Hace no demasiado entrevistaba en mi programa de radio a Sandri Pow, batería de Atavismo e Híbrido y le preguntaba por la escena que se está cociendo en Algeciras, como es posible que estén saliendo tantas buenas e interesantes bandas de aquel rincón del Sur del Sur. Ella me decía que quizás era porque la ciudad no ofrecía nada que hacer, ningún otro estímulo. Imagino que igual puede influenciar pero el caso es que la cantidad de grupos con propuestas acojonantes que nos está brindando es digno de mención aunque resulte curioso como muchas de las bandas comparten músicos lo suficientemente capacitados para buscar estimular nuestros sentidos con sus canciones. Otro de esos claros ejemplos son Medicina. Poti (Viaje a 800, Atavismo e Híbrido), Alberto (Ballet Violencia, Xudor Barato) y David (Viaje a 800, Buenamuerte Trío) son los protagonistas de esta historia de sonidos propios de un post punk bastante particular donde las melodías se funden con esa distorsión de guitarras bárbara.
Ese viaje imposible entre los delirios de unos Sonic Youth y Lagartija Nick se ve rápidamente identificado con «Infarto juvenil» que abre el disco y en el que la voz juega papel fundamental por su orientación más cercana al pop de épocas posteriores en tiempos de gloria de la Pérfida Albión. «Blanco de impacto» se basa en un marcado riff que lucha frente al sonido melódico de la voz. Stoner rock bajo el prisma de Medicina. «Sobredosis» se vuelve enrevesado con esa sonoridad propia del rock alternativo y el shoegaze. Movimientos repetitivos marcados por los pedales de efectos. «Diagnóstico» es de mis favoritas quizás por ese riff y la andanada post punk que encontramos en su interior. «Pirotecnias» da un cambio de giro y a mi recuerdan a gente como Lagartija Nick en las voces.»Sensorial» te encamina a terrenos dispersos con su atmósfera hipnótica en un sonoro viaje astral y unas guitarras que vete a saber por que a mi me recuerdan al Mascis más inspirado.
Seguimos en trance al introducirnos en «Ensamble» y su post punk de guitarras atronadoras que se cuelan entre el susurro vocal. «Hermanas» adopta un mayor apoyo rítmico sin perder las estructuras que envuelven esta parte final del disco. Se hace más evidente aun en «Soluble» y su solución punk tamizada por la herencia recibida de corrientes posteriores. «Histamina» pone punto y final a este disco de Medicina. La banda con una propuesta tan interesante como alejada de corrientes más mainstream se posiciona para ser tenida muy en cuenta, sobre todo si estás interesado en lo que se está cociendo en las cocinas musicales de este país.
Yo los vi en directo y me quede impactado del sonido que tenian sin trampas de edicion ni postpriduccion.
Musicos de verdad