Nuevo disco de Chris Robinson y su hermandad. Nada nuevo en el horizonte con “Servant of The Sun”; el sexto LP de la banda sigue por las sendas psicodelicas donde se está acomodando demasiado con el peligro de volverse repetitivo. A lo mejor es que este es su ultimo disco como CRB, ya que unas pocas semanas antes de su lanzamiento, anunció que la banda se tomara una pausa indefinida, y que MacDougall ya no tocará el teclado en la banda. Asimismo de esta manera el tema «A Smiling Epitaph» suena a una declaración profética para el banda.
Robinson, Neal Casal, Adam MacDougall, Jeff Hill y Tony Leone, saben lo que se hacen y lo hacen como siempre muy bien. Hermosas letras de Robinson, posiblemente de las mas poéticas que haya escrito hasta ahora, y una música que si bien sigue siendo la misma que en sus anteriores discos encuentra camino entre arreglos bastantes curiosos y atrevidos, pero por mi parte noto algo de fin de una formula que ha estado muy bien durante una etapa de su vida profesional.
El disco es un buen disco, pero con una sensación de tedio bastante patente. Pero seguimos teniendo en estas dieznuevas canciones ese patina funky, los teclados vintage y Casal con sus líneas de guitarra hipnotizantes, y Chris sigue con esa voz tan personal que lo erige en uno de los grandes cantantes del rock. “Comin ‘Round the Mountain”, “Venus in Chrome” , “The Chauffeur’s Daughter”, etc… son composiciones exquisitas con algo de Little Feat, de sus amados Grateful Dead, música cósmica bajo el prisma de un americano que añora los setenta mas que nada en el mundo.
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