Hubo un momento en el que hablar del Pais Vasco y del punk era una simbiosis bien entendida. Evidentemente tanto desde Euskalherria se ha demostrado que son capaces de sacar todo tipo de bandas de diferentes estilos haciendo muy buena música y el tipo de punk que un día identificamos casi instintivamente con aquellos lares ahora suena igual de bien por otros repartidos por la geografía ibérica. Pero precisamente en el norte es donde tienen su punto de partido La Kontra que con este tercer disco llamado igual que la propia banda durante 30 minutos nos ofrecen un compendio de canciones rápidas de estribillos melódicos donde el mensaje de las letras se convierte en igual de importante que la música. «Tierra quemada» es el mejor ejemplo de que La Kontra huyen de ese sonido convencional que parece aglutinar a su alrededor como propuesta a muchas bandas empeñadas en discernir una y otra vez sobre el mismo epicentro. Y ahí reside el valor de La Kontra, ese respaldo melódico en las voces le da un punto de diferencia además de conseguir no restar ni un ápice de fuerza a su mensaje.
Editado por Maldito Records, este tercer disco grabado en Chromaticity Estudios Asua tiene un muy buen sonido. Destacan canciones como «Adicción» y la fuerza de su riff, la directa «Detrás de la pared» que abre el disco, la anteriormente nombrada «Tierra quemada» o «Flores por San Valentín», Sorpresa la que me he llevado con este disco homónimo de La Kontra. Rabia y puños cerrados. El punk no morirá jamás con discos como este. Recordad, siempre con La Kontra.
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