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Z! Live Rock Fest, ha llegado a su cuarta edición, pueden parecer pocas, pero ya se va viendo una evolución evidente dentro de la burbuja y saturación de festivales veraniegos de rock -metal.
En esta ocasión han apostado por dos grandes nombres de la escena power/speed Metal como son Gamma Ray y Kamelot, pero sin perder esa idiosincrasia con la que empezó a andar este evento basada en una selección acertadísima de grupos nacionales.
El “Z” como vulgarmente se le llama, está ubicado a las afueras de Zamora, en un recinto con un parking importante, ya que da servicio al campo de futbol municipal. Pero el Z, no es en el campo de futbol (aunque si sigue en esta progresión dentro de poco se hara allí), sino en un auditorio bastante cómodo, con sus respectivas gradas para descansar entre grupos, donde se ubican los conciertos principales, escenario Thunderbitch Stage, acompañado por otro escenario de menos amplitud, justo en la entrada del recinto, Red Mediaria Stage.
La zona de merchandising y comida es pequeña en comparación de otros macrofestivales, pero muy cómoda para el público en general. Lo que si se echó de menos, es mas “merchan” en la tienda oficial del recinto y sobre todo, camisetas comerciales del «Z».
Lo que parece claro es que este festival, le ha tocado lidiar con unos de los “monstruos” respecto a los veraniegos se refiere. Y es en la otra punta del país el Rock the Coast le podía quitar afluencia, pero no fue así y la asistencia estuvo a la altura.
Los conciertos comenzaron el viernes con un frío más propio de otoño o invierno que del comienzo del verano, ya que según iba entrando la madrugada no paraban de venderse en los puestos todo tipo de textiles de manga larga y objetos para calmar la falta de calor.
De los conciertos del primer día hubo grandes vencedores, como el primer destacado, los alemanes SODOM, con su thrash potente y rápido, destacando a la guitarra Bernemann que hizo las delicias de todos los allí presentes. Vinieron en plan festival y se marcaron todos su clásicos como «Agent Orange», «Sodomy and Lust», «The Sow is the law» o en su parte final «Remember the Fallen» y «Bombenhagel» dejando una sensación en general entre los seguidores de querer más, aunque esa sed nos la calmaron los baleares TRALLERY, otra de esas bandas nacionales que siempre hay que apuntarlas en la agenda. Gran concierto con un más que evidente enganche entre público y músicos. Un power trio para tener en cuenta en el futuro.
Otra vez de vuelta en el Thunderbitch Stage empezaron los suecos SOILWORK capitaneado por Bjorn Strid, quien es el alma mater de este grupo y lo demostró en el escenario, un concierto marcado por problemas técnicos de guitarra, pero que con entrega no se notaron demasiado. Un setlist marcado por su ultimo trabajo, pero sin dejar atrás clásicos como «Stabbing the Drama» o «Nerve».
Con la noche casi entrada y frío, mucho frío salieron los vascos VHÄLDEMAR, grupo clásico de Heavy Metal, con su cantante Carlos que es el hilo conductor de la banda. Se marcaron un gran concierto, con los instrumentos bien ajustados, haciendo vibrar a todos los allí presentes con temas de su quinto álbum, pero también con sus himnos como “Energy”.
Aquí llego el esperado concierto de GAMMA RAY, anunciado desde el principio como grupo enganche y como el más largo del festival, ya que fueron 2 horas de duración con el Señor Kai Hansen a la cabeza. Lo que si que hay que agradecer, es que haya metido a otro cantante ya que él no llega a sus agudos. Eso sí, Frank Beck tiene menos carisma en el escenario, que la especie de peinado en forma de ratilla que tiene Hansen en la cabeza.
Un concierto marcado por sus grandes himnos como «Land Of The Free», «Heavy Metal Universe», «Somewhere Out the Space», para que la tarareara el publico, «Heaven Can Wait», «Last Before The Storm», «Avalon» o «Send Me a Sign». Un concierto que no pasara a la historia de ningún festival, justito y poco más. Como resumen voy a dejar el inciso que en mitad del concierto me comentó Peter Goodman, viejo roquero del undergroud mesetario: “con este tío cantando las canciones de Hansen (referiéndose a Frank Beck), parece más una banda tributo que Gamma Ray.
Fue terminar y algunos ir a reponer fuerzas a los chiringuitos y otros a ver a SARATOGA. Su concierto para mí, que los he visto en muchas ocasiones fue decepcionante y una pena, porque venían con el típico setlist de festival, con sus canciones más conocidas y las más escuchadas de este último disco (como inciso diré que me parece un discazo tremendo), pero los problemas técnicos les hicieron sonar fatal y solo les salvó el oficio y las tablas que tienen, pero una mala noche la tiene cualquiera.
Mi noche terminó con los Madrileños HAMLET y ufff… estos chicos nunca fallan. La actitud es innegociable en este grupo y si encima juntas temas de su último disco Berlín (como antes he comentado de Saratoga, vaya discazo se han marcado estos también) más sus clásicos de siempre: «Vivir es una ilusión», «Irracional», «Egoísmo», etc…, te deja con la sensación de vamos al hotel que estos nos han calentado bien esta noche. Así terminé el primer día del Z.
Zamora ofrece muchas cosas para los que no solo viven el festival en lo que a música se refiere, y aparte de una bella y sensacional visita turística del glorioso románico de la ciudad, tiene un tapeo espectacular para coger fuerza para la segunda jornada de festival.
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El sábado empecé los conciertos con uno de esos grupos que tenía apuntado en la agenda: EON, los madrileños estuvieron sublimes, con un calor en el ambiente que nada tenía que ver con el frio del día anterior y con un directo potente y cañero, mostraron que son una de las mejores bandas de metalcore nacional. Cerraban la gira de su ultimo disco Nébula y no decepcionaron en la actuación. Su cantante Diego Cardeña tuvo una sintonía brutal con el público (aunque fueran las 17:30 y con un sol de justicia, estaba bastante bien de gente), con un grupo completamente sincronizado entre lo melódico y sus aplastantes guitarrazos, destaco su batería David Viana quien a base de baquetazos hizo que la gente saliera de la sombra en la que estaba refugiándose del sol y aunque al final tuviese algún problema, actitud así es la que falta a muchos grupos. Banda que por méritos propios se han ganado volver a este festival en próximas ediciones.
Una de esas grades sorpresas fueron los Castellonenses KILLUS, quien después de su «bolo» en el anterior Z live, repetían . Presentaban cantante nuevo, quien creo que es un acierto, Javi Sagittar, sólo le falta tocarse menos la cara en directo, porque se le va quitando el maquillaje y al final del concierto parece mas un deshollinador o una persona que acaba de salir de la mina, mas que una calavera. Bromas aparte, grupo perfectamente engrasado que con su puesta en escena hizo que su metal industrial gustara mucho a todo el que allí se encontraba.
El Sábado parecía una lucha a ver quien se marcaba el mejor directo y allí aparecieron PRIMAL FEAR, grupo que habitualmente los vemos a unas horas muy tempranas en festivales, pero ellos van a lo suyo con su potente heavy metal.
Ralf Scheepers y Matt Sinner disfrutan con su trabajo y eso fue lo que hicieron, disfrutar y que disfrutaramos con un público que ya estaba ganado desde su salida.
Con un sonido rápido, poderoso y con la actitud escénica de siempre, fueron desgranando clásico como «Blood Sweat & Fear» , «Nuclear Fire», «Chainbreaker» o como no «Metal Is Forever» que no hubo ni un alma en Zamora que no la cantara.
Por un problema técnico no pude ver a APHONNIC, por lo que el siguiente que estuve fue con THERION, una banda donde había mas gente en el escenario, que en la parada de taxi al cierre del festival y recordemos que esta banda lo forman 7 músicos (3 de ellos vocalistas). Con un sonido magnifico repasaron grandes temas de su carrera como: «Theme Of Antichrist», «Wine of Alugah», «The Blood Of Kingu» y la una de las mas esperadas «Son of The Sun», para cerrar con «The Rise of Sodom & Gomorra» y «To Mega Therion». Un sinfónico para disfrutar.
Después de este magnifico directo, llegó la fiesta de de los castellano-manchegos CELTIBEERIAN, donde con su folk metal hicieron disfrutar, con su buen rollo a los que abarrotaban el escenario Red Mediaria Stage.
Y llegó el plato fuerte del Sabado, KAMELOT, con un concierto emotivo, una duración de dos horas, que se llegaron a hacer cortas, donde la voz de Tommy Karevik estuvo magnífica en el repaso a sus antiguos temas y nuevos, acompañado por Lauren Hart y Diva Satanica. Un gran setlist con temas como: «When The Lights Are Down», «Veil of Elysium», «The Great Pandemonium» o los temas mas coreados como «The March of Mephisto», «Center Of The Universe», «Forever» o «Liar Liar». Un excelente cabeza de cartel, muy a la altura de todas las bandas que tocaron el sábado.
Llegó la hora de ZENOBIA, grupo que sube como la espuma en el panorama nacional y eso se noto con una gran afluencia de público, con su metal poderoso y animado y con Jorge muy bien a nivel vocal e interpretativo en escena, un concierto done destacaron temas como Ante tus ojos, una de piratas o la coreadísima para cerrar con Lo Llevo en la Sangre.
Para cerrar mi noche en el Z, me quedé a ver a los grandísimos Tierra Santa, que llevaban al escenario su concierto de esos 25 años en los escenarios, con sus himnos de toda su discografía, una mítica y emotiva actuación para cerrar este estupendo festival.
Dos días de lo mas intensos, que nos dejan con las ganas de empezar a saber cual es el cartel del próximo año, para poder repetir en este estupendo evento del cual tendremos que cuidar y apostar por él, para su crecimiento.
Como dirían los Barón, “Larga vida al Z, live”
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