil Lynott y que Ana dedicó a recordar los 57 conflictos armados que sufrimos actualmente en el planeta.
Gran directo de una banda que no conocía, hay tantos grupos activos, que es muy complicado poder seguir a todos, y de los que me llevo un buen recuerdo, por haber tenido el placer de ver el concierto despedida de este gran trabajo, esperando a que en sus posteriores proyectos con la banda, no tengan tanta mala suerte, y puedan seguir haciéndonos disfrutar con su música.
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