Black Sabbath – 13 : Critica del disco. Review. (Nueva reseña del disco)

13, el nuevo y esperado disco de Black Sabbath, ya  fue oportunamente analizado y diseccionado en, posiblemente una de las mejores críticas del mismo que puedas encontrar en la Red, por @Rpuertas, tal como se comentó en su momento, una de las grandes voces autorizadas sobre el especial Universo Black Sabbath, y ahora, el que aquí escribe, evidentemente mucho menos autorizado, tras innumerables escuchas de este disco, se ha decidido a entrar en la crítica de este disco 100% Sabbath, aunque con algunos matices que hace que la nota final, si bien va a ser alta, no acabe de conseguir cruzar la barrera del notable.

Se acaba de mencionar que es un disco 100% Sabbath, y esto tiene, evidentemente su parte buena, pero también arrastra algunos condicionantes que hace que el disco en algunos momentos raye una peligrosa línea como es la de resultar un pelin plano.

Bastan los dos primeros minutos de End of the Beginning para entender que Ozzy & cia se han tomado en serio este divertimento de volver a juntar bajo el legendario nombre de Black Sabbath a los miembros de la primera formación, aunque con la falta de Bill Ward, por mucho que su sustituto haga muy bien su trabajo, que nadie se engañe no es el Black Sabbath originario al 100%, pero al fin y al cabo, por mucho que ahí esté Geezer Butler, el morbo y el interés era volver a ver juntos a Iommi y Ozzy, y de eso al fin y al cabo va este disco que, para desgracia de Ozzy, deja bien claro que el transcurso de los años no pasa en balde y unos soportan mejor el paso del tiempo que otros.

Pero no adelantemos acontecimientos y sigamos instalados en los momentos iniciales de este ’13’ , un número que junto con esa atmósfera pesada, oscura, donde el «tritono» es el rey absoluto, de golpe nos quiere trasladar, como si de un viaje en el tiempo se tratase, a los 70 en los que Iommi & Ozzy hicieron saltar por los aires todo lo conocido para hacernos atravesar la puerta que conduce directamente al averno, y eso, si se analiza correctamente es bueno, porque nos encontramos con la autentica esencia de BS, pero ya en esos ocho minutos de End of the Beginning, donde destaca poderosamente las líneas del bajo de Butler, como así va a ser en lo que resta de disco junto con el espectacular trabajo de Iommi, nos damos cuenta de que pocas van a ser las sorpresas que el disco nos va a deparar y todo va a girar en torno a lo mismo, y nada nuevo nos va a deparar este 13; es como si el grupo hubiese analizado cuales fueron sus mejores momentos, y una vez, a modo de un cóctel realizado por el mejor de los barman, mezclados y debidamente pulidos y remasterizados se hubiesen materializado en este nuevo disco.

El sonido pesado, oscuro, denso de los mejores BS, tras décadas de descanso, se nos aparece de golpe en este 2013, pero si bien el disco en la mayoría de sus partes se arrastra, tal como tiene que ser para hacernos transitar por las tenebrosas sendas que llevan marcadas a fuego la iniciales Black Sabbath, también junto a él se arrastra una ya envejecido Ozyy al que, por mucho que los ingenieros hayan conseguido disimular sus actuales carencias, se le nota ya agotado, aunque algún que otro gran momento tenga en el disco. Sí, End of the Beginning y sus ocho minutos se han encargado de dejar bien claro de que va este ’13’.

Y ahora le toca el turno a la repetitiva God is Dead? que, una vez llega a su fin, solo queda decirle a Ozzy que sí, que nos ha quedado claro el mensaje y que no siga repitiendo una y otra vez el título de la canción, que sí, que God is Dead? y que tampoco hacía falta alargar tanto la canción, aunque siempre es una gozada cuando Iommi, una vez Ozzy se dedica a meditar, aparece, tal como ya sucediese en el tema anterior, de la nada aparece para dejar claro que pocos, muy pocos guitarristas han conseguido dotar una sonido tan particular a un grupo de Rock, y es que a lo largo de todo el disco, si bien Butler merece ser reconocido de principio a fin, sin duda alguna, el trabajo de Iommi con su guitarra es lo mejor que este año 2013 verá. Riffs magistrales que te tumban de espaldas, solos estratosfericos que en algunos momentos el que aquí escribe ha llegado a pensar que podría haber sido manufacturados por el mismísimo Page de la década de los 70.

En Loner, cuyo tema ya se olvida de los ocho minutos ya parece intuirse que Ozzy nos guarda algo escondido bajo su manto y es que aquí sus líneas vocales deciden dejar de arrastrarse y de golpe, como esa piel que lleva años meses sin ser acariciada por los rayos solares, adquiere un nuevo y mejor color. En este Loner el grupo se mantiene en un segundo plano para dejar que sea Ozzy el encargado de dar un paso al frente que no solo se mantiene, sino que se acrecenta en esos casi cinco minutos espectaculares de Zeitgeist, en los que una hipnótica introducción a cargo de la acústica de Iommi junto con esa percusión de Brad Wilk dan paso a un autentico recital vocal de Ozzy en la, sin duda su mejor aportación a este ’13’ en la que consigue, de principio a fin, dotar a este tema de todos los matices necesarios para que sea uno de los grandes momentos del disco. Sí, aquí Ozzy resurge con todo su esplendor y es el culpable de que ante este Zeitgeist nosotros, simple mortales, no tengamos constancia de a donde nos quieren conducir BS, y si tras ese camino nos encontraremos ante un estanque dorado o, por el contrario, estaremos ante las puertas donde mora el señor de la oscuridad.

Age or Reason es el tema encargado de abrir la segunda parte del disco y aquí, de nuevo y ya va a ser así hasta la finalización del disco, el grupo recobra toda la energía y densidad para volver a cuadrar la cuadratura del circulo. Sí, de nuevo el barman nos vuelve a servir el mismo cóctel con los mejores momentos de BS y ante nosotros volverán a desfilar una autentica orgía de riffs, de tritonos, de solos, de líneas de bajo colosales siempre acompañados por la contundencia de la batería para volver a dejar claro que, ves a saber si por una sola vez puntual, o por el contrario esto solo es el principio, y van a venir nuevos trabajos,que Black Sabbath tienen el nombre marcado a fuego en el Olimpo de los más grandes.

Pero si bien, tal como comentaba Rafa en su crítica, Damaged Soul con esos ocho minutos de Blues satánico donde el tritono se encarga de hace volar por los aires toda la estructura clásica de lo que marcan las escuelas, es otro de los grandes momentos de ’13’. el disco no consigue superar la barrera del ocho, ya que una sola escucha de Bible Black, tema perteneciente al «The Devil You Know· de Heaven & Hell, disco que vio la luz en el 2009, basta para darse cuenta de que en la vida, y más cuando uno está de vuelta de todo, hay que saber jugársela y arriesgarse y no refugiarse en la comodidad de repetir una y otra vez los mismos golpes desde el fondo de la pista.

Sí, y una sola escucha de «The Devil You Konw» basta para recordar una vez más que el malogrado Dio ha sido el único y más grande sumo sacerdote de la oscuridad y que todos los demás, Ozzy incluido, se quedan lejos, muy lejos de su estela.

Sí, una sola escucha de «The Devil You Know» basta para darse cuenta de que ahí Iommi y Dio trabajaron más duramente el proceso creativo para ir más allá de repetir una y otra vez los mismos parámetros, cosa que en este ’13’ no ocurre, donde se ha ido a repetir la formula del éxito ya conocida.

Sí, y una sola escucha de este ’13’ basta para recordar una vez más que Iommi ha sido, y es, el único y más grande sumo escudero del sumo sacerdote de la oscuridad, y que con su guitarra es capaz de abrir las puertas del averno.

’13’, al que el que aquí escribe le casca un 8, es un disco que, sin duda alguna va estar dentro de los tres mejores discos del año, y que si no viniera manufacturado por unos Black Sabbath que no han querido arriesgar más de lo necesario, es decir, nada, entraría de lleno en la línea de la excelencia.

Y, aunque no venga a cuento, tras la escucha de este disco de los Black Sabbath ,uno se pone a imaginar lo que podría ser un nuevo disco de Led Zeppelin, y la verdad es que con solo que siguiese los parámetros de este ’13’, sin duda alguna, estaríamos ante el disco del año, y es que tipos como Ozzy, Iommi, Plant, Page, aún a medio gas son tan grandes…..

Nota: 8