Quinta noche de Mark Knopfler por territorio español y, como era de esperar, todo sigue bajos los mismos cauces. Nada nuevo en el horizonte.
Mark Knopfler
Plaza de Toros Las Ventas
Madrid 29/07/2010
Setlist
1. Border Reiver
2. What It Is
3. Sailing to Philadelphia
4. Prairie Wedding
5. Hill Farmer’s Blues
6. Romeo & Juliet (Dire Straits)
7. Sultans of Swing (Dire Straits)
8. Done With Bonaparte
9. Marbletown
10. Speedway at Nazareth
11. Telegraph Road (Dire Straits)
———
12. Brothers in Arms (Dire Straits)
13. So Far Away (Dire Straits)
14. Piper to the End
Crónicas:
Agencia EFE: Mark Knopfler se queda a centímetros de abrir la puerta grande en las Ventas.
El País: Mark Knopfler agrada a sus seguidores con su folk tranquilo.
Añado la crónica de Jorge Arenillas publicada en The Rolling Stone. Realmente si esto no es una crónica dura, pocas lo van a ser. Siendo el título lo mas «blando» de todo. Conteniendo la crónica frases antológicas como las siguientes:
«Para que la conquista fuera inapelable, siguieron con Sultans of swing; y juro que no digo esto por provocar, pero a mí me sonó como si la tocara la orquesta de una verbena. A la plaza pareció encantarle, que conste.»
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Esta tarde actúa en la plaza de toros de Bilbao. Sirva esto de ejemplo de reutilización de plazas de toros, aunque el señor Knopfler no es santo de mi almanaque y no pagaría nunca por verlo ni oírlo. Saludos veraniegos, Perem.
Uhhh, Noe, vigila, vigila que si dices según que sobre los Toros te van a llamar anti patriota o alguna cosa de esas…. Pero si, coincido, nada mejor que reutilizar las plazas de toros de esta manera.
Un saludo Noe.
Por cierto, no te gusta Knopfler?
Pues no, no me gusta. Ya te he puesto en un comentario en la entrada sobre el concierto de Bilbao que me da vergüenza que viva tan descaradamente de las rentas. Es que ya no necesitará ni ensayar.
Noe, seguro que te va a gustar la crónica, aparecida en The Rolling Stone, del concierto. Impagable!!!
Saludos.
Desde luego ¡¡que grande es el viejo Knopfler!!. Consique sin despeinarse y con la única provocación de su obra universal y de su pose de hombre tranquilo lo que otros apenas logran con una larga lista de escándalos de cara a la galería.
Curiosa forma de provocación que parece atormentar a todos los que de una u otra forma tienen la necesidad de mostrarse «diferentes».
Larga vida al Rock&Roll, y a Mr. Knopfler.