Ya me lo avanzó el mismísimo Lazy Lane en el bolo de diciembre en La Burbuja de Castellón: «…no te lo puedes perder tío, va a ser la puta hostia!!!…«. Pues bien, puedo asegurar que no se equivocó lo más mínimo porque lo vivido el pasado 7 de enero en el Loco Club valenciano tras la resaca del Roscón de Reyes no fue ‘la hostia’…¡¡¡fue la re-hostia!!!.
Me daba muchísimo morbo, lo sabéis, ver juntas a las dos bandas de ‘hard & sleazy’ más en forma de nuestro territorio nacional y pude cumplir un sueño con el que he fantaseado en infinidad de veces, era perfecto, dos bandas sucias y convencidas de su callejero mensaje, los asturianos Leather Boys con ese Hard Rock de cloaca y putero que baila entre los 70’s y los 80’s y los anfitriones Jolly Joker llevando hasta el límite su propuesta angelina ochentera instalada en pleno Sunset Trip de L.A. Comencemos con las sensaciones de lo disfrutado…
Llegué con el bolo de los Leather Boys empezado por una puto despiste que tiene que ver con el sistema organizado para esa noche, los Jokers dan un bolo gratis al año y esa era la gran noche compartida con los ‘chicos de cuero’ pero claro, el aforo era limitado y la demanda era mucha por lo que, al llegar, la cola existente pensaba que era la de la ‘lista de invitados’ y allí esperé un rato cuando en realidad pertenecía a la gente que esperaba que fallase alguno de la lista para poder entrar…
Batallitas a parte, el hambre que tenía de ver por primera vez a los Leather Boys era tremenda, siempre he mantenido con ellos una relación estupendísima en la distancia y, aún con esto, se les nota que son unos tipos cojonudos que se desviven por dar lo mejor de sí mismos y agradecer en todo el momento el apoyo que siempre merecen. Vinieron con bajas en la formación original (Leather Sixty Nine y Leather Bluesman) que fueron suplidas con solvencia y desparpajo por Álvaro González y Triple L respectivamente.
Con respecto al bolo, joder, estos chicos no pueden negar que llevan el veneno del rock’n’roll dentro, llegué 
con «Sweet Revelation» y se comían el escenario con este tema tan Astbury/Duffy. En cuanto me instalé en primera fila le hice saber que Pupilandia los quería y no tardaron Leather Rose y Leather Sex en sacarme todos los colores haciendo mención de este blog a una sala llena hasta la bandera. Como os decía, agradecidos y se quedan cortos. Gracias mil.
El tracklist, como era de esperar, tenía que estar centrado en su imponente Back In The Streets (2014) dejándose tan sólo tres temas en el tintero y poniendo toda la artillería hardrockera en temas como el trepidante «Backstabber», el festivo y ‘alicecooperiano’ «Rock And Roll Gets Me High» y su himno por excelencia y antes de los bises, «Leather Gunner», que acabó por rematarnos antes de la traca final en donde se impusieron con claridad «Long Road» y «Rock&Roll Blowjob» (con Rose y Sex entre el público) clásicos indiscutibles de su debut de 2011. Estaba cantado en una noche como ésta y el ‘cock rocker’Lazy Lane salió para patear culos con todos los Leather con una intensa «Kickstart My Heart» que demostró el buen rollo que existe entre ambas bandas y las ganas de divertirse en todo momento. A destacar la labor de Leather Sex, comunicativo hasta decir basta, un ‘entertainer’ nato con sus ‘speechs’ llenos de ironía sexual y referencias constantes a los Dioses de nuestro Rock & Roll.
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Y llegó el turno de los grandes anfitriones de la noche, los espectaculares Jolly Joker que, con una audiencia más que caliente con la actuación de los asturianos, lo tenían todo para triunfar ¡como así fue joder!. Si la puesta en escena que ví en diciembre en Castellón fue tremenda con cuatro gatos, lo que ocurrió el pasado sábado fue antológico, con su público jodidamente hipnotizado y volviéndose loco con cada tema, con cada clásico, con cada movimiento serpenteante de Lane, con cada punteo kamikaze de Yannick, con cada rasgado del bajo de Luke y con cada mandoble baquetero de Alex.
De las cuatro veces que los he visto, clarisimamente este bolo del Loco ha sido lo más espectacular y entregado que he visto de ellos, crecidos ante el rockerío valenciano que besa por donde pisan y con la acostumbrada interpretación técnica que siempre es de sobresaliente vuelvo a recalcar que esta banda está preparada para asaltar el mundo mundial empezando por Japón que, a buen seguro, se los rifarían a las primeras de cambio.
El setlist, equilibrado entre los pelotazos de sus dos discos, no entraré en detalles y en citar canciones porque fue parecido al de la Ciudad de La Plana pero me gustaron mucho en concreto «Before You Die» y «Rip And Tear» y, como no, su mega-hit «Rockin’ In Stereo» con la sala volviéndose abajo, formándose cierto ‘pogo’ en mitad de la sala y con el Jack Daniels corriendo de boca en boca. ¡Esto es una jodida noche de Rock’N’Roll!, incluso cuando Lane se cabreó por un instante con su pie de micro al que inutilizó con socarronería ‘sleazy’…
Pero en una noche tan especial como esa tenía que haber sorpresas y mira tú por donde que, además de las acostumbradas covers de «Blackout» de Love/Hate y la ultra-festiva «My Good Reputation» de Hardcore Superstar, sus hermanos de sangre, Babylon Rockets (en concreto teclista y guitarra), hicieron acto de aparición para interpretar el «14 Years» de Axl que les quedó la mar de bien, así como un «Fire Woman» con Leather Rose realmente incendiario haciéndole la réplica a Lazy Lane encima de las tablas.
Y poco más me queda por decir, triunfaron por todo lo alto en su casa y con su gente (ojo que los Leather Boys lo hicieron también), y es que están destinados a ser adorados en todo el Universo siendo su siguiente paso el próximo 14 de enero en la Sala La Mala de Madrid por lo que, sin mucho esfuerzo, volverán a conquistar una Capital que se pirra por estas cuatro bestias pardas del Hard & Sleazy hispano. Veladas como ésta son las que le hacen a uno pensar en los tocapelotas que se empeñan todavía en afirmar que el Rock N’ Roll está muerto.
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