«Por respeto a público y artista se ruega silencio durante la actuación. Muchas gracias«. Tal texto se leía al fondo de La Boite. El ruego lo firmaba la promotora, The Mad Note Co. Acudíamos a un concierto acústico de Jaime Wyatt, a quien presentó Manolo Fernandez, quien también pidió respeto y atención. Los amantes de los acústicos, temerosos del problema de nuestros días, esta vez salimos contentos: el ruego funcionó y el silencio permitió a la artista explayarse ante el calor y el asombro de un público concentrado. Hubo algo especial. Hubo conexión.

Jaime, ataviada con un tradicional mono verde y sombrero rural, se lanzó a interpretar todos los temas de su primer álbum, Felony Blues, en su versión huesuda: voz y guitarra. La ex-outlaw descubrió sus cartas poco a poco: primero, la excepcional voz, sin medir, a pleno pulmón; después, su encanto, monologando como si de una reunión de amigos se tratase y, por último, lo cuidado de su personaje, tan creíble porque, claro, es real. Wyatt se refiere a menudo a su estancia en la cárcel con humor, «para disminuir la vergüenza que me produce», y con la misma naturalidad con la que comentaba el frío que había pasado en Inglaterra.

Intercalando alguna que otra versión de Merle Haggard -«Branded Man», por género y letra, le viene como anillo al dedo- y «Thirteen», de Big Star, la cantautora interpretó con soltura e intensa convicción todos sus temas grabados, a los que también añadió una espectacular «Ain’t enough whisky» («una no puede ser cantante de country si no le canta al whisky») que incluirá en su próximo trabajo.

Dado el silencio reinante, el público, tan receptivo, liberaba la tensión estallando en aplausos entre tema y tema. La distensión animaba a la artista, crecida por las alabanzas, a interactuar con los presentes mientras afinaba, aprovechando también para explicar qué inspiró cada canción, mostrándose abierta y extremadamente simpática.

El recital terminó con «Wasco», «Marihuana Man» y la promesa de volver pronto a la capital que tan bien la había tratado. Sabemos, gracias a su anuncio en pleno directo, que formará parte de Huercasa 2018, pero también nos gustaría verla en Madrid, en sala y, si puede ser, con banda, por contrastar, pues ya sabemos que por su cuenta se defiende como los grandes. Sólo espero que, para la próxima, el público se porte igual de bien, pues si no sería imposible repetir momentos como los de anoche.

Setlist de Jaime Wyatt en Madrid

1. Wishing Well
2. Stone Hotel
3. Misery and Gin (Merle Haggard)
4. Giving back the best of me
5. Long Way Home
6. Ain’t enough Whisky
7. Branded Man (Merle Haggard)
8. By your Side
9. Thirteen (Big Star)
10. Your loving saves me
11. Wasco
12. Marihuana Man

by: Edgar

by: Edgar

A la música le dedico la mayor parte de mi tiempo pero, aunque el rock me apasiona desde que recuerdo, no vivo sin cine ni series de televisión. Soy ingeniero informático y, cuando tengo un hueco, escribo sobre mis vicios. Tres nombres: Pink Floyd, Led Zeppelin y Bruce Springsteen.

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  1. Estoy muy de acuerdo con la lista donde a mi gusto cambiaria muy poco y totalmente de acuerdo con ese…

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