Nos enterábamos hace unas horas, que Kvelertak anuncian un par de fechas por el país, y de pronto, he recordado, que en Rock The Best Music, aún no nos habíamos detenido a hablar de su nuevo disco, porque a escucharlo, si que lo hemos devorado a conciencia. Es curioso, cuando de pronto, a todo el mundo le da por elevar a los altares a una banda. Cierto es, que los noruegos, se han ganado a pulso la atención de la gente, con sus dos discos anteriores, y el buen hacer en las giras en las que se han embarcado. Pocas veces, una banda con tan poco tiempo de vida, levantaba tanta expectación, añadiéndole la dificultad que puede presentar para algunos, que decidan cantar en su lengua natal. Pero la propuesta de la banda, capaz de cocinar dentro de su base oscura y extrema, ingredientes de otros géneros, les ha llevado a situarse de pronto, entre esas bandas que todos observan, y que ya alguno por sistema, comienza a calzarle críticas negativas.
Este tercer álbum, «Nattersfed», esperado por todos, principalmente por saber, cual es el camino a elegir por el sexteto noruego. Cuando alguien decide dar un paso en un sentido que no es el habitual, termina trasgrediendo esa capa de fans que ha conseguido obtener con esfuerzo. Habrá quien desee entender la evolución de la banda y no dude en recorrer el camino junto a ellos. A su vez, habrá quien decida que ese no es el sendero indicado, y tome la puerta de salida, en busca de parajes más acordes. Ambas posiciones me parecen lícitas, creo en la libertad del artista para decidir por donde encaminar su carrera, y por supuesto, en la del que compra discos y entradas, para abrazar o repudiar dicha decisión. Y seguro que este disco, va a levantar ampollas en unos y va a conseguir que otros se acerque y unan al elenco de seguidores de la banda, porque aún manteniendo a ratos ese halo oscuro y gutural que les caracteriza, han dado un paso hacia sonido más accesibles, metiendo la nariz de lleno en sonoridades hard rockeras.
¿Que me parece el disco?. Sinceramente, me gusta, muchísimo, un muy buen disco, y disfruto mucho de la evolución tomada. ¿Teniendo en perspectiva los anteriores?. Las comparaciones son odiosas, y este «Nattesferd» no me parece ni mejor ni peor, pero si a la altura de sus predecesores, lo cual ya es mucho, teniendo en cuenta el nivel. El disco se abre de manera brutal con “Dendrofil For Yggdrasil”, y su impronta black, lleno de blast beat, que sin duda, engarza con lo que nos tienen acostumbrados. Pero ya a las primeras de cambio, con el single «1985», llegan los cambios, esa profusión de melodía, donde se notan influencias del mejor hard rock, bajo el tamiz de la banda, evidentemente. Seguro que alguno se ha echado las manos a la cabeza, pero reconozco, que a mi me enganchó a la primera, quizás porque muchas veces me siento a gusto entre dos tierras.
La canción que da nombre al disco, te tiene en tensión, parece que nunca va a terminar de explotar, pero poco a poco se va introduciendo en vena, con esa guitarra fantástica, su querencia heavy y esos coros ultra melódicos. «Svartmesse» tiene un muy buen riff, muy pronunciado y clásico, con esa alternancia de ecos más oscuros en la voz que confrontan con la música. «Bronsegud» se mueve hacia terrenos más punk, directa, a por todas. Sorprende “Ondskapens Galakse”, con la que podrías viajar a los ochenta, y es que esas guitarras recuerdan a Van Halen. Sin embargo con “Berserkr” volvemos a la tralla pura y dura, derroche de energía, con esas galopadas tan heavys. Propicia para el debate y la disputa es «Heksebrann”, tan apartada de lo que nos tienen acostumbrado, una canción para escuchar con atención e ir empapándose de todos sus matices, que no son pocos.
«Nekrodamus» es opresiva, potente por su pesadez, en la línea del mejor doom de escuela clásica. Ya os digo, que seguro que este disco va a levantar ampollas, que habrá quien decida no entenderlo, porque no es lo que busca, y habrá quien se acerque al grupo atraído por las nuevas sonoridades. Yo lo he disfrutado mucho, y ahora solo queda ver, como son capaces de defenderlo en directo y la reacción que van a conseguir extraer de la gente.
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